✰αιɢσ çαｍβɪσ ëη ｍɪ✰（ rυβëιαηɢëι,ωɪɢëᴛᴛα,ιυzαηα, sᴛαχχβγ）

❝②①～ᴜη ᴄᴜᴍριëαñσs ησ ταη ᴍαισ❞

Narrador omnisciente.

Ya había pasado un tiempo desde aquel acontecimiento inoportuno para Samuel que le costó varias noches de insomnio y varias lágrimas perdidas por alguien que no valió la pena.

Le costó salir de ese pozo donde se encontraba después de lo ocurrido esa tarde donde su mundo se derrumbó delante de sus ojos.

Seguía sin encontrar una explicación a los actos de actualmente su ex, pero que en ese momento era su novio. Simplemente se seguía preguntando el por que lo había hecho. Y justo el esa fecha tan especial y esperada para ambos.

Después de unos días llego su cumpleaños, la verdad el no contaba con grandes energías como para hacer una fiesta, realmente deseaba quedarse en su casa, mejor dicho en su silla frente a su pc.

Y así lo había hecho, pasó toda la tarde hablando por Skype con su gran amigo Frank y su nuevo amigo Fargan, la verdad se la habaian pasado de lujo los tres, jugando diversos juegos mientras charlaba de puras tonterías. Los tres eran un trío perfecto. (Diganme que no fui la única que lo mal pensé :v)

A las horas Frank tuvo que abandonar la conversación ya que era hora de salir a comer con su novia, luego de despedirse los otros dos amigos se quedaron hablando hasta tarde.

Narra Samuel.

No me lo creo, este día no había sido tan malo después de todo, este chico es fantástico, me la eh pasado de maravilla a su lado, hablando con el me Di cuenta que tenemos muchas cosas en común. Más de lo que podría haber imaginado, ambos nos completamos más de lo que nosotros creíamos.

La pasamos de maravilla no puedo creer lo Genial que se este chico por un momento me hizo olvidar de todos los problemas que había causado Guillermo hace un par de días. Me alegro de haberlo conocido.

Pasamos el resto de la noche conversando y tonteando hasta que llegó la hora de que él se tenía que ir ya que mañana tenía que hacer cosas y tenía que levantarse temprano.

Me dio algo de pena porque no me quiere sentir sólo otra vez ya que él me hacía sentir muy bien pero tampoco querías ser egoísta así que sin más me despedí de él amablemente y corte la llamada.

Luego de quedarme como mínimo 10 minutos frente la pantalla sin saber qué hacer ahora, me levanté y y fui directo al baño me di una ducha para refrescarme y luego me tumbe en la cama para tratar de conciliar el sueño aunque fue algo imposible de hacer ya que no podía parar de pensar en lo que había ocurrido esa tarde y en lo especial que era ese chico.

Narra Alex.

Al fin, estoy en casa no aguantaba ni un segundo más en esa habitación del hospital, a penas llegue fui corriendo al jardín para saludar a mi pequeño no tan pequeño perro.

-¡¡Máx!!-. Dije alegre a lo que enseguida salto lamiendo todo mi rostro, sólo me límite a reír y sonreír, me hacia tan feliz tenerlo conmigo. El era mi mejor amigo sin duda.

-Venga que de seguro mi amigo tiene hambre-. Camine hacia la cocina y comienzo a hacerle su comida favorita, el arroz con atún, moría por comer eso y supuse que mientras no estuve nadie se había encargado de hacerle su platillo favorito.

Después de haberle cocinado a máx me hice una limonada y me senté en el salón a jugar con la consola, luego de estar jugando por horas ya no soy consiente de cuanto tiempo estuve jugando me iba a dar una ducha hasta que escuche el sonido del timbre. Confundido por que no esperaba a nadie camine hacia la misma para abrirla....

Narra Frank.

Desde que Alex salió del hospital no se nada de el, mis amigos me habían dicho que el estaba mucho mejor que sólo le quedaban cicatrices, eso es bueno.

Hoy estaba sumamente aburrido y sin saber que hacer así que decidí ir de visita por su casa, si soy consiente de que probablemente aún no se acuerde de mi, pero necesito verlo y decirle lo mucho que lo quiero.

El camino se me hizo corto, iba viendo el cielo caminado con un paso lento y tranquilo, al llevar pude notar cierto nerviosismo dentro de mi, y no sabía el porque, sólo se que me moría de nervios en ese momento.

Toque el timbre y espere a que el llegará a abrirme la puerta.

Narra Alex.

Abrí la puerta y vi a un chico alto, pelinegro, muy guapo la verdad, sacudi mi cabeza sacando esas ideas y lo mire confundido, me parece conocido pero no se quien es.

-¿Hola? ¿Que presisas?-. Lo mire nuevamente, cabe decir que tuve que levantar un poco mi cabeza ya que el es mucho más alto que yo.

-Alex, ¿Aún no te acuerdas de mi?-. Dijo el con notoria tristeza, me dio bastante pena, pero por más que intento no puedo recordarlo.

-No, lo siento mucho, pero ¿haz de ser alguien importante no?-. Lo miro y me hago a un lado para que pase. -Pasa, podríamos charlar si quieres-. Sonreí y le invite a sentarse en la sala, el no dijo ni una sola palabra, sólo se sentó y miro el piso.

-Soy tu mejor amigo, ¿ya no recuerdas todos lo bellos momentos?-. Susurro y su voz se notaba algo cortada.

-oh valla, con razón te me hacías familiar, no recuerdo cada momento exacto pero si recuerdo tu rostro-. Por primera vez lo vi sonreír, joder su sonrisa es bellísima, este chico es increíblemente lindo.

-¿Quieres ir a tomar un helado como solíamos hacer?-. Nombró el chico y yo asenti, la verdad me gustaría pasar tiempo a su lado y conocerlo más, aunque se supone que ya lo conozco pero no recuerdo.

Después de eso se paro y se acercó y me tomo de la mano, sentí un sentimiento extraño, pero agradable, le regalé una sonrisa y juntos nos fuimos de la mano como esas típicas parejas felices por la vida, este chico parece que si es importante para mi, pero necesito saber cada cosa de el. Necesito recordarlo haz memoria Alex por favor.........

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