¿Señora Uchiha o Hyuga?[Finalizada]

Capítulo 3: Venganza

- Mitsuki...- Susurro Sarada mientras se soltaba de su agarre y corría para salir.

Pasaron unos días y Sarada ignoraba a Mitsuki en la escuela mientras cada vez se acercaba más con Boruto...

- ¿Sigues molesta con Mitsuki?- Preguntaba Boruto que ya la veía un poco decaída por la situación.

- Si, no creo que nuestra relación vuelva a ser la misma.- Dijo mientras jugaba con la comida.

Terminó la escuela y Sarada regresó a casa donde continuaba su día normalmente. Durante la noche alguien tocaba a su ventana muy sigilosamente, pero el sonido constante la despertó, se colocó las gafas y fue a ver.

- Boruto, ¿Qué haces aquí?- Decía sorprendida.

- Vamos a dar una vuelta.- Esas únicas palabras la convencieron, con ayuda del Uzumaki bajo por la ventana y salió de aquella enorme mansión sin que se dieran cuenta sus padres. Subió a la motocicleta y se abrazó fuerte del muchacho.
Boruto condujo hasta un lago donde siempre iba a pensar.

- Esto es muy hermoso.- Admiraba el paisaje. Aquel chico acomodo unas sábanas en el césped para poder recostarse, ella se acurrucó en su pecho sin pensarlo, el cálido latido de su corazón la tranquilizaba.

- Sarada...- Pronunció nervioso.

- Me dirás que estas enamorado de mi.- Le dijo anticipando sus palabras.- Eso ya lo sé.- Se recostó sobre su pecho mientras lo veía a los ojos. Ambos se sonrojaron intensamente nunca habían estado a tal distancia. Él aprovechó la oportunidad la abrazó fuertemente y se acercó con cautela mientras veía de reojo sus labios, hasta que los suyos se unieron y prosiguió a besarla...

- Boruto...- Llamó a su acompañante mientras era despertada por la luz del sol naciente.- ¡Boruto! Nos dormimos.- Se sobresaltó mientras veía a su alrededor y se cubría con u a sabana.- Tienes que llevarme a casa.- Insistió mientras lo movía una y otra vez. Tomando las cosas subieron a la moto para regresar a casa, el corazón de la chica se aceleraba más y más,  pensando en que no llegaría a tiempo. Todo parecía estar tranquilo y sin ruido, ella entró por la puerta principal, y camino sigilosamente cruzando la sala.

- ¿Dónde estabas?- Se paralizó y se puso blanca como la nieve.- Es broma, sólo corre antes que alguien más te vea, mamá sigue durmiendo, pero Sasuke no tarda en despertar.- Decía Shinki que se encontraba en la sala bebiendo una taza de café mientras leía el periódico.

- Gracias.- Susurro mientras caminaba  apurada para llegar a su habitación, cambio su pijama desordenó la cama y entró en ella.

- Cariño, siempre despiertas muy temprano.- Decía Hinata que lo veía en sala, en ese momento él casi se ahogaba con el café,  pues habían pasado aproximadamente 3 minutos desde que Sarada había llegado.

- Mamá, ¿Cuánto llevas ahí?- Trataba de controlarse.

- Voy despertando, ¿Qué pasa?- Lo notó. Pero este negó rotundamente todo.- Esta bien, ayúdame a hacer el desayuno, ve a despertar a Sarada y a tus hermanos, sólo a Gaaji no, toda la noche no paro de llorar.- Hinata se encontraba muy cansada, las ojeras debajo de sus ojos estaban muy marcadas tanto que en la cocina dormitaba mientras preparaba el desayuno.