"ANEW" (De nuevo) - TRADUCCIÓN AUTORIZADA

CAPÍTULO 24:

*NOTAS DEL AUTOR/A:
"Trivia N°2: En el Canon de MCU, Stephen descubrió la magia en septiembre de 2016. En este fic, también descubrió la magia en septiembre, pero en 2011. Cinco años antes.

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Stephen se cruzó de brazos y golpeó con el pie en el suelo de parquet. Wong no estaba a la vista. El gruñón bibliotecario había alejado a Stephen de la Torre Stark con divagaciones incoherentes del destino y la suerte, solo para abandonarlo en el momento en que entraron en el Santuario de Nueva York.

-¿Wong? -preguntó Stephen, pero nadie respondió. Él era de poca utilidad desde lo tecnológico y había más que suficiente genio creativo entre Tony, Selvig y Banner, por lo que Stephen se había ocupado de proteger el equipo. No era poca cosa, teniendo en cuenta la rapidez con que se acumulaban las cosas. Si alguna vez hubiera habido un día en el que pudiera prescindir de distracciones, hoy sería ese día.

-¿Hola? -Stephen subió los escalones que lo separaban de la entrada, donde Wong había desaparecido hace diez minutos. Daniel Drumm, protector del lugar sagrado también estaba ausente.

La voz de Stephen hizo eco en el gran salón. Nunca había explorado el Santuario de Nueva York en profundidad. Las pocas veces que había estado allí había esperado en el vestíbulo para que el maestro Drumm recuperara un objeto u otro. Stephen viajó al segundo piso y se encontró con una galería llena de gabinetes. Mostraban objetos curiosos. Debe haber habido cientos de artículos de todas las épocas, instrumentos de arcilla, máscaras con melenas peludas, abrazaderas de metal que se asemejan a dispositivos de tortura y...

Una capa roja.

Stephen nunca había visto algo así. Estaba bellamente hecha, con broches a juego en el frente, un exterior de color burdeos y forro a cuadrados negro y rojo. El revestimiento estaba un poco descolorido, evidencia de que la capa era muy querida por su dueño anterior. Stephen estudió la capa de levitación mientras se balanceaba suavemente en el aire.

Salió de en frente de la vitrina con un gesto de apreciación por la delicada artesanía. Solo un pasillo se extendía desde la galería y había tres puertas al final. Cada puerta conducía a una ubicación diferente. Stephen abrió el que conducía al océano. Al otro lado del umbral, las olas chocaban contra la costa y mojaban las botas de Stephen. Había un interruptor al lado. Lo presionó y la vista del océano se volvió hacia uno de los desiertos.

Con estas puertas, Wong podría estar en cualquier lado. Sin poder elegir, Stephen regresó al lugar donde comenzó. Él estaba en medio de los gabinetes. Esto era absurdo, los alienígenas iban a tocar en cuarenta y ocho horas y Wong eligió ese preciso instante para llevarlo en una persecución de fantasmas.

Stephen se dirigió al lobby. Iba a dejar a Wong una nota y hacer un portal. Llegó a la mitad de los escalones cuando escuchó un fuerte golpe. Un pliegue se desarrolló entre las cejas de Stephen; él había estado seguro de que el santuario estaba vacío. Retrocedió los pasos a tiempo para escuchar otra explosión.

Dentro de su vitrina, la capa había convertido una esquina en un puño y golpeaba insistente el vidrio. Los sordos golpes se convirtieron en rápidos golpes cuando Stephen se redobló.

-Basta -Stephen susurró y la capa dejó de tocar. No por primera vez ese mes Stephen cuestionó su cordura. Él estaba hablando con una prenda de vestir. Aunque en su defensa la capa era claramente sensible, además, él era un hechicero, su novio un superhéroe y juntos iban a abrir un portal desde el cual los alienígenas ingresarían. Nada de lo sucedía estaba fuera de control en este punto.