"Reliquias rotas"

"Décimo acto: Un hombre inquebrantable" (Segunda parte)

"Se trata de un mensaje de la señorita Pepper, de hace un par de días"

Una reluciente anillo dorado cayó del sobre, el mensaje en su interior era completamente claro, la fémina optó por deshacer el compromiso entre ambos debido a la situación actual y en como ella se veía incansablemente involucrada. Una doliente punzada se apoderó de su pecho y esta vez, no se trataba de una falla en el baúl azulado. El filántropo padeció una sensación de asfixia, una carga más allá de lo físico y no se encontraba dispuesto a quedarse en ese sitio, al menos, no por el momento, así que puso en funcionamiento una de sus armaduras —Viernes, deja que el doctor se ponga cómodo o que vuelva  a su residencia— Dio su última orden antes de partir presuroso al encuentro de su ex prometida, misma que la inteligencia artificial cumplió de inmediato. 

El acuerdo fue escuchado con fastidio de parte del neurocirujano ¿Enserio le estaba poniendo condiciones? Sin poder evitarlo,el pequeño aro de oro fue visto por el castaño, una sortija de matrimonio. La expresión y el humor del millonario se vio alterado después de leer el texto escrito en prosa, un sentir que desafortunadamente conocía con antelación, el neurocirujano estaba extrañado ante la nueva orden a la máquina, pero tampoco deseaba quedarse por más tiempo de ese modo.

"Disculpe la molestia, doctor"

La presión que privaba sus extremidades tanto inferiores como superiores se vio disminuída hasta desaparecer, la disculpa por parte de la "compañía" del filántropo fue pasada por alto al ver el rápido despegue del playboy, uno tan veloz como para alcanzarle con la capa de levitación — No es cierto... — Habló por lo bajo ante el problema que se manifestaba, había perdido de vista al azabache y el templo no podía estar sin vigilancia por tanto tiempo, con decisión, caminó un par de metros y empleando sus manos, abrió un acceso  al Sanctum Sanctorum. Estuvo apunto de cruzar, cuando el manto rojizo tiró sutilmente de él, suavemente, no lo suficientemente fuerte como para hacerle regresar, o para evitar su andar, sino, como lo haría un infante para recordarle y de cierta manera, suplicar que se detenga.

Hizo una promesa al rubio... Una muy presurosa e insensata, una que le ataba por la influencia y respeto que el hombre más noble tenía en él, un suspiro salió del mago al tiempo que volvía, una caminata digna de una decisión complicada ocurrió por la habitación aún con el portal en funcionamiento —Ah... ¡Maldición! — Maldijo entre dientes mientras daba un golpe al escritorio que reposaba a un lado, un levantamiento de la palma de su mano izquierda y un despliegue hicieron desaparecer dicha entrada.

El hechicero debía encontrarle, sin embargo, no podía gastar tiempo en una búsqueda por toda la ciudad, una que contenía altas probabilidades de fracaso. Stephen necesitaría buscar minuciosamente por su entorno una hebra de la cabellera corta del pelinegro, algo ridículamente tedioso, hasta claro, que recordó a la voz digitalizada — ¿Continúas aquí? — Cuestionó a la inteligencia artificial, obteniendo una contestación favorable — Escucha, para que mi estancia sea cómoda requiero del cepillo de peinar que pertenece a tu amo, tantos sucesos agitados han ... Arruinado mi imagen — Mintió tomando ventaja de la orden tan vaga y general que le brindó el genio.

"Efectivamente, doctor ¿Un cepillo? Por supuesto, diríjase un par de pisos hacia arriba, la habitación de Tony se encuentra en la segunda puerta" 

Al recibir las indicaciones, subió al piso indicado, teniendo precaución llegó a lo que parecía, eran los aposentos de Tony, visualizando el objeto.  Strange cogió entre sus manos el artículo personal del playboy y tomó una pequeño cabello que difícilmente quedó atrapado. Colocó la hebra oscura en sus palmas e inició a frotarla, un conjunto de escasas chispas rojizas escapaban de dicha actividad, sus manos se separaron y moldearon la energía surgida del pequeño fragmento de ADN del millonario, estirándola, contrayendola y al ser más fuerte, la lanzó frente a sí, abriendo un portal al sitio donde Tony estuviese, un encantamiento que ejecutó para ayudar al dios del trueno a encontrar a su padre.