Capítulo 3

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Y así siguió pasando el tiempo, día tras día, semana tras semana.
El tiempo pasaba lenta y tortuosamente, acercándose cada vez más a la dichosa coronación de Mabel Pines.

En ese momento, Dipper se encontraba caminando por los amplios pasillos de aquel castillo, dirigiéndose hacia la habitación en la cual su novio trabajaba.
Caminaba sumido en sus pensamientos, esperando esperanzado que el rubio no estuviese trabajando en aquellos momentos.

La verdad, había un tema que Dipper no podía sacarse de la cabeza, y al cual, sinceramente, tampoco quería dar mucha importancia: últimamente sentía que Bill estaba muy distante. El castaño sospechaba que algo estaba pasando, pero sólo esperaba que no fuese nada realmente importante.

Luego de unos minutos caminado, se detuvo frente a una gran puerta dorada, a la cual se quedó mirando por un par de segundos, como dudando si entrar o no, sin embargo, finalmente decidió soltar un suspiro y comenzar a abrirla lentamente, mientras miraba el interior de la habitación, logrando así divisar al chico de cabellera dorada de pie, con un grueso libro en la mano, leyendo algo de una de sus páginas mientras movía rápidamente los labios, pero sin que sonido alguno se escuchase en la habitación.

Al abrir completamente la puerta, un pequeño crujido se escuchó, provocando que el Cipher volteara rápidamente, posando sus ojos ámbar en los ojos chocolate del castaño, quien le dedicó una pequeña sonrisa de lado. El mayor rápidamente cerró el libro, dejándolo de lado y devolviéndole la sonrisa al contrario.

-¡Pino!- dijo alegremente- ¿qué te trae por estos lados?
-simplemente quería verte- contestó el chico, mientras caminaba lentamente por la habitación.
-bueno, pues me alegra tener tu compañía- contestó el otro sin borrar su sonrisa. 
-¿y puedo saber lo que estás haciendo?- preguntó el menor, con la voz llena de curiosidad, mientras desviaba su mirada hacia el antiguo libro que Bill había estado utilizando hace escasos segundos.
-nada realmente importante- contestó el mayor encogiéndose de hombros, mientras seguía con la mirada al menor- practicando algunos hechizos nuevos, que tal vez algún día puedan ser de utilidad.
-ya veo...

-¿y qué hay de la coronación?- preguntó el Cipher, con aparente desinterés- ¿sigue fijada para el mismo día?
-si...- contestó el castaño, frunciendo levemente el ceño, mientras que, con delicadeza, pasaba las yemas de sus dedos por las tapas de algunos libros ordenados en un estante- se hará en unos días, el veinte, si no me equivoco...
-¿y se sabe a qué hora?- volvió a inquirir el mayor.
-no lo sé realmente... creo que se celebrará por la tarde, creo que todavía lo están decidiendo.
-¿tu hermana no te ha dicho nada?
-mi hermana no me habla, y lo sabes perfectamente.
-¿y yo estaré invitado o...?

-eso es todo, me cansé- lo interrumpió el Pines algo irritado, mientras se volteaba hacia el rubio, arqueando una ceja- ¿qué estás planeando?
-¿qué?- preguntó el contrario frunciendo el ceño.
-sé que planeas algo, la pregunta es... ¿qué es? 
-no sé de qué estás hablando.
-no finjas Cipher- dijo el castaño negando con la cabeza- puedes engañar a todo el reino si así lo quieres... pero a mí no. Te conozco demasiado bien.

-realmente no tengo ni idea de qué estás hablando, Pino- insistió el mayor- ¿por qué crees que planeo algo?
-últimamente te has estado comportando... diferente. Y sin mencionar que me preguntas sobre la coronación cada vez que tienes la oportunidad- dijo entrecerrando los ojos- lamento decírtelo, pero creo que te estás comenzando a convertir en mis tíos- dijo con cierta burla.
-¿yo?, ¿convirtiéndome en tus tíos?- dijo el rubio fingiendo estar ofendido- dime que soy un imbécil, un malnacido, un hijo de perra, si así lo quieres... pero nunca, nunca me digas que soy como tus tíos- le ordenó medio en broma, para luego fingir un escalofrío, quitándole así la seriedad a la conversación.

Sin poder evitarlo, al castaño se le escapó una pequeña risita, que rápidamente disfrazó como un suspiro.
-bueno... tal vez es mucho decir que te estás convirtiendo en mis tíos- se retractó el Pines- pero tienes que admitir que últimamente te comportas extraño, y que preguntas mucho de la coronación...- le incriminó.
-yo... no me he dado cuenta, la verdad. Aunque si, tengo que admitir que la coronación es un tema que me interesa, es decir, ¡tu hermana se va a convertir en reina!, es algo importante, ¿no?, quiero saber cuánto tiempo de vida le queda a este reino- bromeó.

Nuevamente, un suspiro se escapó de los labios del castaño mientras miraba a su novio, negando con la cabeza.
-entonces... ¿no pasa nada?- volvió a preguntar.
-no Pino, no pasa nada- dijo el Cipher acercándose al castaño, para luego acariciar una de sus mejillas con su mano- realmente lamento si te hice sentir mal de alguna manera, claramente no fue mi intención- dijo para luego unir sus labios con los del menor, el cual terminó correspondiéndole luego de unos segundos.
-no me hiciste sentir mal- dijo el chico luego de unos segundos, después de separar sus labios de los del rubio- es solo que... no importa- se interrumpió- si tú dices que todo está bien, entonces todo está bien- dijo posando su mano encima de la mano del contrario, que aún seguía en su mejilla.

-bueno... ¿qué quieres hacer ahora?, ¿ir al jardín?, ¿a la biblioteca, tal vez?
-¿no tienes que trabajar?
-nah, no me falta mucho por hacer... puedo terminarlo más tarde- dijo el chico de ojos ámbar con una de esas sonrisas torcidas que tanto amaba el castaño- ahora mismo prefiero estar contigo.
-en ese caso... ¿al salón de siempre?- sugirió el menor con una sonrisa.
-al salón de siempre- le respondió en contrario, devolviéndole la sonrisa y entrelazando sus manos.

Y así, los dos chicos salieron tomados de la mano, rumbo a aquella habitación que ya habían tomado como suya.
Caminaban despreocupadamente, ignorando totalmente el hecho de que había una persona que los observaba, muy bien escondida. Una persona que casualmente había estado en el lugar exacto y a la hora exacta, y que había logrado escuchar toda su conversación anterior.

Una persona, que no dudaría en hacer algo respecto a todo lo que había escuchado, y que, aunque ahora no lo supieran, le traería una gran desgracia a la pareja. Una que quizás no lograsen superar...
















¡Hoooola!, ¿cómo están?, ¿les gustó el capítulo?, espero que si jejeje.

Bueno, aquí regresé con el nuevo capítulo, sé que ya ha pasado un tiempo, pero ya les había advertido que el inicio tardaría un poco, puesto que es la parte de la historia que todavía me falta formar bien.

Después de un tiempo, comenzarán las actualizaciones seguidas, promesa de autora :3.

¿Los dejé con un poquito de suspenso?, espero que si jsjsjs (extrañaba hacer eso jejeje), ¿quién creen que los estaba observando? 0-0.

Como siempre, les agradecería que votaran, y en especial que comentaran, ¡quiero saber lo que piensan!, y claro, si te gustó mucho, siempre puedes recomendarle la historia a alguien más, ¿no?, nwn.





Y bueno, creo que de mi parte eso es todo...



















¡Nos leemos luego!

Solo... confía en mi.  [Billdip].                 #Premiosgravity2019Donde viven las historias. Descúbrelo ahora