Catorce

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El detective atraviesa las puertas del bar cercano a la central, saluda al hombre detrás de la barra y le pide un café negro con tres de azúcar.

-Te dará diabetes Harding- le advierte de manera burlona.

-Deja que me preocupe por eso más adelante John y dame mi dosis del día por favor.

El hombre le sirve y le entrega la taza a regañadientes, Jordan toma asiento en una de las mesas junto a las ventanas y revisa su teléfono, unos tacones rojos se acercan a su mesa y se sienta en la otra silla.

-Disculpe esta ocupado- le dice a quien fuera dueña de esos costosos tacones sin levantar la vista.

-Eso ya lo se detective Harding- le contesta la voz femenina.

Jordan levanta la vista y ve con cierta confusión a la dueña de esa voz aterciopelada, la chica lo esta viendo fijamente con el mentón apoyado sobre su mano izquierda, con las uñas pintadas de color rojo y sus largas pestañas perfectamente maquilladas, Harding enarca una ceja.

-Supongo que no esta aquí para beber un café- dice en tono sarcástico dejando aun lado su celular.

-¿No come rosquillas detective?- le pregunta con ironía si moverse de su posición.

Jordan bebe un sorbo de su café e imita la postura de la chica que tiene enfrente.

-¿Qué te hace pensar que me gusta comer rosquillas?- le pregunta siguiendo el juego.

-¿No es lo que todos los policías desayunan?- sigue con el sarcasmo.

Harding suspira sin contestar y se relaja contra el respaldo de su asiento.

-¿En qué puedo servirle?- dice sin aparatar la vista de su desconocida.

La chica extrae una identificación y se la enseña, Jordan esboza una sonrisa.

-Wow, corrijo ¿En qué puedo ayudar a una asesora de inteligencia?.

Victoria se acomoda y tamborilea sus uñas sobre la mesa.

-Es muy simple detective- el semblante de su rostro cambia para volverse amenazador- deje de investigar los casos Laurence y Connor.

Jordan suelta una carcajada irónica.

-¿Es un chiste cierto?, ¿qué le hace pensar que le haré caso?- le dice en tono desafiante.

Ella no se queda atrás y contraataca.

-Tiene pelotas detective, se lo admito- él sonríe ante su respuesta- pero le advierto que deje en paz al señor Hunter, supongo que él ya le habrá dicho que esta luchando con poderes que van más allá de su jurisdicción, así que deje hacer lo que esta haciendo o...

-¿O qué?- apoya una mano de golpe sobre la mesa como un gesto amenazante.

-O podrían quitarle su placa, es todo- le dice con una sonrisa de suficiencia, ella se pone de pie y se coloca su abrigo por los hombros de manera elegante- que tenga un buen día detective.

Se retira, pero Jordan no se dejara amedrentar por ella así nada más, corre detrás, a fuera del bar un hombre le abre la puerta a la mujer como si fuera su chófer, él la toma del brazo pero el hombre que sostenía la puerta reacciona rápido y pone una mano sobre él, pero Victoria lo detiene.

-Déjalo Max-le pide- nuestro amigo esta molesto- le dice con voz melodiosa.

Él hombre asiente y se hace aun lado.

-¿Está segura que es de inteligencia y no una princesa de la mafia?- le dice en tono sarcástico.

Pero ella solo se limita a sonreír con dureza.

Mi novio el asesino perfectoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora