Temporada 2 Capítulo II

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No podía entenderlo y creo que nunca podré hacerlo. Alguien que asesina es algo malo pero que lo haga indiscriminadamente los convierte en un pedazo de mierda.

Mi cuerpo se comenzó a agrandar mientras me transformaba en el Boss con el que luché tanto en ese juego.

Un enorme minotauro entre cinco y seis metros de altura de pelaje oscuro. Mi cara expresaba brutalidad y gracias a mi equipo protector de la más alta calidad que me cubría el cuerpo se me hacía ver como un berserker.

Ahora el [Gran rey lobo] frente a mí era más pequeño que mi cuerpo pero eso no le detuvo y cargó hacia mí con fiereza y decisión. Su cuerpo estaba ardiendo por lo que sus ataques son más poderosos y penetran en armaduras más fácilmente.

Desenvainé una de las hachas con gran velocidad y lo mandé al aire de un golpe ascendente.

En el aire sin poder elegir su movimiento o esquivar utilicé [Slash] con ambas hachas de combate. Golpeando en cruz en el medio de la bestia y partiéndola en cuatro trozos que fueron mandados al final de la calle.

Amira y Maya estaban viendo ese abuso que estaba recibiendo la bestia con sorpresa y temor.

"…¿Papá?"

"Soy yo Amira, aunque no quería enseñar esta forma no hay otra manera."

Mi voz era muchísimo más grave y aterradora, típico del malo del final. Me agaché después de ponerme las hachas de nuevo en la espalda. Finalmente salió de la espalda de Maya y se acercó a mí, aunque tenía un poco de miedo por mi forma.

No se la puede culpar, es más se la debería alabar por acercarse a un minotauro en armadura de seis metros, cuando estoy levantando llego casi a la altura de los tejados de los edificios de la ciudad que están en el segundo piso.

Con mi vista mejorada pude observar que había algo que se movía entre la carne tirada al final de la calle.

"¡¡Que dolor!! ¡¡Maldición eso fue doloroso!! ¡¡Pensé que moriría por ese golpe!! Oh? Por fin salí de allí."

Una persona salió de los restos del [Gran rey lobo] vestida de armadura completa con escudo de torreta en la espalda y la espada en la mano cortando carne.

No me digas que fue comido por la bestia invocada. Ahh~ qué alegría que Mark este vivo.

Aún Amira ni Maya lo vieron puesto que el cadáver término lejos de ellas y no podían oírlo.

"Maya."

Ella tenía rastros de lágrimas en su rostro pero seguía asustada de mi apariencia, por ahora dejémosla. Mark estaba pateando la masa de carne con todos sus sentimientos a flor de piel. Pude escucharle por mi oído mejorado y tenía muchas y simples palabrotas hacia el [Gran rey lobo].

"¡Idiota! ¡estúpido! ¡maloliente! ¡No me tragues como te plazca! ¡Gigantón! ¡Animal! ¡Estás mejor muerto!"

Parece que no cambió ni tras el riesgo de muerte. Sigue siendo muy simple y honesto cuando no lo piensa mucho.

"Amira, voy a ir a destrozar las bestias. Siento decirte esto pero quédate con los dos tortolitos mientras tanto. Maya, Mark está vivo no te preocupes. Llévate a Amira contigo y llega al final de esta calle, dile a ese tonto suicida que se recupere con pociones y las proteja a las dos."

Aunque no habrá mucho que proteger ya que no dejaré ninguna bestia de la ciudad con vida.

Fui a acariciar a Amira porque seguía asustada pero me detuve a medio camino, llevo una armadura y aunque no fuera así tengo una mano que simplemente podría aplastarla con el propio peso que tiene. Nadie se relajaría en esas condiciones por lo que me di la vuelta y me alejé de ellas entre los edificios.

Renacimiento como el Boss de la última planta en otro mundo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora