Capitulo 31

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Siento algo hacerme cosquillas en la espalda, me muevo hacia los lados pero las cosquillas siguen que raros. Abro los ojos lentamente para encontrarme a Ethan semidesnudo a mi lado mirandome fijamente. Una sonrisa tierna se posa en mi cara cuando recuerdo lo que paso la noche anterior, estoy solamente con ropa interior y sin sujetador poco a poco mi cara toma color.

-Buenos Dias bebe- dice dandome un beso en el hombro.

-Muy pero muy buenos dias -digo- que hora es?

-1:00 de la tarde.

-Madre mia, mi mama me va a matar- digo levantadome de golpe y al darme cuenta de como estaba vestida, busque lo primero que encontre, Ethan solo se reia de mi.

-Nose para que te tapas si ya vi todo, le escribi a tu hermano de que estas conmigo- dice levantadose tambien , madre mia que termendo paquete que tiene.

- una cosa fue lo de ayer y otra ahora, puedes ponerte algo de ropa- digo desviando mi vista antes de caer en tentacion otra vez.

-Que, no te gusta lo que estas viendo.-dice acercandose lentamente hacia mi.

-A quien no le gustaria y si hubiera alguien que no definitivamente tiene problemas de la vista.- no puedo dejar de ver su abdomen bien marcado y una cicatriz que tiene en el pecho.

Sin darme cuenta lo tengo frente a frente, lentamente me quita la sabana que cubre mi cuerpo semidesnudo y siento como sus mano sube lentamente por mi cuerpo hasta llegar a mi rostro. Ethan se acerca lentamente a mis labios y no puedo esperar para besar, esos labios que me tiene adicta. Su beso es suave pero a la vez intenso. con sus manos me pega a su cuerpo donde el aire no puede pasar. Subo mis manos a su cabello suave, me encanta jugar con su cabello de negro. Ethan me lleva hacia la cama nuevamente y me acomoda en la cama como si estuviera poniendo algo fragil. Sus besos van bajando lentamente por mi cuerpo y en cada beso un gemido de mi parte sale, me siento en la gloria. Este chico es magia. Lentamente baja hacia un lugar donde no da el sol, abro la boca al ver lo que este chico esta haciendo los gemidos son mas esta vez. el si sabe mover esa lengua.

Poco a poco Ethan entra dentro de mi, sus movimiento son un baile, le pido que vaya mas rapido y su la velocidad de sus movimiento, oigo sus gemidos que conectan con los mios y minutos despues de los llegamos. Ethan se acuesta a mi lado y deja un suave beso en mi frente.

-Tienes hambre?- me pregunta

-Como no te imaginas- digo volteando para ver su rostro.

-Cerca de aqui hay un restaurante muy bueno, quieres ir a comer ahi.- dice

-Eso no se pregunta donde alla comida sere felices-dije- voy a tomar una ducha.

-Entonces vamos a tomar un ducha-  dice levantandose de la cama como Dios lo trago al mundo.

-ETHAN PONTE ALGO DE ROPA POR FAVOR- dijo tapandome los ojos aunque la vista no es mala de admirar, si sabes a lo que me refiero.- no me voy a duchar sola al paso que vamos no saldremos nunca de aqui.

- esta bien, pero me la debes-dice tirandose otra vez a la cama.

Entre a duchar, el agua estaba tibia y recorria todo mi cuerpo. Mi barriga no dejaba de sonar, definitivamente necesito comer. me pongo la misma ropa de anoche pero me robo un sueter azul marino de Ethan. Al salir, Ethan todavia esta en la cama acostado boca abajo. Se ve tan tierno, le dio una nalga y se espanta.

-Que diablos- dice mirando a los lados, no puedo controlar mi risa.

-Asi quieres jugar - si mirada lo dice todo estoy en problemas.

Salgo corriendo por la habitación con Ethan semidesnudo atrás de mi. No puedo parar de reír. En una tropiezo con unos zapatos. Ethan me toma de la cintura y me sube a la cama.

-eres muy traviesa bebe- me hace cosquillas, las odio y el sabe muy bien.

-ya déjame no puedo respirar- dijo entre risa me va a dar algo.

-dime que me quieres- dice haciéndome más cosquillas, voy a morir.

-TE QUIERO MUCHO-grito ya no puedo más.

-así me gusta-por fin soy libre de esta tortura.

-ya mete a bañar, me estoy muriendo del hambre- digo empujándolo hacia el baño.

Ethan salen unos minutos con una toalla envuelta a su cintura, verlo es como ir al museo haber una pieza de arte. Me volteo para que se cambie tranquilo y oigo algo.

-puedes mirar tranquila bebe- dice entre risas.

-es ve que tu ego no se ha ido por completo- digo mirando hacia el techo.-ya te cambiaste ni que fuera mujer para durar mucho.

-ya estoy listo, madre mía cuando tienes hambre eres una odiosa- dice agarrando su cartera, llaves y celular.

-pues no me dejes morir de hambre entonces- digo parándome de la cama y caminando hacia fuera.

Salimos del edificio, está en plena ciudad. Ahora de día se aprecia mejor el area, se ve bastante lujosa. Decidimos ir caminando ya que el restaurante estaba a solo cuadras del apartamento de E. Nos sentamos en la parte de afuera, el día estaba hermoso porque no aprovecharlo.
Pedimos la comida y mientras la esperábamos hablamos de diferentes cosas.

- ya recibiste algo de las universidades que aplicaste-me pregunta Ethan.

-no todavía, creo que en estos meses me llegarán cosas creo, tu sabes que se toman su tiempo.-mentí lo sé pero no quiero decir nada todavía y menos a él. No se que haré si me iré o me quedaré es muy temprano para tomar una decisión.

-eso es verdad, pero se que vas a tener mucha suerte por que eres una bebe inteligente-dice tomando un sorbo de su jugo.

Minutos después llego la comida y mientras la chica la traía se oía Los Angeles cantando. Definitivamente me estoy quedando loca. La comida estaba riquísima pedimos postre y estaba que si comía algo más iba a explora. Caminos hacia el apartamento, parecimos dos niños jugando en la calle. Ethan me llevo a mi casa, el todavía se sigue quedando con su mamá hasta la graduación después de eso se ría a vivir a su apartamento.

-me la pase increíble- dice mirándome con una sonrisa.

-yo también gracias por todo- digo abrazándolo

-no hay nada que agradecer, te mereces esto y más- me da un beso en la frente.

-será mejor que entre, nos vemos mañana-digo buscando las llaves de mi casa

-nos vemos mañana bebe- me besa en los dos cachetes y después en los labios

Al entrar a mi casa solo está Kyle mirando la televisión, al mirarme tiene una risita traviesa.

-¿que me miras?-pregunto

-usaron condon verdad-dice al punto de estrellar de la risa.

- no vas hacer tío felicidades-digo sarcásticamente- claro que si idiota- digo sacándole el dedo y subiendo las escaleras oigo como explota de la risa. Algún día lo voy a matar, algún día.

Mi Estúpido Vecino- ShellyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora