La máquina de tinta un antiguo artefacto que curo la terrible enfermedad de la tinta, que ya había cobrado bastantes vidas, logro hacerla desaparecer.
Sin embargo, hace algún tiempo dos personas jugaron con el diablo y perdieron, como consecuencia t...
Heya~ ¿qué tal amigos? , ya ha pasado un largo tiempo, supongo que ya han leído lo que he puesto en mi tablero, y si no esAsí, pueden leerlo para estar un poco más al corriente con la situación. Cambiando de tema, estáserá a mi parecer la penúltima historia que escriba con personajes animados, ya que quiero escribir algo un poco más "realista " por así decirlo. Tambiénaprovechó para recomendarles una historia que me pareció interesante, se llama Reflejos y estáen el perfil de mfcontreras_0, es Yaoi, de el anime Mob Psyco 100 por si gustan leerla :)
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Muchas gracias a todos por el apoyo y la espera, ahora si...
¡A darle!
«Narra Marina »
Quien diría que todo eso ocurriría en una sola noche donde se supone arreglaríamos solamente nuestras diferencias para poder seguir con el viaje, y así por fin encontrar las últimas tres piezas de la máquina y ponerle fin a este infierno de tinta para todos. Mi cadera dolía a decir verdad, esa había sido mi primera vez con alguien desde hace años, así es yo no era virgen pero aún así, me encantó estar con Bendy y más ahora que somos pareja a mi parecer.
Me levante cansada y molesta por la luz que se colaba a nuestra cueva, Bendy estaba a mi lado dormido, aún desnudó pero siendo tapado por una manta delgada cubriendo su hombría . Rápidamente me vestí por el peligro de ser vista por los demás, moví a mi amante recibiendo un gruñido de su parte para después levantarse y vestirse de igual manera.
Sentí mi cuerpo ligero y descansado, todo el estrés que tenía guardado durante las últimas semanas se fue y ahora más agusto podía hacer mis cosas. Con mis manos peine mi cabello en una coleta alta y la ate con un pequeño listón de tela para después sentir los labios de Bendy en mi cuello.
- Buenos días, mi jade - hablo con voz ronca pues apenas se había levantado en forma, Me causo escalofríos sentir su respiración en mi cuello. - apurate, el señor Félix ya está preguntando por nosotros.
- Claro, enseguida terminó - le sonreí y tome mis cosas para que al final ambos salieramos de la cueva.
Al momento de salir, la luz me deslumbró levemente para revelarme a mis compañeros almorzando a unos cuantos metros de nosotros, unos sándwiches si no me fallaba la vista. Nos acercamos a ellos y nos sentamos para comer juntos, estaba de sobra mencionar que sentía la mirada pesada de Cuphead sobre mi todo el rato, hasta que yo, por mera costumbre mexicana, le alce la cabeza e hice un gesto de "Vergazos o ¿que?" A lo que el sólo atinó a chasquear la lengua y desviar la mirada.
- Me alegro que ya todos estemos bien, me tenían bastante preocupado Bendy- hablo Félix mientras tomaba el hombro de mi pareja, a lo que el sonrió algo comprensivo.
- Tranquilo señor Félix, ya todo está bien... cambiando de tema, ¿el mapa no ha mostrado alguna otra pieza?- respondió mientras sacudia sus manos quitando las migajas. - según se, sólo faltan tres.
- Y de hecho hermano, se mostraron dos piezas. Al parecer se encuentran juntas por lo que deben funcionar en el mismo lugar en la máquina de tinta - respondió Boris enseñándole el mapa a su mayor, aquí yo agradecía que sólo ellos dos y Félix pudieran ver el mapa, pues las miradas sospechosas de Cuphead me hacían desconfiar.
-Eso significa que Marina pronto se recuperará, ¡ Que bien!, al fin todos seremos felices - me abrazo Mugman sonriendo, a lo que yo correspondía encariñada.
- Realmente es lo que espero Mugs, no sabes cuando lo he esperado - suspire dejando salir por mis labios una sonrisa melancólica, recordando a mi familia. - bueno, como dice el dicho, Al mal pasó darle prisa, ¿por dónde caballeros?
- debemos ir hacia el sur de las cavernas, cerca de la grieta de solvente bajo la ciudad de Soldtown, allí deben estar las dos piezas - dijo Félix mientras guardaba sus cosas y me extendía una servilleta- Tienes un poco de mermelada en la mejilla Marina.
- ¡Oh, que cosas jaja! - reí algo avergonzada y limpie el dulce.
- es hora de partir señoritos, ya pasa de medio día, debemos apurarnos.- Cuphead intervino algo cortante, para después sonreír algo travieso. - además, allí hay una persona que nos espera, un viejo amigo con una bolsa de papel en la cabeza se mudó allí recientemente.
- Entonces no debemos hacerlo esperar, después de todo, una conversación de energía electromagnética con el doctor Flug es bastante excitante - dije yo riendo, a lo que Cups me vio algo extrañado.- Si, conozco a tu gente .
- Que más podría esperar de ti, eres una mexicana brinca barreras .
- Y tu un gringo sovervio - reí mientras hacia una reverencia empezando a emprender camino.
Quien sabe, dos piezas a la vez sólo pueden significar una cosa, los tratos com el diablo tarde o temprano se pagan y yo sospecho que el mío está por ser cobrado.
