El supervisor

Me dejo llevar demasiado

- Me sabe mal por Dylan. Ahora ya nos llevábamos más o menos bien.- le digo a Jake de camino a casa de nuestra amiga Andrea. Jake me echa una mirada de qué-cojones-pasa-contigo.

-¿Desde cuándo te importa ese capullo?- no sé exactamente qué contestarle. En parte tiene razón, he estado un poco bipolar estos días.

- Bah, da igual. Cambiémos de tema. ¿Al final qué canciones tenemos que tocar?- saca de su bolsillo un papel doblado y me lo entrega y lo leo.

▶This Night is Almost Over- Pacific

▶You Only Live Once- The Strokes

▶ Rebellion (Lies)- Arcade Fire

▶ Mardy Bum- Arctic Monkeys

▶ Loving Cup- The Rolling Stones

▶Lonely Boy- The Black Keys

▶ Lego House (acustic)- Ed Sheeran

▶ Houdini- Foster The People

▶ Mr. Brightside- The Killers

-¿Y ya está?- le pregunto devolviéndole el papel.- Eso llega a ser sólo una media hora y poco más tocando.-

-De eso se trata.- me dice con una sonrisa traviesa.- Así tendremos el resto de la noche para pasárnoslo bien. A demás dicen que Lauren va a traer mucha hierva.- trago saliva. -¿Qué pasa? Tienes miedo de que tu niñero se enfade.- afirma Jake muy convencido y con una media sonrisa pícara. Yo le empujo fuerte y juguetonamente hacia la izquierda.

- No es mi niñero, gilipollas.- ambos empezamos a reírnos mucho, contagiándonos el uno al otro la risa. No entiendo por qué me importa tanto lo que me vaya a decir Dylan después de esta noche. Dos días atrás me habría encantado el hecho de poder estar borracha y fumada toda la noche, sin ninguna preocupación, tan solo dejándome llevar. Respiré hondo y dejé que la irresponsibilidad me inundara de nuevo.

Más o menos veinte minutos después ya nos encontramos delante de la casa de Andrea. Sin ni siquiera llamar, la puerta se abre y muestra a Andrea. Ella es una chica alta y esbelta con un precioso pelo largo y rubio. Lleva unos shorts deshilados con medias transparentes negras, una chupa de cuero negro y unas All Stars negras. Ella forma parte de nuestro "grupo de amigos" y ambas compartimos casi lo mismos gustos en cuanto a cine, libros y música alternativa. Se podría decir que de todas las chicas, es con la que mayor confianza tengo.

- Eh, chicos. Menos mal que ya estáis aquí, pensaba que no vendríais nunca.- dice carismáticamente, es una chica muy alegre. Jake y yo entramos por la puerta y vamos los tres diréctamente al sótano. Está oscuro y decorado con luces y varios posters de grupos de rock, hay una gran mesa de billar arrinconada y varios sofás en los cuales, seguramente, caeremos agotados. También hay una mesa con varios vasos de plástico y bebidas alcoholicas. Justo en la otra punta del sótano hay un pequeño escenario de sólo unos 30 centímetros de alto, montado para nosotros.

- Wow, Andrea.- digo asombrada y observando todo el espacio en el que nos encontramos.- qué bien te lo has montado, tía. Está mucho mejor que la fiesta de Lauren.- ella susurra un "gracias" seguido de un gesto divertido.

- ¿A qué hora llegarán todos?- pregunta Jake. Iba a hacer la misma pregunta.

- Se supone que a las siete o siete y algo.- contesta Andrea sentándose en uno de los sofás. Mira su reloj y añade.- O sea que aún tenéis una hora y cuarto para preparar todos los instrumentos y equipo y tal.- Jake y yo asentimos y empezamos a montar los altavoces y colocar los micrófonos, guitarras y la batería en su sitio. Una vez acabamos me siento junto a Andrea mientras Jake llama al resto de la banda para que vengan a hacer el último ensayo.