Sin titulo 38

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Me acerque rápidamente hasta caleb y Ashley tomandola de sus brazos depositandola luego de pie en el piso.

-ya basta caleb esto es demasiado- dije sin ocultar mi enojo.

-¿entonces esta bien que ellas vivan en una mentira?!!-

No estaban Acostumbradas a escuchar a un hombre hablar de ese modo por lo cual alissa comenzo a llorar fuertemente.

-ves lo que has hecho para ello quieres estar con nosotras?- murmure cerca de el para despues alejarme a consolarla -calma amor no llores- caleb se adelanto ami  la levanto en brazos haciendo que llorara con mas fuerza,  ash se acerco y con todas sus fuerzas dio un puntapie en su pantorilla.

-heeeeyyy!! Por que has hecho eso? Tengo un regalo para ambas en mi auto pero si no se comportan no se los daré!- luego miro a alissa -deja de llorar no te hare nada, ¿no has escuchado quien soy?-

Aliss asintió limpiando sus ojos hecho que hizo enfurecer aun mas a Ashley.

-tu no eres mi papi!!!!- grito a todo pulmón.

-no grites Ashley- dijo caleb.

-tu no no eres mi papi, tu no eres mi papi tu no eres mi papi tu no eres mi papi tu no eres mi papi tu no eres mi papi tu no eres mi papi tu no eres mi papi tu no eres mi papi tu no eres mi papi!!!!!!!- cubrió sus oidos sin dejar de gritar -tú no eres mi papi tu no eres mi eres mi papi,  tu no eres mi papi!!!!!!!- el fuerte grito agudo de ash hizo que la lampara del pasillo tronara haciéndonos quedar en penumbra la puerta de la salida se pudo oír abrirse y después cerrarse de manera violenta.

-Ashley!! Donde estas??!!- dije sin recibir respuesta lo que me comprobo que ella era quien habia salido.

-toma a aliss ire tras ella!!-dijo entregandome a alissa.

-no,  esto es tu culpa...- solo eso alcanze a decir un segundo portazo se escucho en respuesta.

Afuera habia dejado de llover salí junto con aliss para mirar sobre la carretera distingui la figura de Ashley correr y tras ella caleb, se perdieron de mi alcance pues estaba oscureciendo los minutos se me hicieron eternos hasta que la figura alta de el sobresalio con un bulto mas pequeño en brazos llego hasta mi.

-mamá lo siento- dijo ash con lágrimas.

-que le has hecho?-

-Nada un auto casi la arrolla y le dije que por su torpeza te iba a hacer sufrir mucho que si eso le parecía correcto?-

-tu no eres nadie para decidirle que es lo correcto o que no- tome a mi hija abrazándola -ni para decirle que debe hacer para evitar que yo sufra, por que a ti eso no parece importarte-

De nuevo habia empezado a caer una ligera brisa.

-solo suban al auto de una vez ire por las cosas- paso junto a nosotras entrando a la casa.

No quería que las niñas se enfermaran por la brisa asi que las hize subir a la parte trasera del auto, cuando estaba por subir junto con ellas caleb salio de la casa.

-tu vas adelante- dijo a modo de orden -que esperas sube- llevo las cosas a la cajuela y regreso con dos cajas en tono rosa con un listón a modo de moño entro al auto mostrando las cajas a las niñas.

-toma aliss esta es para ti- miro a ash por el retrovisor -Ashley esta otra es para ti-

Con mala cara la tomo poniendola en su regazo.

-no van a abrirla?- parecía impaciente por ver la reacción de las niñas.

Alissa la abrio primero y ahi estaba la muñeca que había escogido una de las dos que estaban en el aparador, Ashley al ver aquello abrio su caja para encontrarse con la otra muñeca.

Caleb sonrio -¿les gustan?-

-si es la que quería ¿verdad ash?- aliss limpio su rostro con la manga de la chamarra

Ash en respuesta solo asintió y abrazo la muñeca.

-me alegra haberlas escogido- caleb no dejaba de mirar las expresiones de ellas para con las muñecas.

Me acomode en el asiento mirando al frente al poco tiempo de habernos puesto en marcha ambas se quedaron dormidas abrazadas a las muñecas habia sido un largo dia yo también estaba muy cansada asi que cerré los ojos quedándome profundamente dormida. El ruido de la puerta del auto abriendose de mi lado me hizo despertar dando un salto maldita realidad, como deseba que esto hubiese sido una pesadilla, me dolía el cuello por la mala postura mire por el espejo retrovisor las niñas no estaban.

-no me toques, donde estan las niñas?!- dije al sentir que caleb me tomaba en brazos.

-estan dentro del motel en la cama dormidas- siempre ignorando lo que le pedía me levanto en brazos sacandome del auto.

-bajame- pedi de nueva cuenta pero no me valió de igual forma.

Entramos a la habitación donde las niñas estaban en la cama dormidas suspire de alivio. Deseaba saber que sophie estaba bien asi que volvi a preguntar por ella, estaba vez me tendría que decir en donde estaba.

-donde esta sophie?- susurre para que las niñas no me escucharan.

-en su casa me imagino- dijo poniéndome en el piso sin soltarme del todo.

-no te creó- dije apartandome.

-lláma a su celular para que veas que es cierto- acorto el espacio que habia puesto yo entre nosotros -dormiras conmigo esta noche- eso no era una pregunta.

-nunca más- era lo que estos años cada noche habia deseado estar entre sus brazos de una y mil maneras posibles pero ya no.

-no lo pregunte Bekah- me tomo por el brazo.

-eso no me interesa- lo mire con horror safandome de él.

No insistió cosa que me pareció rara avance hasta la cama de las gemelas recostandome a su lado le escuche sentarse en la cama contigua sentí su mirada en mi espalda hasta que me venció el sueño.

                 * * * * *

La respiración tranquila y profunda de bekah significaba que ya se habia dormido me recoste sobre la cama soltando un suspiro sin dejar de mirarles eran tan bellas pero aunque estaba a su lado me sentía demasiado lejos. Alissa era idéntica a mi cuando era niño lloraba mucho y hasta el ruido de una hoja al caer le asustaba, Ashley era otra cosa fuerte decidida... Eso es preocupante tiene algo en su mirada que no me gusta una ligera oscuridad que sale a flote de pronto volviendo a ocultarse.

-papi? - dice una vocecilla cerca mio haciendo que abandone mis pensamientos -quiero hacer pipí- fregaba sus ojitos con una de sus manos mientras en la otra sostenía la muñeca,  por la oscuridad y el hecho de estar adormilada me confundía con alan supongo, estaba bien no me importaba si con ello la podia escuchar decirme papá.

-si claro- hable bajo levantándome de la cama para llevarla al baño de vuelta le ayude a subir a la cama y arrope.

-descansa papi- dijo aliss cayendo como piedra despues de eso.

-si hija- bese su frente.

Volví a mi cama sintiendo algo dentro de mi una sensación incluso mas profunda que el amor que sentía por bekah o quiza era igual pero que a su vez era distinto no podría explicarlo en palabras simples solo se que, me hacia feliz.

La locura del amor.     (En edición) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora