Kara
Desde que Yael me dijo que tiene dos kinesis no he dejado de pensar en formas para que ella este a salvo, en cómo serán mis próximos movimientos para que ella cumpla su cometido, y sé que no lo diría en voz alta, pero temo que si ella es de quien la profecía habla, tenga un final malo, no quiero que ella muera, no puedo perderla como perdí a Lydia; me da miedo que si la profecía se cumpla sea solo con el deceso de Yael, y es ese miedo que me hace querer mantenerla a salvo con todas las precauciones necesarias.
Necesitaba hablar con los demás de mi hermana y de como ella puede ser de quien Lydia hablaba, necesitaba que todos estuviéramos dispuestos a mantenerla a salvo, sé que ella no quiere que se le trate como si fuera de cristal, algo frágil que hay que proteger a toda costa, pero ella no tiene por qué saber los pactos que hago con los de mi grupo. Fui buscando por el barco a Catherine, Elizabeth, Zenda y Zigor; Catherine y Elizabeth estaban juntas conversando en el comedor, Zenda estaba en su habitación acostada, la deje ahí ya que llevaría a los demás para allá, por último y para mi sorpresa me encontré a Zigor conversando con Yael afuera, los lleve a todos a la habitación para que habláramos de forma privada.
—¿Qué sucede? – pregunto Catherine apenas cerré la puerta.
—Debo contarles algo – dije, hice un ademan para que se sentaran, yo me quede de pie – es sobre mi hermana y sobre una misión que me dejo Lydia antes de morir – sabía que todos estaban expectantes y yo estaba nerviosa por lo que diría a continuación – Lydia tenía sueños donde una mujer le decía un tipo de profecía.
—¿Qué tipo de profecía? – pregunto Zenda que estaba al lado de su hermano.
—La profecía dice que el día que exista alguien con la capacidad de controlar dos kinesis completamente diferente a la perfección, será el día que podremos ser libres – dije recitando casi de memoria lo que decía el papel, lo había leído tantas veces que ya no se me olvidaba nada – creo que esa persona es Yael.
—Umbraquinesis y photoquinesis – mire a Zigor que este a su vez miraba sus dedos mientras los movía, no entendía como lo supo, tampoco es que sea un secreto, porque ella no lo oculta – ¿Por eso lo dices? – pregunto mirándome.
—Si – respondí – ¿Cómo lo sabes? – pregunté cruzándome de brazos.
—Ella me lo dijo recién – eso explicaba bastante – la verdad es que me sorprendí mucho cuando lo supe.
—Eso explica el traje – comento Elizabeth, yo asentí – ¿Qué vamos a hacer con ella?
—Vamos a protegerla – dije firme – sé que ella no quiere que se le trate de manera especial, pero para su mala suerte lo es, por lo que necesita cuidados y protección de parte de nosotros, nada malo le puede pasar y apenas este en peligro sacarla de ahí para ponerla a salvo – sé que si se entera se enojara, ya que estoy haciendo lo que ella no quiere que haga, ósea tratarla como algo preciado – debemos ser precavidos para que ella no se entere.
—Es tu hermana – habló Zigor – deberías decirle todo esto – me sorprendía que estaba siendo serio con este tema, normalmente estaría lanzando alguna broma – lo de la profecía, que ella es importante y que debe mantenerse a salvo – no entendía su repentino cambio – claro que nosotros ayudaremos y lo sabes, pero no debes ocultárselo.
—Se puede sentir presionada – dije luego de un rato – no quiero darle este peso.
—Ya lo tiene – me desconcertaba mucho ahora la actitud de Zigor – aunque no se lo digas, ya tiene la presión de salvar a miles de personas, es mejor que se lo digas – estaba serio y su expresiones faciales también lo demostraban.
—¿Acaso se lo dirás? – pregunte tratando de sonar intimidante, no quiero que ella sepa esto, aún no.
—No – habló levantándose para ponerse frente a mí – pero tú deberías, ¿Te gustaría que te ocultaran cosas? ¿Qué tu hermana te oculte cosas que al final te conciernen más a ti que a ella? – me quede paralizada, no sabía cómo responder – No tomes decisiones por ella Kara, aunque sientas que es lo mejor, dale el derecho de elegir que quiere hacer con su vida, tal vez Yael quiera hacer esto sola o pensar bien si quiere salvar a los kinesis, no hagas como si su opinión no valiera nada – al acabar salió de la habitación la cual quedo en completo silencio.
La conversación acabo en ese momento, los presentes nos miramos sin entender muy bien que acaba de pasar, hasta Zenda estaba impactada por las palabras de su hermano, yo solo luego pregunte si le ayudarían a proteger a Yael a lo que asintieron. Yo el resto del día me quede pensando en las palabras de Zigor, reflexionando si debería decirle o no, al final decidí que lo seguiría ocultando, Yael a fin de cuentas es mi hermana menor y debo protegerla, no quiero ser una inútil que ni siquiera puede proteger a su hermana, ya suficiente tuve con no saber de ella por tanto tiempo, ahora que estaba de vuelta a mi lado no dejaría que nada malo le pasara.
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Los Telepatas (2°LIBRO)
Science Fiction6 años después de los sucesos ocurridos en "Los Kinesis", Kara como la nueva líder debe hacerse cargo de los kinesis que están en su refugio y aunque lo hace con gran compromiso no puede dejar de pensar en hechos que ya son pasadas, y aunque esos ti...