🍷De sangre fría y piel desnuda.🍷 [ChanSoo]

🍷Capitulo 12🍷

Jamás creí ver al pelinegro de esta manera, tan vulnerable, tan triste... tan roto. Y todo por mi culpa.

Si nunca hubiera escuchado a Kai, no estaría en semejante problema.

ChanYeol solo estaba parado allí, sollozando, apretando los puños con fuerza, mirando el suelo.

La última frase que me había dicho: "¿Por qué no entiendes?... yo te amo." Sonó tan destrozado, tan desesperado... decepcionado.

¿Qué debo hacer? si tan solo tuviera una explicación... una justificación, lo que sea que pudiera arreglar esto. ¿Por que fui tan estúpido al dejar eso en mi saco... por qué lo traje conmigo? ¿Será que realmente lo iba a matar... cobraría las vidas que ha robado con la suya?

Mis manos temblaban, tenía ganas de salir corriendo de allí, correr hasta que mi cuerpo no pudiera más. Pero simplemente no podía hacer que mi cuerpo respondiera... respiré profundo.

-- ChanYeol yo... - exhalé -- Si solo pudiera... -- no podía completar ni una sola frase que se formaba en mi mente.

Él se llevó ambas manos al rostro para cubrirlo, pude ver como llenaba sus pulmones de aire y exhalaba fuertemente en un suspiro de molestia. Cuando bajó sus manos de nuevo... parecía una persona completamente distinta.

Su llanto había cesado. Había intercambiado su tristeza por una mueca casi diabólica, una maligna sonrisa y eufórica. Sus ojos tan vacíos, perdidos en la ira y la lujuria.

Su actitud me hizo retroceder unos pasos.

ChanYeol me miraba fijamente con esos ojos aterradores, cuando ladeó un poco su cabeza... como si escuchara algo. Una risa gutural, casi inhumana salió de lo profundo de su garganta, y se dirigió a la puerta.

-- Sabía que no lo habías hecho por tu cuenta Kyunggie... yo ya casi - remarcó la última palabra -- Te tenía -- con un rápido movimiento abrió la puerta, dejando ver a Kai tras ésta.

El moreno abrió los ojos de par en par, palideciendo hasta estar del color de la nieve. ChanYeol lo tomó por el brazo y lo empujó dentro; cerrando la puerta y asegurándola con una traba.

JongIn me miró desesperado.

-- ¡Hazlo ahora KyungSoo! -- me gritó con fuerza haciéndome respingar.

Miré a ChanYeol, y luego a JongIn, una y otra vez. No quiero hacerlo.

-- No quiero hacerlo -- murmuré solo para mi, mirando el suelo.

-- Kyung... KyungSoo... - me llamó el de piel canela -- Mírame... - lo hice -- No pasara nada malo KyungSoo... confía en mi.

Abrí la boca para decir algo, pero no pude. El llanto se robó mi voz.

-- Si no lo hiciste tú ¿Qué te hace pensar que él lo hará, Kim JongIn? - resonó la voz de pelinegro -- Si tan solo hubiéramos terminado lo que empezamos.

Un grito ahogado me hizo levantar la mirada.

Abriendo los ojos de par en par... no podía creer lo que veía. ChanYeol aprisionaba su hermano de palabra por la cintura con sus brazos, mientras lo besaba por la fuerza.

Al sentir mi mirada, se detuvo y sonrió.

-- Ohh... KyungSoo, yo... lo siento tanto - me dijo en un tono sarcástico -- ¿Acaso Kai no te lo dijo?

Negué confundido, mientras ChanYeol se acercaba más a su pobre y atrapado amigo.

-- Al perderte por tantos años KyungSoo, al no saber nada de ti... estuve desesperado. Kai apenas tenía unos... 15 años, y él hizo el trato conmigo, él me entregó su cuerpo y su alma... - sonrió -- Justo como lo acabas de hacer tú hace un rato.