🍷Capitulo 6🍷

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Cuando me escondí en aquel baúl, y creía que a lo que se refería Kai con respecto al pelinegro, no era lo que yo pensaba: Que ChanYeol era un mujeriego, un pervertido, o yo que sé, algo parecido; y bueno algo como eso no merece la muerte.

Pero no podría estar más equivocado.

Al principio lo había tomado todo como algo no muy serio, un espectáculo erótico un tanto cómico, hasta que el pelinegro sacó esa daga de plata. La hizo danzar entre sus manos, lanzando destellos plateados por todas partes. ChanYeol tomo a la chica desnuda entre sus brazos, sosteniéndola por la cintura; ella echó la cabeza hacia atrás.

El pelinegro posó la fría hoja metálica sobre la piel desnuda de la chica. Trazó una trayectoria con la daga por el delgado cuello, y sonrió...

Yo miraba tan atentamente como podía, realmente no sabía qué esperar. Sentía mi respiración agitada, y tal vez había comenzado a excitarme, pero... todo cambió de repente.

ChanYeol clavó con fuerza la daga en el cuello de la chica, arrancándole el grito más desesperado y grotesco que jamás había oído en mi vida. Con una fuerza descomunal el pelinegro fue cortando la garganta de izquierda a derecha, la sangre salía a borbotones manchándolo todo.

Me tape con fuerza la boca, un grito aterrado luchaba por salir de mi garganta.

Todo ocurrió tan rápido y a la vez tan lento, estaba confundido, mi cerebro no podía procesar todo ese horror de golpe. Estando al borde del colapso, me desmayé.

*

No sé cuánto tiempo estuve allí, inconsciente. Cuando desperté tardé un poco en reconocer aquel pequeño lugar en donde estaba metido, hasta que como un golpe en el estomago todo el torrente de imágenes horribles que había visto pasaron por mi mente.

Un grito ahogado salió de mis labios, temblaba incontrolablemente, cerré los ojos y luché por controlarme... cosa inútil.

Me acomodé nuevamente y miré otra vez por el hueco de la cerradura del baúl.

Sentí que me desmayaba de nuevo, con un movimiento violento me lancé al fondo de la caja, apartando la vista de ese paisaje de desesperación y horror. Las lágrimas surcaban mis mejillas salvajemente. ¿Qué debo hacer, correr... o esconderme por el resto de mi vida?

Me armé de valor, y miré nuevamente tratando de no sollozar tan ruidosamente.

Seguro se estarán preguntando ¿KyungSoo, pero qué mierda fue lo que viste? Y estoy seguro de que cuando se los diga no será ni un poco cerca de lo que se imaginaban.

La tina blanca como la nieve, estaba llena hasta el tope con un liquido rojo, que no me podía explicar su origen, hasta subir un poco la vista. Unos dos metros en el aire, estaba el cuerpo de la chica, colgado de cabeza, con los brazos totalmente estirados, y su cabeza apenas se sostenía con las vertebras de su cuello. Cada cierto lapso de tiempo caía una gran y larga gota de sangre.

Las nauseas se apoderaron de mi, me sentía enfermo de asco y miedo. De repente ChanYeol apareció otra vez en escena.

Él y su ropa estaban casi totalmente cubiertos de sangre, así que lenta y sensualmente se deshizo de ella, quedando completamente desnudo.

En otra ocasión ver al pelinegro desnudo hubiera sido lo mejor que me podría pasar, pero ahora me repugnaba. Él paseó las puntas de sus dedos por la superficie de la tina, manchándose de rojo, haciendo un contraste perfecto con su piel pálida como la luna.

Suspiró y se metió en ella, hundiéndose completamente. Esos pocos minutos me perecieron eternos, no paraba de preguntarme, qué fue lo que hice como para recibir un castigo como éste.

ChanYeol salió nuevamente y se le veía más radiante que nunca antes. Más fuerte, más hermoso, con más vida. Se fue, y cuando volvió ya se había limpiado la sangre del cuerpo, y lucía un hermoso traje negro, entre sus manos traía muchos instrumentos parecidos a probetas y recipientes de cristal. Se hincó a un lado de la bañera, y empezó muy lentamente a llenar una botella.

Con toda la precaución y silencio del mundo, salí del baúl, aprovechando que ChanYeol estaba embelesado con sus macabras tareas.

Miré a mi alrededor, ¡Una ventana! tan rápido como puedo voy hacia ella y la abro. Salgó y me paro en el alfeizar de la ventana, cierro de nuevo. Pego mi espalda a la pared, no era muy alto así que salté.

Y corrí tan rápido como mis pies me permitieron, tan rápido como si las criaturas surgidas de la desesperación y el horror me persiguieran, sin embargo nadie lo hacía.

Paré, apoyando las manos en las rodillas para poder recuperar mejor el aliento. Levanto la vista, estoy frente a la estación de policía.

Ahora tengo un problema muy grande, después de todo, no sé si lo imaginé, mis recuerdos están borrosos, como los de un rompecabezas y no puedo conseguir armarlo, la historia no tiene sentido, no puedo hablar así, ahora no sirvo para delatar aquello que vi, porque no sé lo que vi.

*

Tomé un taxi, aun temblaba como un niño, subí por la ventana como hacía cuando salía muy tarde y no quería molestar a Baekhyun. Sin poder llegar a mi cama me dejé caer en el suelo, y lloré, lloré como nunca antes.

Al cabo de un rato el cansancio tanto mental como físico se apoderó de mi, dejándome dormido allí en el suelo.

🍷De sangre fría y piel desnuda.🍷 [ChanSoo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora