BAJO EL MISMO TECHO [MOONSUN ADAPTACIÓN]

VII. ¿POR QUÉ ME MOLESTA?

El viernes por la tarde, Byul salió de la ducha e hizo la mochila para disimular con su abuelo. Como siempre, le había dicho que iba a casa de SeulGi a estudiar. Solar pasó por la puerta de su habitación y la vio meter unas botas muy familiares en la mochila.

—Te vas a estudiar, ¿no? —preguntó con ironía.

—Sí, ¿algún problema? —Su respuesta fue seca.

—Para nada, tú sabrás lo que haces.

Solar se metió en su habitación y se sentó en la mesa donde tenía apuntes y libros esparcidos. Byul la siguió.

—¿Y tú te vas a quedar estudiando en casa? —Sentía la necesidad de provocarla—, ¿no has estudiado suficiente entre semana?

—Quiero aprobar todas las asignaturas y eso requiere de tiempo y esfuerzo —replicó sin mirarla.

—Pues te dejo con tus libros, yo me voy a estudiar con SeulGi —afirmó, sabiendo ambas lo que realmente iba a hacer. Solar no pudo contenerse.

—¿Por qué esta doble vida, Byul? —La miró con cierta decepción en el rostro. Después de varios días viviendo allí, había podido comprobar que Byul apenas iba a la universidad, aunque su abuelo creyese que sí—. ¿Por qué abandonas tus estudios?, ¿por qué le ocultas a tu abuelo lo que haces y cómo eres realmente? — La aludida se dio la vuelta para enfrentarla.

—No te atrevas a decirle nada —masculló.

—Antes o después acabará sabiendo las cosas.

—¿Me estás amenazando?

—¿Todo tienes que tomarlo como un ataque? —exclamó YongSun cansada de su actitud—. Cualquier detalle o descuido te delatará, no podrás ocultarlo para siempre.

—Si no estuvieras aquí, estaría mucho más tranquila respecto a eso —admitió Moon Byul—, pero me tengo que joder porque mi abuelo es un buen samaritano.

—Me caía mejor la Yul de "Mix & Malt", al menos era más agradable —dijo con aspereza—, claro que quería meterse en mis bragas —acusó son resentimiento. Su paciencia también se había agotado.

—La Solar de "Mix & Malt" parecía encantada con esa posibilidad, hasta que se le cruzaron los cables.

—Yo lo llamaría entrar en razón.

—Yo lo llamaría ser una mojabragas.

—Eres una estúpida, Byul, sal de mi habitación.

—¿Tu habitación?, ésta no es tu habitación, y ésta no es tu casa —afirmó con desprecio.

—Lo tengo muy claro, me lo haces sentir cada maldito día —culpó YongSun con furia—, y procura no trasnochar mucho, porque mañana me vas a tener que hacer un par de favores, ya sabes que yo estudio y doy clases de dibujo, a diferencia de otras, y el tiempo no me sobra.

Byul iba a contestarle algo, pero antes de que pudiera hablar, sonó su móvil, era Chang Sub, para decirle que HwaSa y él la estaban esperando a dos calles de su casa. Se marchó de allí sin decir nada más. YongSun casi sintió alivio cuando escuchó la puerta principal ¿Hasta cuándo podría aguantar aquella situación? Agradecía que Xiumin y su madre estuvieran bastante tiempo fuera de casa, al menos se ahorraban aquellas conversaciones tan lamentables.

La mente de Byul bullía en pensamientos. Parecía que no podía tener una conversación normal con YongSun, y lo peor de todo era que con sus bravuconerías, se arriesgaba a que la delatase ante su abuelo. ¿Cuándo aprendería a mantener la boca cerrada?, ¿quizá cuando dejase de dolerle el comportamiento de YongSun?