No eres el típico idiota.

Capítulo 11: ¡Al fin es viernes!

*Narra James*

¡Al fin es viernes! Desperté esta mañana, me duché y vestí con jeans negros, sudadera blanca y chaqueta de cuero negra. Escogí esta ropa ya que esta noche hay una fiesta en casa de Violet, Emily quiere que vaya con ella y yo me siento feliz de acompañarla.
Es hora, debo ir por Emily para llevarla a la escuela.

Iba en camino, en cuanto veo una preciosa chica salir de su casa, claro, es mi chica.

-Hola James, justo a tiempo. -dijo.

-Hola preciosa, vamos, sube.

-Estuve con Violet. Dijo que sería una gran fiesta.

-Espero que lo sea.

Llegamos a la escuela, hoy nos tocaba matemáticas a ambos. Me senté a su lado. No podía dejar de mirarla, es tan preciosa. Gran parte de la clase estuve distraído admirando sus preciosos ojos, me pierdo en ellos. Sé que suena algo cursi y creí que jamás volvería a enamorarme, pero.. Emily..

-Me encanta- susurré.

-Oí eso. -dijo ella.

Mierda, creí que lo había pensado. ¿Habrá escuchado todo lo que dije sobre ella? No es tan malo, sólo dije cosas buenas, aunque claro, de todos modos sería algo vergonzoso que haya escuchado lo cursi que soy.

*Narra Emily*

Hoy me tocó sólo una clase junto con James, estuve mirándolo mucho, podría pasar el resto de mi vida haciéndolo, creo que no lo notó y eso es bueno, no quiero que piense que soy una psicópata loca. El resto del día transcurrió normal en las aburridas clases.
Al salir de la escuela pasamos con James y los chicos al McDonnald's.
Platicamos y nos reímos mucho, los chicos son muy divertidos.
Nombré el tema de la fiesta de Violet, y matt tomó la palabra:

-Oh chicos, lo olvidaba. Violet dijo que les avisara que estaban invitados a su fiesta.

-Genial, deberíamos ir todos. -dijo Travis.

-Es un poco lejos así que vamos todos en mi auto. -Dijo Ryan.

-Oh si, que buena idea. -Dijo James.

Terminamos de comer y todos nos pusimos de pie, ya nos habíamos puesto de acuerdo para ir juntos a la fiesta de Violet.

-Nos vemos. - Dijimos todos al unísono.

-A las 9:30 en mi casa, ¡No lo olviden! -dije.

James me dejó en casa, ya eran casi las 7:30 tenía sólo 2 horas para arreglarme.