EPÍLOGO

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(¿Renovaron la casa?)

(¿Que importa?)

Lo importante sigue igual, la sala.

(Recuedas como me enseñaste a maquillarme, solo lo justo, nunca demasiado, decías.)

En frente, la cocina, a su lado las escaleras, subo y de inmediato esta su habitación.

Mis manos recuerdan su piel, mis labios los suyos.

(Nunca te olvidare.)

Bajo las escaleras y doblo al pasillo  que va al garaje, mi mano tiembla al tomar la manija, pero aun así la abró, pintura nueva cubre el infierno que vivimos.

(Pero siempre quedan marcas.)

Paso mis dedos sobre aquellas protuberancias en la pared.

"Siempre."

(¿Es aquí donde debería llorar?)

"No, aun no."

Con paso firme salgo de aquel lugar, me distraigo por un momento frente al espejo del recibidor, los tacones y el vestido rojo me quedan a la perfección, me acerco y revisó el maquillaje, todo en orden, giro la manija para salir.

En frente, Gabriel me espera en su deportivo rojo, como un caballero, baja y abre la puerta.

"Gracias."

Le digo con una sonrisa perfecta, luego él toma su lugar frente al volante.

"¿Como te fue?"

"Excelente."

Ensanchó la sonrisa mostrando algunos dientes.

"Me alegro. ¿Lista para conocer al gran Eñe?"

"Claro."

¿¿Quien Es Alejandra??Donde viven las historias. Descúbrelo ahora