Vergüenza e intimidación (3)

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Al salir de clases lo viste esperándote al lado de la puerta, sonrojado hasta las orejas y seguramente avergonzado por lo que hizo, tenía un esparadrapo en la mejilla que le golpeaste. Lo ignoraste, pero el se te cruzó, ahora con los ojos negros y una mirada algo... Temerosa.

- ¿Y ahora que?- dijiste de forma agresiva.

- lo siento- una voz ronca y temblorosa llegó a tus oídos, la voz del que te coqueteaba...- no esperaba que abrieses la puerta... Fue un accidente...- murmuró.

- lo que no es un accidente fue el golpe, ¿Tan fuerte te di para cambiarte la voz?- preguntaste alzando una ceja con el ceño sarcástico y molesto.

- emm... N-no, es... Estoy en un grupo y soy uno de los cantantes, a-acabé afónico, un poco...- apartó la mirada rascándose la nuca incómodo.

- ¿Y tus ojos? ¿Tienes esquizofrenia o doble personalidad o algo...?

- emmm... Bueno, yo...

- habla de una vez- gruñiste enfurecida, no tenían ganas de perder tiempo con idiota como él.

- doble personalidad...- contestó inmediatamente por el miedo a que lo golpeases. Tu mueca cambio tan rápido como un rayo y eso hizo que él acabase sorprendido por tu reacción, y después temió por el paso que retrocediste lejos de su alcance- ____, yo...

Alzaste una mano para callarlo como diciendo que no querías escucharlo más, te fuiste corriendo después sin dejarlo hablar, inmediatamente él fue tras de ti preocupado por tu reacción tan radical.

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En la salida de la escuela, evitarte todo el contacto con ese castaño extraño durante todo el día, doble personalidad, no paraban de pensar en ello de forma incansable, no se te iba de la mente y no te podías concentrar. ¿Porque? No lo sabías. No lo entendías. Tan solo no soportaban verlo a la cara, lo ignorabas y te alejabas. Pero él te detuvo cuando salisteis y tomó tu muñeca fuerte para que no huyeses.

- ______, lo sigo en serio, tengo que hablar contigo...- su voz era su suave y sus ojos azules, lo miraste con miedo- Fred te lo dijo... Verdad?

- déjame sola, friki...-te libraste de su agarre y seguiste tu camino con impotencia, algo que jamás habías sentido antes, y te dolía sentirlo... Te había sentir frágil y fácil. Eso no te gustaba en absoluto. Su insistencia te molestaba de sobremanera y las ganas de girarte, patearle, y huir corriendo subían como la espuma...

- lo digo es serio, tenemos que hablar contigo...- y fue ahí cuando te giraste con el ceño fruncido, bueno, realmente había algo de miedo e intimidación en tu mirada.

- Y ahora me hablas en plural, pretendes que me quedé aquí cuando un lunático con doble personalidad me quiere comer el coco!?

- no, solo quiero que me escuches...- ahora su voz era grave y los ojos habían cambiando a negro con un parpadeo- solo escúchame un instante...- te cruzaste de brazos derrotada y le diste un ademán para que continuara hablando. Sonrió un poco- ¿Porque huyes de nosotros?

- no quiero juntarme con frikis...

- tenías miedo...

- porque es raro- contestaste.

- como si ya lo hubieras vivido antes y hubiese sido algo malo...

- repito es estúpidamente raro- te cruzaste de brazos como si fuera obvio.

- Algo te ha tenido que pasar para que me tengas miedo...- habló para que tú mirada temblase ligeramente, pero frunciste el ceño irritada- no era eso lo que quería decirte... _______, ¿Quisieras hacer el trabajo en grupo con nosotros? Con Freddy y conmigo?

- ¿Tenéis diferentes nombre?- cuestionaste curiosamente sonriendo con sutileza, quizás el burlarte un poco te bajaba el miedo que tenías en ese momento, porque si, sentías miedo, miedo de él, miedo de lo que pasaste antes, miedo a muchas cosas.

- Freddy y Fred...- se encogió de hombros- yo soy Fred, el sexy y ligón que no va a dejarte sufrir o golpear a nadie... Y Freddy es el niñito perfecto que siempre hace las cosas bien y que no quiere llamar la atención, vamos, el formal y educado... En mi puedes confiar...- sonrió de lado.

- ¿Os... Os conocéis...? ¿Eso es posible?- le preguntaste confundida, normalmente las personas con doble personalidad no pueden conocer a los otros y no recuerdan lo que sucede después de tomar el control. Asintió con la cabeza.

- digamos que la relación es estrecha y confidencial, somos más como hermanos- habló el castaño sonriendo levemente- y ahora dime, ¿Porque me tenías miedo?

- ¿Eso te importa acaso?- dijiste rudo y seca para dejarle claro que no le ibas a contestar. El hizo una mueca y rodó los ojos.- ¿Te parece bien si me dejas largarme a casa de una maldita vez?

- haremos el trabajo ese juntos, no?

- como sea...- aceptaste a regaña dientes y tan solo rodaste los ojos, él sonrió de lado- no te hagas ilusiones de que trabajaré mucho...- él río y parpadeó, sus ojos eran azules de nuevo, Freddy, supusiste.

- me vale con que hayas aceptado...- se fue en la otra dirección- nos vemos mañana ______- te guiñó un ojo haciendo que apartases la mirada.

Notaste como la sangre huía de tu cuerpo directamente a tus mejillas dando una sensación de calor en ellas, un sonrojo, no, no podía ser... ¿En serio te habías sonrojado con ese tonto?

Maldición...

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Al día siguiente tu mirada se proyectó en la entrada, era Freddy... No, tenía los ojos negros, era Fred, lo saludaste de mala gana y te acercaste a él. Sonrió y te recordó lo del trabajo y entró sin decir nada más, gruñiste enfadada y molesta por lo poco que te dijo, no tenías el uniforme puesto, estaba tirado de mala gana en el casillero. Abriste el mismo y todas tus cosas se cayeron al suelo. Le diste una patada al uniforme y sentiste impotencia al notar la mirada de todos y las risas de los demás.

- ¿¡Quién es el idiota que se está riendo!?- gritaste enfurecida.

Todos huyeron corriendo por el pasillo dejándote sola. Al quedarte en sola tu labio tembló y te encogiste hasta caer al suelo de rodillas para después sollozar ligeramente.

- ¿_____?- preguntó la voz de Fred acercándose por el pasillo y al ver y oír que llorabas se acercó corriendo hacia ti y se encogió a tu lado reposando una rodilla en el suelo.- ¿Que te pasó?- preguntó de nuevo alzando una ceja, miró tu casillero abierto, las cosas tiradas y tu mirada como nunca antes se había visto, sollozando y vulnerable, eso lo hizo temer por si te habían golpeado o algo... No fuiste capaz de articular nada, solo abrazarte a él y ponerte a llorar por la vergüenza a que te dijera algo.

- lárgate- dijiste pero sin soltarlo o alejarlo de tu lado, tan solo la vergüenza de verte vulnerable ante él, pero son solo te abrazó más fuerte. Eso hacia que un sonrojo potente creciera en tus mejillas, estúpidos sentimientos inoportunos de mujer, ¿¡Porque tenías que sonrojarte tan fácil!?...

(Si en algún momento ven alguna falta lamento las molestias, es que el auto-corrector me lo traduce todo automáticamente, es posible que algo que yo haya escrito lo traduzca como otra palabra, lamento las molestias una vez más).

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Hola!!! :D

¿Que tal el capítulo?

Se que estos son cortitos, pero yo creo que son suficientemente largos para vosotros :)

Otro caso diferente son otras historias, pero en esta decidí hacerlo así, bueno, disfrutenlo igual :3

¿Os gusta la personalidad de la rayis?

Así un pregunta al aire xd

Espero que os haya gustado y nos vemos en el próximo capítulo

Bye~

By Ecchisforlife

[1248 Palabras]

60.- Rebelde (Fred x lectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora