7 Lucas

359 27 1
                                    

Cerré lentamente la puerta mientras me quedaba en blanco intentando ignorar las despedidas de mi padre y lo que me quedaba aún de noche por soportar.

Bajé los escalones en silencio y fijandome en cada paso que daba. Cuando fui a salir del recinto miré a Calum, el cual sonrió. Pero lo que yo quería no era verle sonreir, era oirle. Era oir su sensible voz que acariaba mi cuello con solo oirla, sin importar lo que me dijera.

-¿Qué tal?

-Um...-intenté disfrutar al máximo de esas dos palabras- Bien.-Sabían a poco, quería más, quería oírle hablar toda la noche; era lo único bueno que podría ganar.-¿Y tú?

-Bien también, supongo.- Dijo al mismo tiempo que apretaba sus labios y miraba a sus pies.

-¿Supones?-Reí intentandole hacer sonreir almenos, lo que quizás pudiera ser una droga para mi.

-Supongo- Dijo dibujando una media dia sonrisa en su rostro. Noté como sus ojos se clababan en los míos, y no sabía que hacer. Simplemente hice lo mismo que él antes. Mirar a los pies.-Oye..-comenzó a reír secamente-Tu...no querías venir-dejó de reír y me miró. No pude identificar su mirada.-¿Verdad?

No sé mentir. Y eso es jodido. ¿Enserio voy a hacer que un pobre chico australiano al que acabo de conocer le entre depresión? Bueno, analizando mejor la frase, lo de "pobre" habría que discutirlo tras lo que me dijo. "Te ayudó a subir la persiana metálica con la que no podías" me dijo mi subconsciente; "¿Y lo qué me dijo luego?" Ataqué. "Quizás coquetee así" apuntó este de nuevo; "Pues no me gusta la gente que intenta llamar mi atención así". "Te encanta". Corté la conversación conmigo misma y solo agregué un "Cállate" a mis interiores, porque en el fondo sabía que era verdad.

Yo seguía sin responder. Quizás mi respuesta no le importara. Preferí callar y decir la verdad.

-Eso lo responderé luego. - Dije con una sonrisa.

"Cobarde" Apuntó de nuevo mi subconsciente. No sé cuánto tiempo llevaba de batalla interna contra este. Me gustaba pensar que no había tardado 2 minutos en contestar.

Ahora parecía que Calum estuviese manteniendo una con el suyo.

-"Un dólar por sus pensamientos Señorito Hood"- Era una frase de Christian Grey, el cual me encantaba ya que eran fan de la triología, y que además rompería el hielo.

-Nada nena- Dijo con voz seria y sexy imitando al mismo.

Reí, notando como Calum sonreía y mi corazón lloraba por esas dos palabras, las cuáles dijo de broma y no personalmente. Lo cual creo que me afectó y no sé por qué.

-Oye. - Dijo dejándo de reír.

-¿Si?-Se me iluminaron los ojos al oír su voz.

-¿Podrías hablarme de Luke?

¿Luke?

-¿Mi amigo?

-Empezando por ahí- Dijo riendo- ¿Era solo amigo?

-Bueno, claro, el típico mejor amigo. No te gusta ni sientes nada serio con él, pero está bueno- Reímos -Y no creo que surgiera nada. Alguna vez le cogí la mano con otra finalidad, - vi que Calum se tensaba- Pero no me gusta ni nada, si es lo que preguntas.

-Básicamente- Asintió.

Le miré y sonreí. Al ver que él solo apretaba los labios me acerqué a él, acaricie la textura de su americana negra con mi brazo desnudo y posé mi cabeza sobre su hombro. "QUE COÑO HACES" Gritaba mi subconsciente. Pero la verdad es que cuando Calum apoyó la suya sobre la mía y cogió la misma mano que se cogía a su espalda, me dió igual todo.

Never Be - Calum HoodDonde viven las historias. Descúbrelo ahora