Sweet Love & Hate Justin&Tu (Adapt.)

Capitulo 35.

Recosté a Dara en el pequeño corral que tenia en la sala. Ella solo se quedó con el biberón en la boca mientras me observaba. Tomé el Folleto de Aprendizaje que me habían dado en la academia. Comenzé a leerlo detenidamente. Ya había cenado y Justin aún no llegaba, y era muy tarde también.

Rain seguramente dormía ya y las chicas del servicio se habían ido hace ya una hora. Yo no iba a mi habitación porque Dai haría una rabieta segura. Me quité mis sandalias y me senté bien en el sofá mientras me concentraba leyendo.

Minutos después miré a Dai y ya estaba profundamente dormida. Me levanté y le quité el biberón lentamente. Suspiré cuando ella se acomodó rápidamente de lado. Dejé el folleto abierto y caminé hasta la cocina, lavé el biberón y dejé todo en orden, cuando salí apagué las luces y caminé mientras acomodaba mi cabello en un moño despeinado.

Cuando llegué a la sala me asusté al ver a Justin observando a Dara dormida. El me vio y sonrió, luego se acercó a mi y me besó tomando mi cintura.

- Siento mucho llegar tarde.

- No te preocupes -bufé.

- Enserio lo siento. Es que... -suspiró- Uno de mis hermanos está en la ciudad. Y fui con el a cenar.

- Oh, con que uno de tus hermanos -sonreí.

- Si. Entonces...Se nos fue el tiempo hablando. Tenia años sin verlo. ¿Esta bien cierto?

- Claro que si. -me incliné a besarlo- ¿Y entonces?

- Nada. Solo hablamos. Y...Le hablé sobre ti, se emocionó al saber que tenia una sobrina. Dijo que la quería conocer.

- Bien, ¿Y?

- Solo eso.

- Tienes algo más Justin. Se que quieres decirme algo.

- Claro que no -rió.

- Justin...

Reí cuando me cargó y me tiró en el sofá, se colocó sobre mi y comenzó a besar mi cuello. No le respondí a nada porque si no llegaría a algo más. Cuando se dio cuenta me miró y solo reí, tomé su cara y lo besé, luego me senté sobre el a ahorcadas.

- Dimelo.

- Es que hay una Subasta la semana que viene. Yo tengo un amigo, y le conté sobre ti, que nos íbamos a casar y todo eso. Al parecer se le escapó y ahora todo mundo lo sabe.

- Ajá.

- Recibí la invitación y dice "Señor y Señora Bieber"...Debemos ir los dos.

- ¿¡Qué!? -grité y me tapé inmediatamente la boca mirando a Dai- ¿Cómo que debo ir contigo? Eso es absurdo.

- Claro que no. Una vez casados deberás acostumbrarte a salir de esa forma conmigo.

- No...No, no y no. -reí.

- Claro que si. Asi que preparate, la semana que viene me acompañaras a esa subasta. Ve con pijama y uno grande.

- ¿Por qué? -dije sobre sus labios.

- Porque seguramente todos te miraran.

- Claro que no, nunca lo hicieron en Wilmington.

- Seguramente acá si. Te lo digo por experiencia, cuando ven una mujer nueva, no paran de hablar de ella, más si es hermosa...Como tu -hiba a besarme pero lo detuve-

- ¿Tu lo haces, no?

- HACIA querida. Te tengo a ti y tu tienes todo lo que busco -dijo metiendo una mano debajo de mi vestido.

- Más te vale -reí.

- ¿Vamos a dormir? -Preguntó y me levanté automáticamente.

- ¡Tu llevas a Dai!

Corrí y tomé dos mantas que estaban en el borde de la cuna y corrí hasta desaparecer. Me quedé esperándolo en las escaleras y sonreí al verlo venir con Dai en brazos y su cabecita recostada en su hombro. El me sonrió y se acercó a besarme. Luego subimos las escaleras y me quedé unos segundos atrás mientras bajaba el interruptor de todas las luces.

Subí corriendo detrás de el y llegamos a la habitación. Corri hasta la cama y acomodé las mantas de Dai. Justin la recostó lentamente y la pequeña solo dio un suspiro largo. Me senté a su lado y reí cuando Justin comenzó a jalarme del pie. Me levanté pero el me abrazó llevándome hasta su gran armario, el cual tenia el tamaño de una habitación mediana.

Me abrazó y puso sus manos en mi trasero. Grité de sorpresa y me pegó a uno de los armarios. Gemí y lo besé. Quitó mi vestido automáticamente y comenzó a besar mi cuello mientras yo lo desvestía...Segundos después solo teníamos nuestra ropa interior. Estabamos por deshacernos de ella cuando oímos un grito. Daiara.

Salí corriendo y la vi sentada en la cama y llorando. Cuando me vio gateó hasta la orilla y la cargué automáticamente, me giré y vi a Justin salir con pantalones de pijama. El la cargó y se acostó con ella para contemplarla. Entré al armario y tomé el diminuto camisón de algodón que siempre dejaba ahí. Me lo puse y quité mi brassier después. Solo asi dormía tranquila y Dai no tenia ningún problema si quería lactar.

Apagué las luces y me acosté al lado de Justin el cual tenia sobre su pecho desnudo a Dai sollozando. La pequeña tenia los ojos bien abiertos mientras se limpiaba torpemente la nariz mocosa. Acaricié su espalda lentamente y se fue quedando tranquila, cerró sus ojitos lentamente, y después de varios minutos quedó dormida de nuevo.

- ¿Qué le habrá pasado? -susurró Justin acomodándola mejor sobre el.

- Una pesadilla seguro. Ha estado asi desde hace varios días.

- Oh, pobrecita -dijo acariciando la cabezita de Dai.

- Lo sé. Ni idea de cómo serán esa pesadillas, pero es eso.

- Ok. Seguramente ha visto algo o vivido algo. Hay que distraerla.

- Eso me dijo Rain -reí- Estoy intentándolo.

- Bien...Pero ahora debemos dormir.

- Lo sé.

Me estiré y lo besé, luego me metí bajo las sabanas y me quedé de lado observando a Justin y Dai. El se durmió rápidamente pero yo no. No podía hacerlo, no cuando sentía la presión de que pronto seria su esposa. Y tendría que entrar nuevamente en el mundo de la sociedad. Y no quería.

No quería volver a repetir lo que había pasado de pequeña. No lo anhelaba y mucho menos deseaba.