02

299 44 8
                                    

15 años después

—¿Rechazada? ¿Rechazaron mi aclaración?— hablaba una anciana que se encontraba sentada en la pequeña oficina. —E-es que no entiendo... Tengo cobertura amplia.— explicaba la anciana con preocupación.

El hombre ahora de cabellera plateada la escuchaba atentamente para luego empezar a explicar.

—Perdone Señora, pero, nuestra cobertura especifican que en el párrafo 27 dice- —el tono del teléfono en su escritorio sonó interrumpido su explicación.

—P-pero no puedo pagar eso...—

—Disculpe...— dijo antes de contestar el telefono.
—¿Reclamación Kim NamJoon?—

—Llamo de celebración de una mejorable ocasión.— hablaba del otro lado del teléfono.
Se trataba de su esposo SeokJin que se encontraba en casa en la parte de la cocina bañando a su hijo menor JungKook en el lavaplatos.
—Así es ¡Ahora es oficial la mudanza!— decía mientras le hacía peinados alocados a su animado hijo que jugaba con el agua.

—Si, qué alegría cariño y éstos tres años no cuentan por qué...

—¡Porque al fin desempaque la última caja que quedaba! Ya es oficial Ja ja ja— reía con superioridad mirando las cajas vacías. —¿Por qué guardamos tanta basura?—

—Escucha, bebé, estoy con un cliente.

—No digas más, salva el mundo con una póliza a la vez, cielo.— miro el reloj de la pared. —¡Oh! Tengo que pasar por los niños, hasta la noche.

—Bueno, cariño.— cortó la llamada y se dirigió nuevamente a la anciana.
—Disculpeme ¿En qué estábamos?

—Es que mi pensión es fija y si no puede ayudarme yo no sé qué hacer.— dijo con pena mientras sujetaba un pañuelo en sus manos para luego sonarse con escándalo.

NamJoon tenía su cabeza apoyado en su mano izquierda, le dolía que una persona mayor tenía que hacer trámites para tener una pensión digna ya que con la actual no le alcanzaba ni para pagar un viaje al caribe, si el pudiera la ayudaría.

Y claro que podía.

Se deslizó hacia la puerta y mira ambos lados, se paró de su silla y agradecía por ser alto.

"Ningún jefe, ningún soplón." pensó.

Volvió a su sitio.

—Ya, escuché Señora.— saco una libreta junto con un lápiz y se lo entrego a la señora que lo miraba con duda.
—Quisiera, pero, no puedo ayudarla, quisiera decirle que le dé una copia de su póliza a Yoo KiHyun.—
vio como la Señora lo seguía mirando con duda y le señalo la libreta para que anotará.
—Yoo KiHyun en el tercer piso, pero no puedo y no le aconsejo en completar la hoja verde y llevarla al segundo piso jurídico y que no espere que no le respondan en ayudarla con su problema.—
le sonrió al ver como la Señora anoto todo lo que le dijo.
—Quisiera apoyarla, pero, no soy el indicado.— finalizó parándose de su asiento y enmarcando más sus hoyuelos.

—¡Oh! ¡gracias joven! Se lo agradezco.

NamJoon puso su dedo índice en su labios con desesperación.

—¡Perdoneme de que esté desesperada!— gritó para ser escuchado por sus compañeros.
Finga mucha desesperación.— le susurró a la señora que de inmediato empezó a actuar mientras salía.

—¡Kim!— gritó con enojo un hombre al entrar a su pequeña oficina, de inmediato NamJoon se paró por la sorpresiva aparición de su jefe.
—¿¡Autorizaste que paguemos está póliza!?—

The Incredible. [NamJin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora