𝐂𝐀𝐒𝐈𝐋𝐋𝐄𝐑𝐎 𝟎𝟗𝟕 ❝ ❞ ⁿᵃʳᵘʰⁱⁿᵃ

📚C U A T R O📚

-Yo no pienso hacer eso -Dijo Sakura con firmeza.

-¡Sólo debes distraerlo por unos minutos!. Tú dijiste que debe ser una buena persona, si lo es, vamos a comprobarlo ahora.

-No quiero que lo molesten de esa forma, si él no quiere que vean lo que tiene en su casillero, respétenlo y ya.

-Pero... -Bufó- ¡Pero se lo merece!.

-¡Tú no tienes idea de como sucedieron las cosas! -Gritó mostrándose molesta, más bien furiosa.

Ella tomó su mochila y se fue del salón tirando de sus cabellos. Los pocos alumnos que quedaban miraron la puerta y después al par que aún yacía sentado, sorprendidos, por la repentina reacción de la peli-rosa.

-¿Qué le pasa a Sakura hoy? -De verdad le extrañaba la actitud de su amiga.

-Perdón... -Hinata le miró confundida.

-¿Por qué me pides disculpas?.

-Se puso así por lo que dije y probablemente también se enoje contigo -Murmuró cabizbajo.

No quería empezar una enemistad a penas en su segundo día de clases. Tampoco era su intención insultar al Uchiha, pero su curiosidad le ganaba.

Escuchó a Hinata rechistar y pararse de su asiento. Pensó que se iba a ir, igualmente molesta, hasta que levantó su vista y la miró como sonreía.

Si que tenía una bonita sonrisa.

-Yo hablaré con ella, de seguro tiene una razón para que se coloque así -Sacudía el hombro del rubio para animarlo- Quizás problemas de mujeres, ya sabes, esos días -Le guiñó un ojo.

Naruto se sonrojó y de nuevo desvió su mirada.

-No me des más detalles, por favor -Hinata rió ante su petición- Tendremos que hacer esto solos entonces.

-Sakura ya dejó claro que no nos ayudaría.

Ambos se quedaron un par de minutos en silencio hasta que a la peli-negra le llegó un mensaje avisándole con el tintineo del celular. Lo ojeó para ver de quién era y casi entró en pánico al ver la hora.

-Ya tengo que irme a casa, es tarde -Suspiró- Nos vemos mañana Naruto -Sacudió los cabellos de este dejándolo más despeinado de lo que ya estaba.

-Adiós.

Después que ella saliera, también decidió hacerlo pues ese no era su salón, y si llegaba un profesor le regañaría porque eso no estaba permitido.

Iba ya llegando a la salida cuando sus ganas de ir al baño lo atacaron repentinamente. Su casa no estaba tan lejos, pero no se aguantaría hasta llegar.

-Si tienes que ir, tienes que ir -Se dijo dando media vuelta para llegar al baño más cercano, el del primer piso.

El pasillo estaba desierto, ¿tan tarde era?.

Miró las etiquetas de las puertas desde la vista y se fijó que al final estaban los camerinos de hombres y, a un lado, el baño para los mismos. No sabe porqué sintió alegría en ese momento.

No pasó el hecho que la puerta del camerino tuviera un letrero pegado de "No Entrar". Recordó en seguida la historia de Shikamaru, sobre la bomba de humo, tal vez sepa más sobre ella otro día. 

Le sorprendió que por ser sólo una bomba lo hayan dejado sin uso.

Se acercó un poco y notó como estaba sin seguro. Su mandíbula se tensó al escuchar una voz grave que conoció a penas en su primer día de clases. Abrió la puerta tan sólo un poco, estaba dispuesto a oír que decía.

-No van a lograrlo, cálmate -Le hablaba a alguien. No pensaba asomarse, ya de por si era peligroso escuchar- Ya debo irme -Resonó el chasquido de un beso y los pasos acercándose a la salida.

Okey, había entrado en pánico.

Olvidó sus ganas de ir a baño y corrió y corrió hasta por fin salir del establecimiento y sentir que podía respirar tranquilo. Ahora debía hacer como que nada pasó e ir a su casa.

¿Acaso Uchiha Sasuke tenía pareja? ¿Y quiénes no deben descubrir que cosa?. Fueron las incógnitas que rondaron por su cabeza todo el camino.

[📚]

Al siguiente día, Naruto iba llegando a la escuela cuando se fijó que su única amiga, Hinata, estaba conversando con alguien que no podía ver pues esta le tapaba. No dudó en acercárse.

-Hola -Ella dió un respingo cuando una mano tocó ligeramente su hombro.

-Oh, buenos días -Le saludó Hinata alegre, y dirigió su mirada a un lado donde estaba Sakura sonriéndole levemente.

-Lo siento, pero Hinata tengo algo que contarte. Descubrí algo de Sasuke.

-¿Ah? -Enarcó una ceja, estaba desconsertada en la forma que el rubio obtenía una información tan rápido- ¿Qué cosa?.

-Hay una gran posibilidad de que él esté en una relación -Ambas chicas abrieron los ojos sorprendidas- Luego de que te fuiste, quise ir al baño y terminé llendo al del primer piso. Antes de entrar, escuché su voz en el camerin sin uso, también besar a alguien.

-Que loco -Dijo la peli-negra aún sorprendida.

-¿Con quién estaba? -Se metió Sakura mirándo curiosa al chico.

-Oh, ¿Ahora te interesa, Sakura? -Sonrió sin poder evitarlo. Quizás aún podría llevar a cabo su plan de distraerlo.

La peli-rosa se encogió de hombros restándole importancia, pero ellos notaron sus mejillas coloradas.

-Bueno, no sé quién es ese alguien, pero creo haber escuchado algo de "No lo sabrán" o ¿"No van a lograrlo"? -Dijo confundido- No recuerdo bien... -Rascó su nuca- Algo así.

-¿Y si sabe de nuestro plan? -Sintió su piel palidecerse por un momento- Oh no, debemos dejar esto. ¡Me gusta vivir!.

-Y a mi me gusta que Hinata viva, ya mejor deja esto -Dijo Sakura aún con una sonrisa pequeña.

-Ay, vamos -Rió un poco- No creo que Sasuke Uchiha, Uchiha Sasuke, como quieran llamarlo, nos haga algo muy grave o que, por lo menos, no nos mate. En serio quiero saber que hay en ese casillero y que secreto esconde.

Miró a Hinata quien le miraba seria y después a Sakura que estaba cabizbaja mordiéndose el labio, parecía pensar su respuesta.

-No, olvídenlo, no pienso ayudarlos a seguir con esto -Pacíficamente, caminó a la entrada de la escuela bajo la atenta miradas de los otros dos.

Naruto volvió a mirar a Hinata que, al darse cuenta que el rubio se disponía a seguir hablando del tema, habló casi interrumpiéndolo.

-Naruto... -Balbuceo- Sabes que me gustaría apoyarte, pero es muy mala idea.

Él suspiró, se la veía venir.

-Mmh -Negó- Olvídalo, seguiré yo solo -Pasó por su lado rápidamente antes que se arrepintiera, porque, bueno, era su única amiga.

Hinata lo llamó antes que se perdiera entre las puertas de entrada, pero él no contestó ni se volteó. Rascó su brazo indecisa mirándo el piso, tratándo de auto-convencerse de que lo que hacía era lo correcto y seguir a Sakura en "el camino de respetar al Uchiha", pero simplemente se le venía la imágen de Naruto a la mente y se apiadaba de él. Odiaba tener corazón de abuela. Ahora ese chico, un año menor que ella, la podía manipular así tras conocerlo un par de días, no podía creerlo.

Esos pensamientos se desvanecieron al escuchar la campana y el sonido de puertas cerrándose. Recordó que debía ir a clases y corrió a su salón.