RUNNING UP THAT HILL - KAISOO

Capítulo 6

"Fuiste tú, ¿cierto?"

La pregunta se resbaló instintivamente de la boca de Kai, aunque ya sabía la respuesta. Kyungsoo parpadeó con la mirada fija en el prostituto, antes de dar una respuesta directa.

"Sí."

El alto no detectó señales de arrepentimiento, vergüenza, o cualquier otro sentimiento humano en esos grandes y turbios ojos que lo miraban fijamente. Se veían tan sin vida como los había visto antes.

Dejó salir un bufido antes de preguntar la única cosa por la que estaba curioso.

"En todo caso, ¿qué demonios estás haciendo aquí?"

La expresión de Kyungsoo fue tan firme que ni siquiera parpadeó. "Quiero explicarte."

Kai no podía comprender cómo su visitante nocturno podía actuar tan sinvergüenza. "No me debes ninguna explicación."

"Lo sé." El hombre respondió con voz fría. "Pero aún así quiero hacerlo."

"¿Y si yo no quiero escucharte?" El prostituto escupió en respuesta, con la ira empezando a correr por sus venas. "¿Me amenazarás con llamar a Mino y me forzarás a hacerlo?"

Por unos segundos hubo silencio; y aparentemente Kyungsoo reflexionando las palabras del otro, rompió el contacto visual primero mientras bajaba su mirada.

"No, no lo haré. Respetaré tu deseo."

Kai estaba, de hecho, sorprendido de escuchar esas palabras tan buenas, incluso aunque no confiara en que fueran verdad.

"¿No crees que tu explicación debería ser dirigida a Sora en lugar de a mí?"

"No, no lo creo." Kyungsoo declaró fríamente, antes de que su atención fuera apartada por el sonido de dos personas subiendo las escaleras a mitad de una intensa discusión. Kai instantáneamente supo que eran sus vecinos drogadictos de arriba.

"¿Puedo pasar?" El hombre volteó hacia Kai, quien no pudo evitar hacer una mueca burlona en respuesta.

"¿No está acostumbrado a esta clase de personas inmundas e inmorales, Mr. Do?" Se aseguró de repetir esas crueles palabras que fueron dirigidas hacia él antes, para que todos escucharan.

"En efecto. No estoy acostumbrado a esto."

El alto casi podía escuchar una súplica en esas frías palabras, voz monótona y mirada en blanco. Todo lo que tenía que hacer era decirle fuerte y claro, que amablemente podía irse bien a la mierda, y luego cerrar la puerta en su cara. Pero incluso si rechazar a Kyungsoo de esa manera le traería problemas con Mino, el miedo no era la razón real por la cual terminó haciendo espacio para que el hombre pudiera entrar a su departamento.

Una vez que los dos hombres se sentaron tan lejos del otro como la pequeña y estrecha sala lo permitió, Kai habló una vez más. "Pienso que deberías guardar cualquier disculpa que tengas para Sora. Ella es la única a la que perjudicaste hoy."

"Lo sé. Pero no tengo ninguna explicación o disculpa para ella." Kyungsoo no hizo ningún intento de fingir preocupación. "Hice lo que tenía que hacer."

"¡No puedo creer que tengas la osadía de decir eso!" Kai sacudió su cabeza, incrédulo al notar la indiferencia del otro.

"Ella se lo merecía." Kyungsoo no disminuyó su arrogancia ni un poco. "No espero que lo entiendas."

"Lo que no entiendo es tu razón para estar aquí." En este momento, Kai se estaba hartando por el encriptado mensaje del hombre. "No haces más que decir que no lamentas haber hecho lo que hiciste. ¿Viniste a amenazarme? ¿O querías ver si tu plan había funcionado-?"