Capítulo 26 - James

260 14 0
                                    

Capítulo veintiséis.

–No deberías fumar–le dije, quitándole el cigarrillo de la mano.

–Tú no me dices qué es lo que tengo qué hacer. Devuélvemelo–trató de quitármelo pero se lo impedí.

Se llevó las manos a la cabeza y suspiró. Estábamos sentados en la acera fuera de su casa. Su madre no estaba y yo me había escapado de casa.

Habíamos quedado de vernos, pero no era lo mismo. No me hablaba como antes, y aun así yo le rogaba.

–Vine para hablar, no para decirte qué es lo que tienes que hacer, porque tú lo sabes–dije, irritado–. ¿Por qué te has alejado? Te extraño, ___.

–Yo también te extraño…

–¿Y por qué lo dices dudando? –Levanto las cejas y me acerco a ella, poniendo mis manos sobre su mejilla–. No lo dudes, ____.

–No lo estoy dudando–quita mi mano de su rostro y se aleja un poco. Vaya, eso me dolió–. Pero sabes que esto no está bien. No es bueno que tú y yo sigamos con esto.

–¿A quién le importa? No debe importarte lo que piensen los demás… mucho menos nuestros padres, eso no importa, en serio. Pensé que me querías, demuéstramelo.

–Te quiero, sí, pero esto sólo nos va a hacer mal a los dos. ¿Lo entiendes?

Se puso de pie rápido y se pasó la mano por el cabello, inspirando fuertemente. ¿Pero qué pensaba?

–Creo que tienes que irte–me dijo.

–Y me lo pides así como así… Han pasado más de cuatro semanas y no te he visto, déjame estar contigo un rato más…–me levanté y me acerqué a ella–. Sabes que estos momentos hay que aprovecharlos.

–Pensé que respetabas mi opinión.

–La respeto, pero no te entiendo. ¿Qué pasa? ¿Por qué me quieres lejos?

–No te quiero lejos, pero…

Entonces, una voz que ya conocía se escuchó hasta donde estábamos nosotros. Me giré, guiándome por la mirada de ____ y lo vi. Era James. ¿Qué mierda estaba haciendo ahí?

–¿Qué haces aquí? –le pregunté, mirándolos a ambos.

–Pensé que le habías dicho…–dijo aparte, mirándola.

–Estaba a punto de.

–¿Qué cosa? ¿Qué mierda está pasando?

–Salimos. ___ y yo salimos, Kendall. Pensé que lo sabías.

¡Puta madre! Claramente no lo sabía, y ella sabía ocultarlo. Ni por un momento se me ocurrió pensar semejante estupidez. ¿Mi “mejor amigo” y ella? Seguro que era una broma. No podían hacerme eso. Un estúpido juego, seguramente. Y era lo que más anhelaba que fuera.

–Dime que me está tomando el pelo–le dije a ____, pasándome la lengua por los labios–. No pueden traicionarme así, ambos.

–No te estamos traicionando–carraspeó–. Sólo es la verdad. Salimos.

–¿Y por qué mierda? ¡Joder! James, te creí mi mejor amigo… ¿y me haces esto?

–Yo no estoy haciendo eso. Pensé que lo sabías. Pensé que ____ te lo había dicho. Ella me lo dijo.

–Mintió–escupí–. Mierda, no puedo creer que me hagan esto… ¿Por qué? ___, explícame por qué.

–No tengo explicaciones. Lo quiero.

Esas dos palabras bastaron para que mi mundo se viniera encima. Sentí como si lo poco que me sostuviera en esos momentos se cayera. Mis piernas temblaron, incluso mi labio inferior. Viéndola a ella con él… por dios, no. No encajaban. Eran totalmente distintos. ¿Y desde cuándo lo quería? ¿Por qué lo quería? ¿Por qué eran novios?

«Demasiadas preguntas, Kendall. A la mierda».

–No, no lo quieres–les dije–. No te quiere, no puede quererte. No te conoce. ¿Sabes que intentó herirte cuando apenas eras nueva? –La miré, levantando las cejas.

–Eso es pasado–se apresuró a decir James–. Ya no. ___, yo te quiero. Desde hace tiempo lo hago, no dejes que él cambie eso…

–Sí te creo, James–suspiró–. Además, Kendall… James y yo… tenemos tiempo saliendo. Desde que te fuiste.

Otros dos balazos más para mí en el pecho.

No puede ser la enorme traición que sentía. Mi mejor amigo, y mi chica… Mía. Era mía.

Y lo peor era que ya tenían tiempo juntos, y yo… la había besado. La besé sin si quiera saber que ellos habían tenido una relación.

–Eso cambia las cosas–dije por fin–. ¡Lo hubieras dicho desde un principio! Hubiera entendido. James tiene tiempo fantaseando contigo. Debí imaginarlo.

–Kendall, yo…

–Mira, no hables, ___. No vale la pena. ¡No lo vales! Ni yo tampoco. Gracias por ser honesta. Te lo agradezco mucho.

-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Upss....

I want you to stay - Kendall Schimdt y Tu * TERMINADA*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora