LIBERACIÓN

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Sabes saray! Yo no he venido por casualidad acá, yo vine desde las fronteras de Brasil a buscarte! Desde que llegue te mandé a buscar y no has querido venir, fíjate como estas! Tu no eres lesbiana, tu no naciste así, nadie nació a así, ahora explicame, porque ella esta teniendo relaciones sexuales contigo aquí, si ella no esta aquí??
- apóstol yo no se lo que me esta pasando, y es algo que me da miedo, no se que me pasa, y me dice:
Porque eso es un demonio, y su nombre es asmodeo y yo ahora le hablado a ese demonio, y le digo que se manifieste.. - y yo le dije, no apóstol yo no quiero endemoniarme, y me dice: tu sabes que Dios me dio la autoridad de hacer que te endemonies ahora mismo.. - yo le dije: no apóstol por favor no!! No quiero.. Y comencé a sentir, unas sombras que se me encimaban, y comencé a perder la vista, y le digo: que pasa? No veo! Perdí la movilidad de me cuerpo, sentía una desesperación, qué pedi ayuda..- ayudeme por favooor!!! Y el me dice: no te quieres endemoniar??
Y yo le dije: no! Sin fuerzas ya! Y escucho a lo lejos que me dice: llama a papá y a mamá..
Y con casi sin control de mis oídos grite: MAMIII!! PAPIIII!!! Y vuelvo a gritar: MAMIII! PAPIIII!!.. Siento esas dos bellas presencias que vienen y me siento protegida cuál bebé recién nacido en brazos de mamá y papá, brazos de amor, y protección, donde toda tiniebla se fue, y comencé a recobrar mis sentidos, y me hayo de pie, y llorando, y ellos abrazandome, donde el apóstol dice:
Estuvo a punto de caer endemoniada, fíjate saray, Dios permite esto para que recapacites, y veas que algo así pero peor te pasará en el infierno, y el no quiere eso porque te ama, quieres ser libre??
Y yo le digo: como quedará ella? Porque yo y no las dos juntas? Porque ella también quiere ser libre. Y el me dice: si ella quiere yo le ministro liberación, pero dejame contigo primero,. Entonces dime!!..
Y yo le dije si, si quiero.. Y me dice, Dilo en voz alta... Y yo dije: QUIERO SER LIBRE!!.
Y el apóstol me ministro liberación, y yo sentía que algo salia de mi, quemando mi cuerpo, y grite de dolor, claro, eso me lo contaron mis padres porque yo solo recuerdo estar en la silla, diciendo me duele más no gritando, desde ese momento fui libre, pero ahí no quedó todo...

Dios te bendiga, esperó que Dios trate contigo como lo ha hecho conmigo...

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