El Reencuentro - Elio y Oliver

Marzia

Justo poco después de que se fuera Oliver me llamó Alessio para salir de fiesta esta noche y, siendo viernes, acepté.

Acabábamos de empezar último curso y lo que más quería era conocer gente nueva.

Nada más.

Llegaron las 11 p.m. y Alessio ya estaba esperándome abajo. Sería una fiesta de iniciación de último año en casa de uno de las chicas más ricas del curso; Daniela. Bastante bonita de rostro pero muy, extremadamente demasiado baja, y eso le quitaba casi todo el encanto, diría yo.

Llegamos 30 minutos después, resulta que su casa de millonaria estaba bastante apartada de la ciudad.

Fuera no había nadie, sólo coches aparcados. Muchos.

Entramos que no eran ni las 12 de la noche y el ambiente ya olía a alcohol y sexo por todas partes. Era asqueroso
pero a la vez excitante.

Enseguida encontramos a Flabio, algo raro por la cantidad de gente que había. Nos dirigimos los tres hacia la cocina en busca de algo que beber y saludar a algunos compañeros que nos íbamos encontrando.

- Oye, ¿y tú dónde estabas esta mañana, que no has aparecido? - se acercó Flabio a preguntarme gritando en la oreja, aún así me costó escucharlo bien.

- Solamente no había terminado el trabajo de Oliver, pero más tarde ya se lo entregué, así que en parte me arrepiento de haberme saltado todas las clases... - intenté decirle.

- ¿Quedaste con Oliver? - me preguntó confuso.

- H-Hm, no. Se lo envié por correo, ya sabes, como ahora nos tiene controlados de arriba a abajo...

- Ya ves, es un rollo. - me dice poniendo los ojos en blanco.

- ¡Pero bueno! ¡Muy buenas! - dijo Daniela dirigiéndose hacia nosotros. Saludó a Alessio y a Flabio, para después mirarme con cara de "¿Cómo te llamabas?"

- Elio Perlman, encantado. - le dije mientras me sonreía.

- ¿Puede ser que conozcas a Marzia...? - me preguntó dubitativa después de unos segundos.

- S-Sí, aunque hace bastante que perdimos el contacto. ¿Tú la conoces?

- Sí, somos amigas desde hace ya años y recuerdo que había un año que la tenías súper obsesionada, hasta que un dia dejó de hablar de tí. Hm. Pero bueno, ahora está en la facultad de ciencias. La he invitado hoy, así que quizá la ves por aquí. Me voy a saludar a la gente que va llegando. ¡Ciao!

Me quedé paralizado unos instantes. La verdad es que no me lo esperaba. Pero aún así si la llego a encontrar solo la saludaría, quedamos con quedar como amigos así que no hay ningún problema con ella, aunque hace muchísimo que no la veía, desde finales del mismo verano que conocí a Oliver.

Volví con mis amigos y fuimos directamente al comedor donde había la música y bailamos.

Después de un tiempo bailando con ellos, me dediqué a inspeccionar la gente de nuestro alrededor.

Aunque mi mirada sólo se fijó en dos chicos besándose salvajemente en un rincón mientras distintas chicas en su alrededor sacaban fotografías y se susurraban cosas al oído y, joder, eso me hizo recordar la última vez que Oliver me besó esta mañana.

Lo echaba de menos. Lo necesitaba.

Cogí mi móvil para seleccionar el contacto de Oliver y escribirle.

Elio
Me encantaría que estuvieras en la fiesta en la que estoy ahora mismo y que todos pudieran ver lo calientes y deliciosos que son nuestros besos para morirse de envidia.
00:23

Continué bailando pero rápidamente vibró mi móvil en el bolsillo de mi pantalón.

Oliver
No sé yo pero creo que acabo de llegar a la misma fiesta que tú, cariño.
00:25

Alcé la mirada hasta la puerta de la entrada y lo vi saludando a Daniela.

¿Qué mierda está pasando?

- Ahora vuelvo chicos, voy a saludar a un amigo. - me despedí de mis amigos y me dirigí hasta Oliver, que me dedicó una sonrisa malvada al verme. - ¿Hola?

Esta vez se giró Daniela para mirarme y decir - ¡Oh, Elio! Te presento a mi hermano, Oliver. Es profesor en la facultad de letras, aunque yo aún no entiendo cómo lo pudieron coger como profesor en esta universidad, él no es tan buenos como los demás profesores, es más tímido... - dijo ella cogiendome del brazo como si fuéramos amigos mientras reía y miraba de reojo a Oliver.

- Anda ya, cállate y deja de asustar a los chicos, hermanita. - dijo Oliver rompiendo la distancia que había entre Daniela y yo para colocar su mano en mi espalda y apartando la mano de ella.

- ¿Hermanita? - dije enseguida, incrédulo, apartandome ferozmente de su toque en la parte inferior de mi espalda.

- Así es, y tú eres el peor de mis alumnos. Creo que los dos tenéis algo en común. - dijo echándose a reír, ante lo que los dos lo miramos con mala cara.

- ¿Elio? ¿Oliver? - dijo entrando por la puerta de detrás de nosotros una voz conocida.

- ¡Marzia, tía! - dijo Daniela lanzándose a abrazarla al verla.

• Hoy me ha dado por escribir salseo 7u7 por cierto, voy a subir segunda parte de la fiesta so no penseis que esto se termina así...