Entre el cielo y el infierno

El cielo y el infierno se hicieron uno

Pasaron varios días hasta que lucifer y chuck se reunieron con los superiores de sus ejércitos preparando un nuevo ataque, un ataque que según ellos sería decisivo. Lo que ellos no sabían es que dos de sus superiores tenían un plan, y junto a ellos todos los demás miembros de su ejercito y sus superiores. Querían acabar con la guerra, demasiados daños, demasiadas muertes y la raza humana desaparecida por completo. No podían mas, el apocalipsis tenia que acabar. 

- ¡ Será el ataque definitivo! - dijo chuck con voz ruda. 

- Acabemos con los ángeles de una vez por todas - gritó lucifer frente a sus ejércitos. 

Los ejércitos de ambos bandos sonrieron y se prepararon para la gran lucha. En el campo donde siempre estaban luchando, ya estaba devastado por tantas guerras y tantas luchas, el aspecto era bastante desolador. Chuck y lucifer se pusieron en su posición, uno en el cielo y el otro en el infierno, Samael y Tristan, al igual que Castiel y Ross prepararon los hechizos que utilizarían aunque estaban un poco nerviosos ya que si no salia bien podía ser el fin de su existencia. 

De repente aparecieron desde el cielo miles de ángeles con sus alas blancas desplegadas y preparados para atacar. Desde el infierno salieron miles de demonios con sus alas negras y sus ojos negros preparados, también, para atacar. 

Los ejércitos de ambos bandos se pusieron se pusieron uno frente al otro con los lideres a la cabeza, Castiel, frente a samael y sus ejércitos tras ellos mirándose con furia. Castiel y samael dieron un paso hacia delante quedándose delante de todos los lideres de sus ejércitos e hicieron la señal que todos estaban preparando para comenzar su plan. Los ejércitos dieron un giro de 180 grados sobre si mismo y miraron hacia por donde habían venido. Chuck y Lucifer se sorprendieron al ver lo que estaba pasando, los lideres angelicales volaron un poco hacia arriba y comenzaron a lanzar ataques hacia el cielo, al igual que todos los componentes de su ejercito. Los demonios hicieron lo mismo pero lanzando ataques hacia el infierno. El cielo y el infierno no se estaba resistiendo a los ataques, allí no quedaba nadie, todos habían protegido a sus familias y los ataques que estaban lanzando los dos bandos a sus hogares estaba haciendo que pequeñas porciones del cielo y el infierno se vieran destruidas. Lucifer y chuck no tuvieron mas remedio que reaccionar y aparecer en el campo de batalla.

Los ángeles y los demonios dieron pasos hacia atrás haciendo que los miembros de las ultimas filas de ambos bandos se entrelazaran entre si, uniéndose demonios y ángeles en su lucha. 

- ¡ Parad! - grito chuck ordenando rápidamente 

- ¿que cojones estáis haciendo? - preguntó lucifer sin comprender que estaba pasando 

Castiel y Samael conocían a sus superiores y sabían que estaban preparando el ataque a si que dieron la señal a Ross y Tristan para que comenzaran a lanzar el hechizo. De repente chuck atacó a sus ejércitos al igual que Lucifer para intentar parar lo que estaba ocurriendo, dos grandes bolas de fuego aparecieron por ambos lados de los ejércitos que cada vez estaban mas entrelazados sin verse clara la diferencia entre demonios y ángeles. 

Ross y Tristán  lanzaron el hechizo a tiempo haciendo que las bolas de fuego que habían lanzado tanto uno como el otro de los superiores se desviaran de su trayectoria dando directamente a lucifer y chuck haciéndolos desaparecer en el mismo instante. La tierra comenzó a temblar sin darles tiempo a nada, los ángeles comenzaron su vuelo separando sus pies de la tierra al igual que los demonios, sorprendidos y asustados por el temblor que estaba ocurriendo en sus pies en aquel mismo momento. 

El temblor fue estrepitoso y brusco pero solo duró unos minutos, todo se tranquilizó y tanto ángeles como demonios pudieron poner sus pies sobre la tierra. Todo estaba tranquilo y Castiel, Samael, Ross y Tristan estaban felices por lo que había pasado por una parte ya que al parecer el apocalipsis había acabado pero por otro estaban tristes ya que la raza humana se había extinguido por completo y ahora solo quedaban ángeles, demonios y todo tipo de monstruos poblando el mundo. 

Ross y Tristán volvieron a casa junto a sus familias que habían estado muy asustados durante el tiempo que duró el temblor de tierra. En la tierra comenzaron a vivir ángeles y demonios de igual manera, dejando el infierno y el cielo totalmente despoblado. Algunos demonios y ángeles mas radicales seguían viviendo alli. Los metamórficos campaban a sus anchas por la calle al igual que los fantasmas, al igual que todos aquellos monstruos que existían. 

Samael se proclamó líder del infierno y guiaría a los demonios y cuidaría de ellos, así como también controlaría que no hubiera mas guerra por parte del infierno en la tierra, controlando también a los demonios terrestres para que no crearan problemas a los angeles en la tierra ni en ninguna otra parte. Castiel por su parte se quedó gobernando el cielo, haciendo lo mismo que samael, controlar a los ángeles en todas partes, para que no volvieran a acarrear problemas. 

estaba triste, a el le gustaban los humanos y ya no quedaba ninguno, solo había monstruos, monstruos por todas partes. Entró en el bunker que en algún tiempo había estado habitado por los winchester y comenzó a recordar todo lo que había ocurrido alli años atras. Recordó la cabezoneria de Dean y la inteligencia de Sam, recordó las broncas y las bromas, recordó los problemas y todo lo que esos dos muchachos habían hecho por el mundo, un mundo que al final los acabó consumiendo, una lucha que al final había acabado mal, muy mal. Todos a los que ellos habían salvado al final habían muerto, por culpa de los angeles y los demonios y todos esos sitios que ellos habían limpiado de seres sobrenaturales ahora estaban infectados de ellos.Todo para nada, todo el sufrimiento, para nada. 

Él ahora tenia poder, tenia poder de cambiar las cosas, tenia poder de repoblar la tierra con aquellos que algún dia murieron, y lo iba hacer, joder que si lo iba hacer. pero esta vez haria las cosas bien, no dejaría que los seres sobrenaturales se salieran con la suya, no iba a dejar que los winchester sufrieran de nuevo. tardaría tiempo, lo haría, tardaría años pero al final lo conseguiría, estaba seguro de ello al igual que estaba seguro de que los winchester no sufrirían otra vez, ellos nacerían, claro que lo harian pero lo harían sin problemas, sin mostruos, solo dos chicos haciendo su vida, quien sabe? quizás los haria nacer en diferentes familias, con diferentes apellidos y en diferentes lugares.

-  Jensen y Jared, Ackles y Padalecki, bonitos nombres- pensó. 

Pero los volvería a unir, joder claro que sí, los uniría, quizás por trabajo, quizas por otra cosa, no lo sabia pero sabia que lo haría. Tenia mucho trabajo, muchísimo por delante, pero haria desaparecer a los monstruos y repoblaría la tierra de nuevo y por supuesto traería a sus chicos de nuevo, que aunque no lo sabrían tendrían un angel de la guarda tras ellos. 

Dio varios pasos hacia la mesa donde un dia ellos grabaron sus iniciales S.W D.W tocando la hendidura de esas grabaciones, triste y pensando en ellos. 

- os traeré de vuelta y sereis felices, lo prometo - se dijo a si mismo y desapareció de la habitación dejando el bunker solo y olvidado.