Capitulo [1]

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"¡Paladines a sus leones!" El grito de Allura asusto a todos los paladines de Voltron, menos a Lance quien se encontraba en un estado de sueño demasiado profundo como para despertar por un grito a esa distancia, rápidamente la sala principal se encontraba con la mayoría de los habitante de ese castillo. La mirada de desaprobación de Allura basto para que los presentes supieran que era otro simulacro, esta visualizo a los paladines examinando con detenimiento el vestuario de cada uno.

Hunk llevaba un delantal que tenía mancha de una especie de masa extraña probablemente algún invento nuevo.
Pidge al igual que Keith llevaban su ropa de día que no era lo apropiado pero no estaba tan mal, mientras que Shiro llevaba su traje como todo buen líder.

"No puede ser" Suspira decepcionada casi rozando la molestia "Son paladines de Voltron deben estar siempre preparados, el único que lleva su traje es Shiro y Lance no esta aquí" Dijo haciendo exagerados ademanes con las manos. "Vuelvan a lo que estaban haciendo." Ordeno para dar por finalizado el simulacro.

Cada uno volvió a la actividad que realizaban con anterioridad. A ninguno le extrañaba la falta del paladín del león azul era común que se quedara dormido o que simplemente no los escuchara. A la hora de comer mandaron a Keith por el moreno esperando a que este lo llevara con rapidez.

Las puertas del comedor se abrieron permitiendo que el paladín rojo caminar por el castillo, giro en los pasillos correspondientes y se detuvo frente a la habitación de Lance. Toco tres veces, nadie respondió, toco otra vez, nada. Suspiro y apoyo su oído en la puerta intentando escuchar algún movimiento dentro de la misma, quizá el paladín azul todavía no se hallaba despierto. Se alejó un poco de la puerta y golpeo con fuerza.

"Es hora de comer, si no sales te vas a quedar sin comida" Dijo y se alejó de la puerta sin tomarle más importancia. Por otro lado los ojos Lance se encontraba en su cama mirando el techo, el silencio lo estaba asfixiando mientras sus propios pensamientos parecían torturarlo, el golpe de Keith lo asusto y saco de su ensoñación aunque no se había movido todavía ya que simplemente no tenía el ánimo necesario para levantar su estúpido cuerpo de la cama, más era consciente de que si no lo hacía preocuparía a sus compañeros por ello se levantó sintiendo el peso del mundo sobre él.

Cambio su ropa de dormir por algo más cómoda, entre sus cosas tomo un buzo que tal vez había robado de Shiro, pero quien lo podría culpar tenía que admitir que aquel hombre tenía un gusto bastante bueno, además que mejor que una remera grande para días como esos donde un leve frío se hacía presente en toda la instalación y su nariz se ponía levemente roja debido a las bajas temperaturas.

Salió de la habitación sin colocarse pantalón dejando que se notará levemente el bóxer de Toy's Story. Al llegar al comedor las miradas de todos se centraron en él. Algo nervioso se sentó.

"Tardaste mucho ¿ocurrió Algo?" Pregunto Hunk, mirando a su amigo, lo conocía lo suficiente como para saber si este se encontraba bien con sólo una mirada.

"Nada realmente importante" Respondió con monotonía aquello bastó para que Hunk supiera que debía hablar con él.
Era extraño que Shiro no haya reclamado la sustracción de su buzo en contra de su voluntad, ni Keith se hubiera burlado de su bóxer esto se debía a que todos habían notado una leve aura de tristeza alrededor del moreno... bueno... casi todos.

"Lance como paladín de Voltron tienes la obligación de estar siempre listo para cualquier tipo de amenaza, en el simulacro ni siquiera te presentaste, eso sólo demuestran una total falta de madurez y compromiso de tu parte." La voz de Allura resonó en la sala en un tono de regaño. Lance dirigió su vista a la peliblanca. "Esto no es un simple juego de niñitos, estos es serio e importante. ¿Estas realmente comprometido con Voltron? ¿O solo te burlas?" Pregunto sin pelos en la lengua y lista para seguir el regaño si el paladín le respondía algún sinsentido.

El silencio dudoso por parte de Lance, sorprendió a los presentes, esperaban que se levantará y con una de esas sonrisas que sólo él podía hacer, afirmara inmediatamente el estar comprometido con aquello pues el chico a pesar de tener diecisiete había demostrado gran madurez cuando la situación lo ameritaba.
Por otro lado, Lance no estaba realmente seguro, jamás lo había pensado, en su mente la posibilidad de no estar allí no existía por ello jamás se había cuestionado pero ahora pensándolo el simplemente se había dejado llevar porque era lo que tenía que hacer.

𝚈𝚘𝚞 𝙰𝚛𝚎 𝙽𝚘𝚝 𝚃𝚑𝚒𝚜Donde viven las historias. Descúbrelo ahora