Capitulo [21]

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"Por favor, no te vayas. Quedate conmigo. Por favor." Rogo sintiendo la sangre filtrarse entre sus dedos. "Todo va a estar bien, van a venir y te van a curar, vamos a salir de aquí, y vamos a ir a donde quieras, solo. Por favor, no me abandones, amor. No te atrevas a irte" Murmuro cerca de su chico presionando con las manos el pecho del mismo, no podía dejar de temblar.

No sabía qué hacer, el chico temblaba, la sangre había empapado su remera antes de que él mismo cayera, lo había arrastrado más dentro de la cueva. "Por favor, resiste, solo... solo un poco más" Murmuraba, lágrimas agrupándose en sus ojos, no podía perderlo, no quería perderlo, no a él. Minutos antes había enviado una señal con el pequeño aparato que Pidge le había dado la última vez.

"Solo presiona aquí y nosotros iremos" Había dicho en aquella ocasión, pero el tiempo pasaba y no había señales de ellos (tampoco de sus atacantes, por suerte.)

"No, no, Des, amor. Por favor, mírame. Por favor" Lloró al ver como el chico parecía no poder concentrarse en él y su respiración se iba haciendo cada vez más dificultosa. "Por favor, amor, por favor, por favor. No me dejes. ¿Puedes? Solo. Solo mírame a mí, concéntrate en mí" Rogo con los ojos llenos de lágrimas que no tardaron en caer sobre el otro.

Lo escucho toser, ahogándose con su sangre. Y se lamentó porque no parecía haber manera de salvarlo, porque la luz al final del túnel no era lo suficientemente brillante, porque se estaba escurriendo de sus manos sin que pudiera detenerlo.

"Por favor, no te lo lleves, por favor solo no te lo lleves." Le rogo a un ser superior en un intento desesperado de no perder a su chico.

Podia escucharlo murmurar cosas inteligibles probablemente causado por la pérdida de sangre. Lance no sabía cuánto tiempo habia pasado pero podía percibir los temblores de su cuerpo y como sus extremidades se entumecian por el frio.

"Vamos a salir de esto" Presiono la herida sin saber si intentaba consolarlo o consolarse "Aguanta un poco más, por favor" Momentos después tosió con sangre, mucha sangre, y eso estaba mal, si la sangre salía de su boca significaba que había en su garganta y eso no le iba a permitir respirar, lo movió como pudo para dejarlo sobre el costado sano logrando que dejara de ahogarse con su propia sangre, una gran cantidad salió expulsada en ese momento.

"Te amo" Susurró respirando pesada y lentamente para de pronto dejar de hacerlo, dejar de respirar. Y Lance, sin idea de que más hacer, comenzo a realizar el mejor RCP que pudo.

"Por favor" Sollozó. "Por favor no te vayas" Las palabras salían como ruegos y lamentos. "Por favor, no te lo lleves, no a él" Sus labios se marcharon con sangre, el cuerpo se volvió frío y la sangre se secó, pero el ojiazul no detuvo su llanto ni las compresiones hasta noto que ya ni siquiera habia sangre que el corazón pudiera bombear.

"No. No. No. ¡No! ¡Des! ¡por favor!" Grito en un llanto roto mientras abrazaba el cuerpo inerte de Desmond por lo que fueron horas o quiza dias. Se habia desmayado varias veces a causa del frio y no estaba seguro de cuánto tiempo había pasado, se escucharon ruidos a fuera, pasos resonaron por el lugar y vio las sombras acercarse.
Sostuvo al peliblanco más cerca, intentando ocultarlo, intentando ocultarse.

"¿Lance?" Una voz, lejana distorcionada provocó que se escogiera más en sí mismo y acercara más a Desmond. Una melena blanca y una mano tocaron su hombro. Se encogió todavía más de ser posible alejando de quien fuera que intentara dañarlos.

Entonces una mano quiso quitar a Desmond, no. No debía. No podía. Golpeo la mano sin fuerza realmente, ya no la tenía, sus extremidades estaban entumecidas, casi no las sentía, sus dedos se encontraban de un color violáceo extraño que prefería no tomar en cuenta. Aun así evito que lo alejaran.
Un pinchazo y sintió la poca fuerza irse, se quizo quejar, quiso golpear a quien sea que estuviera intentando llevárselo, no podía, sus movimientos eran todavía más torpes de lo que normalmente eran y la oscuridad llegó a él casi atropellandolo.

Por segunda vez Lance se encontraba en las capsula medica del castillo. Indicios de hipotermia y deshidratación.

Keith miraba a través del vidrio el rostro cansado de Lance, llevaba dos días dentro y nada parecía haber cambiado, si bien físicamente había mejorado seguía teniendo ese aspecto deprimente.

Coran habia dicho tendría que despertar entre hoy y mañana, y Keith no sabía que le aterraba más, que lo hiciera o que no, no estaban seguro de que sería lo último que Lance recordaría, parecia bastante desorientado cuando lo encontraron. ¿Recordaría haber huido? ¿Haber estado perdido dos días? ¿Recordaría la muerte de Desmond? ¿Los odiaría? Le habían prometido estar ahí cuando los necesitara y ni eso pudieron.

Días después Lance despertó, nadie más estaba en el castillo, pues aunque te detengas el mundo sigue girando y la guerra seguía desatada puertas afuera. El moreno cayo de la maquina en un ruido sordo y con sus rodillas tocando el piso, no podía pensar su mente se encontraba demasiado angustiada. ¿Dónde estaba Des? Tenía miedo porque la sensación fría de su cuerpo seguía ahí, marcada en él pero no veía al peliblanco en ningún lado, su cuerpo pesaba, cansado y abrumado no conseguia pensar con claridad. El sueño era demasiado y sus ojos amenazaban con cerrarse en el momento en el que se despistara, pero no podia dormir. Él tenian que encontrar a Des.

𝚈𝚘𝚞 𝙰𝚛𝚎 𝙽𝚘𝚝 𝚃𝚑𝚒𝚜Donde viven las historias. Descúbrelo ahora