Carta 18.

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Hola Anónimo:

No pienso que seas pesado, a mi también me gusta hablar contigo. Yo extrañé tus cartas, te extrañé a ti.

Ahora te explicaré todo lo que pasó hace una semana para hacer que no viniera al instituto.

El último día que hablamos, llegué a casa y estaba sola como siempre y la tarde pasó tranquila como todos los días pero a la noche llegó mi padre más borracho de lo normal y para mí mala suerte yo estaba levantada todavía. Cuando me vio empezó a insultar y a los pocos minutos empezó a pegarme a la vez que me insultaba. Me dio patadas en las costillas y en el estómago, me dio puñetazos por todos lados, me empujó y acabé en el suelo donde me di un fuerte golpe en la cabeza. La paliza fue tal que tuve que llamar a la ambulancia para que viniera por mi. Esta semana me la pegué entera en el hospital recuperándome de varias costillas rotas, una contusión en la cabeza, un corte en la ceja y otro en el labio y de todos los moratones que tenía por el cuerpo.

Pero eso ya pasó, ya estoy bien, recuperada de todo así que ya no tienes que preocuparte por mi.

Besos y abrazos.

Di.

P.D. No tienes porque tener miedo de decirme quién eres, no me interesa tú físico o tu forma de ser con los demás sólo me va a importar como eres conmigo y conmigo eres dulce y cariñoso. Deja tu miedo Axel, si llego a saber quién eres nada cambiará. ❤

Atte. Anónimo {Completa} #disneyawards19Donde viven las historias. Descúbrelo ahora