Pero cómo no ir por la vida con lágrimas en los ojos, pregunto
¿Cómo no pasarse la vida llorando?
Si el dolor es la vida misma.Cómo, pregunto, no llevar lágrimas en los ojos
una presión en el pecho,
¿Cómo impedir el desmoronamiento del cuerpo?
El hundimiento y asfixia
—el colapso—,
si precisamente vivir ocasiona todo esto.Cómo no necesitar el llanto,
y de paso evitarlo
si abrir este cerrojo aliviana el alma,
¡ah, cuán ligera la hace!
y díganme ustedes si no estoy en lo cierto.Cómo no llorar también con la palabra,
con la mirada,
con el pensamiento,
con cada paso;
si vivir es estar expuesto a la desdicha,
al agrietamiento.