Solamente Mio

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-para mi ha sido una estupenda sorpresa su invitación Sr Duque, … pero hay una duda que me rodea y espero no ser grosera al preguntar – kyuhyun sonrió a tal gesto y asintió para que preguntara. – ¿Por qué ahora el interés de su merced hacia mi persona, disculpe pero me refiero por que ahora?

- seria muy irrespetuoso de mi parte si no apreciara su compañía mi lady.

- bueno no lo he visto desde la celebración en la casa del conde Voltrue así que no se cruzo por mi cabeza que haya llamado su atención.

- perdóneme por favor mi lady, he sido muy grosero, le suplico su perdón, usted es muy hermosa, llamaría la atención de cualquier caballero.

-esta disculpado su excelencia, no soy nada rencorosa y su invitación de ir al teatro, acompañado de sus adulaciones  me ha hecho olvidar tal acción vuestra. - dijo victoria mostrando una sonrisa.

Lady victoria se sintió muy satisfecha y emocionada cuando una de sus criadas le habían dicho que vio al duque de Lincolnshire conversando amenamente con su padre, se vistió elegantemente y bajo a la recepción, sabia que estaba fuera de la etiqueta pero si no realizaba un paso para conquistar al duque vestiría santos y de eso ni soñarlo,  se acerco a la sala como si no supiera de la visita, se sorprendió al ver al duque y con gracia y magníficos modales instruidos desde su infancia realizo una cordial conversación con el Duque, lo que permitió que ahora se encontrara a las puertas del gran teatro junto a él.

-espero que la obra sea de su agrado su señoría – espeto ella.

-estoy seguro mi lady que todo será de mi agrado ya que cuento con su compañía. – respondió con una sonrisa

Ella estaba admirada, el Duque era todo un caballero, y además era apuesto, sin también mencionar que era inmensamente rico.

Ambos entraron al teatro.

El duque estaba cansado que solo en su mente rondara el Doncel Sungmin, y debido al accidente en el bar con Siwon, ya no se habia comunicado con ellos y  tampoco le dio ganas de visitar aquel lugar indecoroso dinde laboraba el culpable de sus insomios  y sin darle tantas vueltas decidió visitar a alguna doncella para salir a pasear y fue así que se acordó que en una de las fiestas se habia sorprendido de la belleza de una en especial, la hija del conde Volduart, así que fue para su casa, después de unas cuantas palabras con el conde acerca de política y de la estabilidad económica del país, habían sido interrumpidos por la doncella que no se habia dado cuenta de su presencia, se disculpo e hizo una reverencia, después de que el duque la perdonara, la doncella en cuestión realizo una conversación muy grata con él, así que Kyuhyun decidió invitarla al teatro para así tener la oportunidad de conocerla más.

En el momento que ingresaban, ambos no pudieron evitar mirar a aquel doncel que tenia puesto un vestido rosa que hacia resaltar su hermosa piel blanquecina además de lo hermoso que se veía con el cabello peinado hacia atrás.
Aquello hizo palpitar con mas fuerza el corazon de Kyuhyun, y su cuerpo quería actuar, ir  y sacarlo de ahí,  así reclamar lo que su cuerpo reclamaba como suyo para que aquellos hombres que lo miraban con lujuria desaparecieran. “estaba completamente loco, aquel doncel ni el hola le habia dedicado y él quería reclamarlo suyo”Kyuhyun se sentia extraño y no sabia que tenia aquel doncel que lo llevaba a pensar tales tonterias

-lamento duque que usted tenga que apreciar algo como esto, hay gente que no tiene la mínima decencia para presentarse ante la sociedad – escucho decir a  lady victoria totalmente indignada por la presencia del cortesano en un lugar tan recatado y concurrido como era el teatro.

Aquel comentario lo saco de su ensimismamiento y cogido del brazo de la Srta se adentraron  al salón donde se llevaría a cabo la obra.

En todo la primera escena de la obra, Kyuhyun no pudo apreciarla; ¿como hacerlo?, si en frente de su balcón estaba el doncel que lo ha llevado a un paso de la locura; se quedo apreciándolo y a pesar de que solo habia poca iluminación, sus hermosos rasgos, su sonrisa, esa sonrisa que le daba a la señora que se encontraba a su lado, tenerlo a solo unos pasos quitaba de su mente cualquier razonamiento y quería olvidar lo que la sociedad pudiese hablar.