Normal:
Louise caminaba por los extensos pasillos del castillo, su cabello iba suelto y libre, sin presiones, su corona brillaba con mucho fervor, sus manos cargaban libros que tendría que leer para el día siguiente, sus ojos tenían algunas ojeras visibles, sus pasos se denominaban como débiles, estaba agotada. Llegó a una zona en donde suspiró, no había sirvientes a la vista ni guardias, a su lado una ventana filtraba el brillo del sol, sus ojos se dirigieron al pueblo que se formaba a los pies de las murallas del palacio, sonrió mientras los recuerdos asomaron en su cabeza. Una idea absurda, pero que no pudo dejar de lado, era momento de una escapada, corrió a su cuarto, depósito sus libros en la mesa, abrió las puertas de su armario, busco algo al azar, simple y capaz de pasar algo desapercibido, una capa azul oscuro, se cambió los zapatos, depositó la corona en su velador, salió corriendo.
Burló a los guardias, comenzó a correr entre el verde pasto, se adentro en el mercado, observaba todo a su alrededor, le encantaba el pueblo puesto que todos tenían una vida ligada a otra y se juntaban entre ellos, nadie prestaba atención en ella, era una más. No se había percatado de lo mucho que había extrañado esa sensación, hasta que volvió a sentirla, sentir que era parte de algo, que nadie esperaba mucho de ella, que podía fallar y seguir fallando, nada cambiaría, nada se arruinaría.
De un momento a otro llegó a la caverna de Scarron, guiada por todas sus emociones y sensaciones que la abordaron al ver ese letrero, decidió entrar, estaba lleno como siempre, caminó despacio entre las mesas hasta encontrar una mesa en la cual sentarse. Encontró una vacía y no lo dudo, sin quitarse su capa logró percibir que estaba cerca de la barra, a un lado de la pared, mesa perfecta para pasar desapercibida, solo quería observar, estar en paz, detenerse del ajetreo del palacio, buscar su paz, su vida. Scarron se le acercó para atenderla, Jessica le tomó del brazo, lo detuvo, le entregó una bandeja y le señaló una mesa, que debía entregar ese pedido, no supo si debía preocuparse o no. Unos pasos a su espalda, su cuerpo se agitó, pero no quiso reaccionar, no ser tan evidente, dentro de ella podía saber de quién se trataba, su presencia ejercía esas reacciones en ella.
- Sabía que estarías aquí - dijo una voz detrás de ella.
Louise se volteo y ve a Saito detrás de ella, primera impresión sería un reclamo por haber desaparecido sin avisar, en un lugar tan peligroso, pero solo obtuvo una sonrisa sincera, el camino hasta quedar a su lado, se sentó frente a ella, se apoyó sin delicadeza en la silla.
- ¿Cómo lo - iba a preguntar Louise, no entendía cómo la descubrió.
Se aseguró de no dejar rastro de hacia dónde se dirigía, incluso se sentía orgullosa de su escape perfecto, orgullosa de haber podido burlar a los guardias de esa manera, haber llegado al pueblo sin ser vista ni descubierta, hasta ahora.
- ¡Ah por favor! Como si a Louise le gustara estar "encerrada"- dijo Saito exagerando, sus manos se movieron con rapidez.
- ¿Te estás burlando de mí? - dijo Louise sonriendo pero un aura maligna desprendía de ella, no le estaba agradando la forma en la que se refería de ella y se lo estaba haciendo saber directamente.
- No, para nada - negó Saito nerviosamente - Es solo que te conozco, todas estas reglas no son lo tuyo - dijo y ella asintió, ambos sabían que era cierto, esto estaba resultando más complicado de lo que esperaban.
Solo que ninguno estaba dispuesto a aceptar que, el haberse involucrado en esta misión, en esta aventura estaba dañandolos por dentro. A Saito porque ya no pasaban tiempo juntos como pareja, ya ni se veían, con suerte al dormir al despertar la veía junto a él, para que hablar de la intimidad como esposos, si antes le costaba, ahora era imposible siquiera pensarlo. Para Louise, la estaba desgastando por dentro, tanto protocolo, cada normativa, vestimenta, etiqueta, lenguaje, incluso el cómo caminar ya era una cadena que se sumaban hasta las anteriores mencionadas
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El °5 Mage Y La Elejida...{Finalizada}
FanfictionNuestra vida de casados no fue color de rosa, más bien fue alguna especie de color magenta o azul. Espero que todo esto acabe pronto, porfavor, ayudame Saito.