Juntos y Celosos.

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Amy

Remington estaba más incómodo que yo por el hecho de compartir la habitación, suspiré mientras dejaba mi maleta en la habitación y me acostaba en la cama exhausta por el viaje, no había dormido bien en el avión el ruido de los pasajeros y los poco cómodos asientos del avión.

—¿Estás cansada?—pregunto Remington entrando con su maleta poniéndola a lado de la mía.
-—algo... El haberme dormido en el avión me lastimó un poco—susurre mientras ponía mi antebrazo en mis ojos.
—recuestate boca abajo—dijo Remington amable.
—¿Para que?—pregunte mientras me sentaba.
—te prometo que te sentirás bien—susurro Remington esperando a que me acostara, hice lo que me pidió sin preguntar más aunque estaba insegura sobre qué haría. Sus dedos tocaron mi espalda para darme un masaje bastante gentil, sus dedos recorrían mi espalda creando una sensación increíble.

Estaba comenzando a dormirme hasta que Remington se detuvo y me sacudió un poco, abrí mis ojos de perezosamente mientras me levantaba. Cuando me levante nuestras miradas se cruzaron creando una sensación extraña entre ambos, mi respiración se volvía agitada y mis labios deseaban el contacto con los suyos.

—Amy... Quieren que vayamos a la playa...—susurro Remington mirando mi rostro—ahh yo... Me vestire en el baño-

Se levantó, tomo algo de su maleta y se fue al baño sin decirme nada más. Saque algo de la mía era un traje de baño que Ashley me había escogido ya que yo no sabía qué tipo de llevar, era de color negro, suspiré sacándome las ropas de encima esto me incomodaba ya que nunca mostraba mi cuerpo por temor a que las personas pudieran ver las marcas de abuso que recibía cada noche.

Cuando termine me sorprendí al ver lo sorpresivamente bien que me quedaba, me puse una toalla encima para cubrir el traje de baño, Remington salió en un shorts de color rojos a cuadros y una camisa de Misfits abierta de los costados.

—¿Lista?—pregunto Remington con su toalla colgada en su cuello.
—si...—susurre con la toalla envuelta en mi cuerpo, bajamos de la habitación para encontrarnos a todos con sus trajes de playa. Nos miraron, se acercaron sonriendo ya que estábamos completos caminamos a la playa y decidimos sentarnos en unas de las sillas que estaba en la playa.

—¡QUÍTATE LA TOALLA!—grito Ashley mirandome.—¡ESTO ES UNA PLAYA AMY!—
—Ya voy es que no quería que me vieran con el traje de baño aun—susurre tímida mientras me levantaba de la silla, los chicos habían ido por bebidas para nosotras Asique no tendría que preocuparme por la reacción de Remington ya que no estaba.

Me quite la toalla dejando ver mi delgado cuerpo, el sostén negro se ajustaba solamente de la parte de mi espalda, mientras que llevaba una braga negra algo diminuta del frente, me coloque el pareo de color negro para sentirme más cómoda ya que hasta los demás chicos sentados en las sillas me miraban al igual que a Ashley pero prácticamente ella los ignoraba ya qué solo tenía ojos para Emerson.

—sabia que te iba a quedar fenomenal—respondio Ashley sonriendo.
—¿Es normal que me miren?—pregunte tímida.
—cielo... Acostúmbrate, es muy normal que personas como nosotros nos miren de esa manera tan inapropiada—respondio Ashley con un abanico.
—te vez fantástica—respondio la Señora Elizabeth mientras desvío su mirada y sonrió—¡ANDY!—

Grito para llamar la atención de un chico de cabello azabache oscuro con algunos tatuajes como Remington, se acercó a nosotras con una brillante sonrisa y sus gafas de sol.

—¡Hola! Elizabeth... ¿cuánto tiempo?—respondio abrazando a la señora Elizabeth y le sonrió de vuelta.
—cada vez estás más guapo...—respondio haciendo reír al chico.
—¿Qué tal te sienta el noviazgo Ash?—le pregunto a la pelinegra que sonreía.
—de maravilla no pude haber elegido mejor persona—dijo Ashley sonriendo.
Enfoco su mirada a mi, me sonroje al instante no sabía cómo comportarme ya que todo era nuevo me ponía de nervios que me mirarán tanto, tenía una mirada penetrante aún teniendo gafas, pude ver que se las quita y se acercó a mí para presentarse.

—soy Andy Biersack... ¿Un gusto conocerte?—dijo Andy presentándose y preguntando mi nombre.
—soy Amy Bostwick—susurre tímida, su mirada me hacía sentir cada vez más intimidada ya que no podía mantenerla mirada en su rostro.
—es una chica que adoptamos hace poco a nuestra familia Andy... Ella es una chica timida—respondio la señora Elizabeth por mí ya que era bastante tímida.
—oh... No lo sabía... Bueno Amy un gusto conocerte y si algún día quieres hablar conmigo, no dudes en hacerlo—susurro Andy sonriendo.
—seria genial pero no tengo tu numero—susurre riendo.
—entonces quiero anotar el tuyo para yo comunicarme contigo—respondio Andy mientras sacaba su móvil del bolsillo y anotaba mi número, estaba tan perdida en las bromas de Andy o de lo que hablaba poco después que no me había dado cuenta que los chicos ya estaban aquí.

Andy saludo a los chicos y después se acercó a mi, tomo mis manos para jugar con ellas mientras hablábamos de cosas triviales, sentía a alguien mirarme de forma penetrante no quería voltear pero sabía de quién se trataba.
—Amy... Traje tu bebida—dijo Remington acercándose a mí y abrazando mi cadera enfrente de Andy—hola viejo... ¿Qué haces acá en los Cabos?—
—ya sabes un poco de vacaciones no hace daño a nadie, cierto la grabación para las canciones de American Satán serán la siguiente semana en New York—respondio Andy con amabilidad sin dejar de jugar con mis manos.
—vale gracias por decirme...—respondio Remington mientras miraba con atención los movimientos de Andy.
—bueno tengo que irme... Amy te hablo al rato—dijo Andy despidiéndose de todos.

Podía ver cómo su mano se aferraba con fuerza a mi cadera, me sentí más intimidada y finalmente hablo.

—¿Qué hacías con el?—pregunto con su voz suave.
—nada solo hablábamos...—respondi tajante.
—¿Hablar?... Eso no es hablar es coqueteo—respondio para hacer que lo mirara—no puedes hacer eso solo porque si—
Sentí la mirada penetrante de Remington y lo mire enojada.
—tu eres el que no querías nada conmigo no me vengas con eso—respondi de malhumor.
—porque eres inocente por eso—respondio enojado.
—pues lamento no haber tenido una vida feliz y haber vivido mi infancia—respondi al borde de las lágrimas.
—no era lo que quise decir...—dijo Remington arrepentido.
—mejor no digas nada... Cuando más palabras dices... Más fácil es lastimarme...—susurre alejándome de él lo más que podía ya que el jamás cuidaba lo que decía.

Nunca lo ha hecho...

...

Remington.

Gracias a mis palabras otra vez Amy estaba resentida, de plano en vez de arreglarlo lo hacía peor suspiré y la mire irse con los otros a nadar. Su voz aún resonaba en mi mente bajo sus últimas palabras, cerré los ojos y me quite las gafas junto con mi camisa dejé mi móvil en la bolsa que estaba allí, para caminar hacia ellos ya pensaría en algo para componer las cosas entré ella y yo.

...

Después de ir a la playa fuimos a comer algo todos, por supuesto ella no se dirigió a mí en nada, se la pasaba hablándo con los otros e ignorando mi presencia y era bastante cansado. Salimos un poco del hotel para caminar, mi madre deseaba conocer algunas partes turísticas de los Cabos tomar fotografías de estas y colocarlas en las paredes de aquella casa en la que crecimos.

Pronto Amy se separó un poco de los demás, la tome de la mano para alejarnos un poco y arreglar todo esto.

—deja de ignorarme—dije desesperado.
—¿Porqué debería hacerlo?—pregunto Amy cortante.
—porque no me gusta y sé que fui un imbécil—respondi tomando su mano.
Ella soltó un largo suspiro y me miró.
—proxima vez que me hables así... No te hablo lo que resta del año—respondi Amy seria—¿Bien?—

Asentí, íbamos a caminar con los demás pero ellos ya se habían ido dejándonos solos en el mercado de artesanías, tal vez podría intentar hacerla sentir especial y era mi oportunidad para apartarla de Andy ya que sabía muy bien que a él le gusto con sólo verla, como yo la primera vez que la vi en el hospital.

...

Room Side "B"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora