Capítulo 8

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Larissa en multinedia

Capítulo 8

Allen se sentía muy nervioso, estaba a punto de ingresar al Gran Salón. Sabía que habría un montón de personas que estaría pendiente de cualquier movimiento que hiciera. Trato de relajarse y recordar lo que había conversado con Nastia

— Tú eres el acompañante Scarlett para ese grupo que ella te escoja es un privilegio

— ¿Tan deseada es? — preguntó asombrado

— No tienes idea mi niño. Es conocida como la Emperatriz Escarlata, siempre sensual y poderosa. Los hombres que están ahí intentarán todo para avergonzarte ante sus ojos para que no vuelva a elegirte. Ya ha sucedido antes no dudo que vuelva a ocurrir, pero Scarlett es inteligente sabe cómo manejar la situación

— Se oye peligroso, nana

— Lo es, son muchos los hombres los que la invitan, hay otros que son elegidos para acompañarla. Sin embargo, esta es la primera vez que Scarlett a invitado a alguien. Debes sentirte afortunado mi niño eso quiere decir que le importas mucho — sonrío — Ahora escucha atentamente el consejo que está anciana va a darte — el joven rió — No dejes que el hecho de ser tu acompañante te supere. Recuerda eres un Kozlov, ellos tienen orgullo y poder. Nunca bajes la mirada recuerda la arrogancia es tu poder. Y el último consejo, siempre recuerda responder con inteligencia, si alguien se atreve a insultarte eso es la única manera de cambiar la jugada. Y cuida bien tu territorio habrá muchos que desean quitarte lo que tú crees que es tuyo de cualquier forma, ellos no juegan limpio. Una vez que estés al lado de la emperatriz tú te convertirás en el emperador tienes que estar a la talla.

— Lo entiendo nana no perderé

— Bien dicho mi niño, sigamos

Esa conversación había quedado grabada en la cabeza de joven. Ahora era el momento de poner en práctica sus enseñanzas. Levantó el mentón y cambió su cara a una de completa arrogancia y seguridad. Adelante vio la puerta, una idea surco por su mente con cuidado deslizó su brazo hasta entrelazar su mano con la de la castaña. Ella le dio un suave apreton y le dedico una pequeña sonrisa.

Entraron al salón, el lugar era muy impresionante. Del techo colgaban arañas de oro con algunos diamantes. Las paredes eran de un color humo combinado con unas columnas de estilo coloquial de aquellas paredes colgaban cuadros grandes y lujosos representando la cultura antigua. Una larga mesa llena de bocadillos y algunos vinos muy caros. Los mayordomos iban de un lado a otro sirviendo las bebidas a los invitados ansiosos de seguir probando este manjar. Las personas vestían sus trajes más elegantes, todos presumían lo mejor de lo mejor. Recordó que algunos de esos hombres y mujeres eran de la mafia y otros pertenecían al mundo de los negocios. Al caminar por el salón se percató tanto como en la entrada y el pasillo que la gente no les quitaba la mirada de encima. Pero en especial los hombres, su atención en el seductor vestido de Scarlett qué dejaba mucho a la imaginación. Tenía que dirigir las frías miradas para recorrer su cuerpo más tiempo de lo necesario. Conocía esas miradas, ellos deseaban a la hermosa mujer en sus camas y si no fuera porque no podían leer sus pensamientos muchos de ellos le estaban haciendo el amor en su mente. Controlo su enojo lo más que pudo, el momento de demostrar que era suya aún no había llegado.

— Cariño — llamó Scarlett

— Dime preciosa — respondió girando su cabeza en dirección a ella

— Acabo de ver a Raiza y Connor al fondo del salón están con unos chicos de la mafia italiana. Ya sabes cómo manejarlo

— Aprendí de la mejor — sonrío de lado

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