Seis meses antés...
Centro de rehabilitación para personas con problemas de adicción.
-¡Hola! Mi nombre es Emma, tengo 25 años y soy adicta... al sexo -digo un poco apenada.
-Hola, Emma -todos responden con apatía.
-Muy bien, Emma, cuentanos tu historia -dice la Dra. Parker.
-Esta bien -comienzo a contar con timidez-: Desde los 15 años he tenido curiosidad por las nuevas experiencias...
Ni siquiera se porque estoy aquí, no soy ninguna "ninfómana", sólo he tenido sexo un par de veces... bueno, más de un par. Y si, tal vez con más de un hombre. Y si, tal vez no solo con hombres pero no es una adicción, ¡por Dios!... Sólo soy una mujer sexual, tengo todo absolutamente controlado. Me fije 3 reglas que jamás debo romper:
1.- Nunca dormir más de una vez con la misma persona.
Y la más importante:
2.- Jamás meterse con personas del trabajo.
3.- Queda total y absolutamente prohibido enamorarme.
Es la regla más importante. Me niego rotundamente a enamorarme. No quiero terminar mal y con el corazón roto.
Mi madre siempre estuvo en desacuerdo conmigo y se puso furiosa cuando me conté lo de mis reglas. Cree que estoy loca. Ella piensa muy diferente a mi y nuestro carácter siempre choca, es por eso que no somos muy apegadas.
Mi madre, la Sra. Jude Miller. Es religiosa y cree que todo lo que hago es inmoral y que si no me arrepiento de las cosas que he hecho iré al infierno, así que, decidío internarme en una clínica y yo para tenerla contenta, acepté... y aquí estoy, contando mis historias sexuales a un grupo de personas que ni siquiera conozco... que divertido.
Ahora...
Soy Emma Miller, nací en Denver, Colorado. Tuve una infancia muy feliz al lado de mis padres, en especial al lado de mi padre. De él aprendí muchas cosas. Se que él siempre quizo un varón, al no tenerlo, me educó como tal, lo cuál a mí me encantaba. Me volvió más fuerte y podría decir que poco afectuosa, pero eso no es tan malo; también me inculcó un grande amor por la música. Siempre se lo agradeceré. Cuando cumplí los 12 años, mi padre murió. Sólo un día llegue de la escuela y él ya no estaba, yo quería irme con él, sentí que mi mundo se desmoronaba pero, por más que me doliera, tuve que continuar mi vida sin él. Un día mi madre decidió hacer una nueva vida para nosotras dos. Ella queria olvidar los recuerdos de mi padre, entonces nos mudamos a Long Island y ahora vivo aquí con ella y su nuevo esposo, Frank. Me cae bien, pero jamás podrá reemplazar a papá.
Hace 3 años que termine mi carrera, he tenido algunos empleos como recepcionista y algunas veces de secretaria, pero ahora que salí de esa clínica es momento de irme de mi casa. Necesito hacer mi propia vida, no viviré en casa de mi madre por siempre. Voy a mudarme a Manhattan en unas semanas, ya se lo dije a mi madre y, aunque se negó al principio, por fin se hizo a la idea de que tengo que hacer mi propia vida. Su única condición fue que asistiera a la iglesia y reflexionara sobre mis pecados... claro.
Ya fui a hacer una entrevista para el puesto de secretaria de CEO en la empresa Carter Corp. Me dijeron que me informarian más tarde y, bueno, por el momento solo me queda esperar la llamada. Ha sido una entrevista muy larga hasta me aplicaron un examen. Si me dan este puesto, voy a tener que festejarlo.
... PROXIMAMENTE ...