Los Tres Amores De Celeste ©

Capítulo 1

—¡Date prisa o llegáremos tarde! —Gritó Eva, afuera de mi habitación.

—Ya terminé, histérica —Dije saliendo de mi cuarto.

—¡Oye!, no soy histérica —Dijo sonriendo.

—No importa, hay que irnos, ¡es tarde! —Dije.

Ya había pasado meses desde que entramos a la preparatoria Eva y yo, y ahora ya no perdonan los profesores que lleguemos tarde como antes, así que, ¡a correr!.

🐼

—Profesor, ¿podemos pasar? —Preguntó Eva.

—No pueden Eva y Celeste, tendrán que esperar afuera, la clase esta por terminar —Dijo el profesor Sebastian, qué mal.

—De acuerdo profesor —Dijo Eva.

Mientras esperábamos a los demás para poder ir a la siguiente clase Eva y yo nos sentamos.

—Oye Celeste, no podré ir contigo a la cafetería como acordamos —Dijo Eva.

Yo me sorprendí.

—¿Por qué Eva? —Pregunté.

—Iré con Harold al aeropuerto por sus primos, Alan y Karen —Dijo sonriendo.

—Oh... No los conozco —Dije.

En realidad, no conozco a mucha de la familia de Harold, sólo a sus padres pero hace tiempo no los he visto.

—No te preocupes, yo tampoco los conozco, pero iré a acompañarlo —Dijo sonriendo.

Suspiré, Eva y Harold ya no me incluían, me excluían, lo cual antes hubiera estado muy feliz pero ahora... No.

—Claro, no te preocupes, y saluda a sus primos de mi parte —Dije y lancé una sonrisa.

—Claro —Dijo y también sonrió.

(...)

—¡Hey Celeste! —Llamó alguien, volteé y era Harold.

Hace tiempo que Harold ya no me gustaba.

—Hola Harold —Saludé acercándome a él.

—¡Hola Celeste!, oye, sé que te impresionara esto pero, ¿podrías acompañarnos a Eva y a mí al aeropuerto para ir por mis primos? —Dijo dando una gran sonrisa.

Mi cara no necesitaba nada más para que demostrara mi sorpresa, con tan sólo verla te dabas cuenta, pero, ¿por qué me invitaría a mí también?.

—Yo... Ah, no sé, digo... Creí que eso era... Un asunto familiar.

—Bueno, pues sí lo fuera, aún así serías invitada, tú eres como de la familia —Dijo metiendo sus manos a los bolsillos de sus Jeans.

Empezamos a caminar hacia la salida de la preparatoria.

—Vaya... Esa respuesta no me la esperaba, pero claro que iré, me encantaría conocer a tus primos.