ENCANTADOR ❥ naruino

DOS

『 2. MISIÓN JUNTOS. 』

Ino caminaba junto a Naruto fastidiada, ¿por qué diablos iba a hacer una misión con el chico que tanto había evitado? Parecía que el destino quería que viera algo que ella negaba.

Por que ella era consciente de lo que tanto negaba, es que no quería sentir aquello.

—¿Sería que enserio te pareces mucho a la doncella'ttebayo?- Pregunto Naruto curioso.

—No lo se, Naruto.- Habló entre dientes, con tono fastidiado.

Naruto, algo sentido, la miró con el ceño fruncido. Ino lo noto y suspiro, sintiéndose algo culpable.

—Lo siento, estoy muy cansada últimamente.- Murmuró mirando hacia otro lado, para que no viera sus mejillas sonrojadas.

Naruto le sonrió, con aquella sonrisa que solo el podía dar.

—Cuando regresemos a la aldea, te llevaré a comer el mejor ramen. ¡Te encantará y te hará sentir mejor'ttebayo!-

La de ojos aquas se sonrojó levemente y rio.

-¿Me pagarás un tazón de ramen?- Le dio una sonrisa ladina, que pronto se agrandó y se volvió divertida al ver como el rubio trataba de explicarle que no tenía dinero más que para el.

—Lo siento, Ino-chan.- Suspiro Naruto, triste pensando que Ino no probaría el delicioso ramen de Ichiraku y que el quizás no cenaría solo.

—Está bien, iré contigo aún así.- Solto como si no fuera nada, pero por dentro sentía como corría y gritaba por qué estaría con el rubio sin estar en una misión.

Naruto sonrió y sus ojos brillaron, aquel brillo era diferente al que normalmente tiene y ella no entendió por qué.

—¡No te arrepentirás!-

❣︎

Ino miraba desilusionada y triste el plato de ramen, la misión había sido un éxito, pero para su autoestima y orgullo era un total fracaso.

Naruto miró a su acompañante, con las mejillas rellenas de ramen. Trago todo con algo de dificultad y la miró.

—Deberías comer.-

Ino suspiro triste.

—Si como, engordare y me volveré más fea.-

El rubio se sorprendió con tal disparate, a el le gustaba mucho Sakura, pero cualquiera se daría cuenta que Ino era muy bella y que cuando creciera se volvería mucho más atractiva.

—A mi me gusta como eres.- Naruto asintió, afirmándose a sí mismo lo que acababa de decir.— Y no creo que comer un tazón de ramen te haga daño.

Ino lo miró sonrojada y sorprendida. El acababa de decirle que le gustaba y ni siquiera se daba cuenta de lo que aquello causaba en su interior. Sonrió algo triste, aquellas palabras no significaban lo que ella quería que significaran.

—Cierto, Naruto-kun.- Ino le sonrió y antes de empezar a comer lo volvió a mirar.— Gracias.

Naruto sonrió con las mejillas llenas y levantó su pulgar. Tan adorable y encantador que Ino no pudo evitar suspirar.

❣︎

—¿Qué son estas horas de llegar?- Inoichi le reclamo a su hija molesto, pues se había enterado por la Hokage que había llegado más temprano.

La rubia miró a su padre contenta, con una gran sonrisa en la cara y las mejillas algo rosas.

—Estaba comiendo ramen con Naruto.- Se acercó a su padre y lo abrazó.— Mañana hablamos, iré a dormir. ¡Te quiero!- Ino corrió rápidamente a la habitación, aun con aquella emoción.

Inoichi, confundido, sonrió. Sabía que la pasó mal con el constante rechazo del Uchiha y más con su ida, pero nunca se había puesto igual de feliz por aquel pelinegro como con el rubio. Suspiro, sabía que Naruto no era un mal niño, pero nadie parecía querer aceptar que el y el zorro de nueve colas eran distintos.

Esta vez sonrió con más confianza, feliz de que su hija avanzara y se encontrara así de feliz.