SWEET OBSESSION

PRIMER MES - NEGACIÓN

Habían pasado tres semanas desde que Steve marco como pareja a Danny, y el rubio estaba raro. No es que Danno fuese un omega muy normal, pero en los últimos días, no era el mismo.

Steve estaba más irritado que otras veces.

El equipo cinco – cero estaba en el restaurante de Kamekona.

Los abuelos y madre de Steve habían llegado minutos atrás, todos miraban sus relojes, eran las tres, habían quedado hace dos horas para ir a comer, y ni Steve, ni Danny habían llegado.

Se estaban preocupando...

La habitación de Daniel, estaba destrozada, Steve tenía un arañazo en la cara, el rubio omega se abalanzo sobre él y empezó a golpearlo.

- Te odio – grito el omega – es tu culpa y de tu maldito tino – sin más se puso a llorar, Steve lo abrazo a su pecho.

- La abuela estará feliz – dijo el moreno sonriendo con dolor – llegaremos tarde pero valdrá la pena.

Danny despertó una mañana como cualquier otra, bueno, despertó como el omega de Steve, se removió en la cama y sintió un frio vacío al darse cuenta que su alfa no estaba en la cama, al tratarse de incorporar sintió un leve mareo.

Fue al baño, y bajo las escaleras con solo su ropa interior y se detuvo frente al espejo de cuerpo entero que estaba pasando el gimnasio privado del moreno, se pellizco la barriga al verla algo inflamada.

- Hare dieta, últimamente he comido demasiado - el omega se inspecciono en el cristal y siguió su camino a la cocina

Steve estaba haciendo tortitas, estaba sonriendo como un retrasado, Danno estaba en estado, rio más al darse cuenta que su pareja no sabía que estaba en gravites, el dulce aroma cítricos lleno el ambiente y el lobo en McGarrett pico por salir.

Danno amaba las tortitas hechas por el moreno eran suaves y esponjosas y el olor a mermelada de piña, le hizo agua la boca.

Se sentó en la isla de la cocina y empezó su día con té de jengibre, la abuela había insistido que era bueno para su estado, no entendía porque la abuela era más insistente en que tomara sus remedios caseros.

Incluso Kono y Adam le habían llevado unos frutos secos como snacks, para que dejara las grasosas frituras que siempre comia.

Chin le obsequio una caja de mermelada de piña, Kamekona era demasiado complaciente con él últimamente, Marie y Doris, hacían listas extrañas de nombres, hasta el abuelo McGarrett se ponía a disposición de los caprichos del rubio.

Una vez lo llevo a comer pizza a escondidas de Steve, una pizza de queso y piña, solo queso y piña.

Cuando llego a la central, todos se ofrecían hacer el trabajo por él, de cierta forma lo agradecía en las últimas instancias se sentía más cansado de lo normal.

Una tarde mientras se duchaba sintió un calambre y sin decirle nada al alfa fue solo a una revisión.

- Esta embarazado – el doctor lo felicito

En todo el camino había estado como poseído, de la ira al llanto, del llanto a tener ganas de matar a alguien y quien mejor que al idiota que lo metió en esa situación.

- ¡Steve McGarrett! – el alfa bajo las escaleras al instante

- Te encuentras bien Danno – el alfa había recibido la llamada del doctor y le había explicado sobre el calambre abdominal del rubio, Danny tomo las tijeras de jardín de la abuela y con su dedo índice le hizo señas al moreno para que se acercara, Steve sintió el leve olor de la traición y dolor – Daniel...yo...

- Tu pequeño amigo y yo tenemos que hablar - Danny hizo el intento de rozar la tijera con el paquete de su alfa, pero luego de sentir un calor en su interior se palmo su vientre – estoy embarazado

- Lo sé

- Es tu culpa

- Lo sé

- Me vengare de esto

- Lo sé

- Tengo un mes y no lo sabía, que clase de omega no se da cuenta que lleva un mes embarazado

- Uno muy terco

- Todos lo saben verdad

- Si

Cuando la puerta del restaurant de Kamekona se abrió todos se quedaron en silencio.

- No digan nada, actúen normal – la abuela gruño ante las órdenes del patriarca de los McGarrett

- Bien – dijo poco convencida

Todos se quedaron viendo la cara maltratada del alfa pero no dijeron nada, Danny los saludo como si nada y empezó a pedir comida como si fuera un famélico.

- Animal, pásame el jarabe de piña – dijo Danny atragantado

- Pero tu odias la piña – hablo Kono nerviosa

- Steve no veo ese jarabe en mi comida – Danny ignoro a la beta, Steve le paso el endulzante tropical y se rio con ganas

- ¿Qué? ¿Tengo monos en la cara? – Danny miraba a su alfa con un poco de resentimiento

Lizzie ya no pudo más y se soltó del férreo agarre de su marido.

- Danny Williams, estas preñado – gritó la dulce anciana

- Claro que no – Danny estaba cansado de que le presionaran

- Por supuesto que si – la abuela McGarrett se sentó a su lado – cariño reconócelo, ha pasado un mes

- No.Estoy.Embarazado, son alucinaciones de todos ustedes – gruño el omega

- Danny – hablo pacientemente la mujer mayor - ¿Desde cuándo te gusta la piña?

- No me gusta la piña – el rubio se metió un camarón bañado en mermelada de dicha fruta

- Que estas bebiendo – la abuela no se rendiría

- ¿Qué estoy bebiendo Steve?

- Piña – dijo el alfa

- Lo ves, estoy tomando bebida de manzana – Danny siguió con el siguiente plato

- Entonces, ¿Qué estas comiendo? – Lizzie no se iría hasta que Danny reconociera lo obvio

- Camarones – el rubio comenzó a comer piña en rodajas

(...)

- Danny, lo hemos hecho todo al revés, pero ¿Te quieres casar conmigo?

- Steve – Danny empezó a llorar – yo... yo... - Danny se acuclillo – me hiciste perder cincuenta dólares, ningún hijo mío nacerá fuera del matrimonio, sí, sí quiero – el omega beso al alfa

- Te amo Danny – Steve lo acerco todavía más a él

- Solo hay un pequeño detalle – Danny jugó con el cabello del alfa, mientras repartía pequeños besos en su rostro – no le hemos dicho a mis padres – Steve se rio

- Les enviaremos la invitación – el alfa ronroneo

- De hecho, mis padres vendrán la semana que viene – soltó el omega para luego dirigirse al restaurante

- ¿Qué significa eso? – Steve se puso ansioso