•Save Me•

Capitulo 6

Un paso, después otro. Ella se notaba altanera y Remington sabía bien que estaba usando de nuevo ese escudó. Ella estaba molesta y por ello deseaba intimidar a todos los presentes.

Tomó asiento al lado del chico de cabellos rebeldes y posó sus manos empuñadas en su regazo.

—He comprado algo de pizza hoy. Tu madre me dijo que ahora estas comiendo mucho menos ¿no piensa volver a cocinar alguna vez?

—Es muy amable de su parte, Roberts.— Menciono la chica mientras que alargaba su mano a tomar una rebanada de pizza y luego de la llevaba a la boca. Se cruzó de piernas y su postura se relajó.

—Alex, comprenderás que hoy es un día especial ¿lo sabes no? Hoy estaremos juntos por dos horas. ¿Sabes quien es el chico que está a tu lado?

Alex miro de soslayo a Remington, le envió una mirada filosa, pero no dijo nada, sólo mordió la pizza y mastico. Alzó su mano para dar a entender que le diera un momento para responder mientras desocupaba su boca.

Trago.

—¿El esta al tanto de mi expediente?.— Pregunto con naturalidad.

Remington miro al doctor y negó, le suplico con la mirada que mintiera, sin embargo, no lo hizo.

—Si. Esta completamente al tanto.

"Tenía que suponerse" pensó ella y mordió nuevamente la rebanada. "Los humanos desinteresados no existen"

—Ya veo...— Musito echando su cabeza hacia atrás. Su nuca toco el respaldo del sofá.— ¿Cuanto te ha pagado la desesperada de mi madre por esto Leith?

—Ni un centavo.— Dijo el chico. Alex lo miro incrédula. Dejo el resto de pizza sobre la mesa

Lo que ninguno de los dos hombres se espero es que ella gateará por el asiento hasta el rompiendo casi toda la distancia. Remington trago. De estar en otras circunstancias consideraría eso como sexy y no como aterrador.

—Te tuvieron que dar algo ¿no?.— Pregunto tranquila y rozó su nariz contra la de Remington. El chico pensó que se le pararía el corazón y no era el único.

Alex se quería tirar de un décimo piso por su propia estupidez.

—Alex por favor... Comportate.— Pidió el doctor Roberts. Alex suspiro y volvió a sentarse como si nada hubiera pasado.— Remington es mi pupilo. El estudia psiquiatría.

—Umm... ¿Ósea que lo soborno con notas o quien sabe que otra cosa para que fuera y se acercara a mi?— Comenzó a jugar con un mechón de su cabello.— Tiene sentido... Por algo olí su nauseabundo perfume un par de veces sobre el..

—¿Ósea que ya lo presentías?.— Pregunto Remington.

—¿Por quien me tomas, Leith?.— La chica sonrió.— Además tu instagram esta abierto al público... Tienes fotos interesantes.

"Mierda" pensó el chico y asimismo palideció.

—Doctor Roberts.. ¿Puede dejarnos un momento a solas?.— Pidió Remington.

—Claro. Les daré treinta minutos.— Puso el cronómetro y salió.

La tensión aumentó en el ambiente y el mutismo de ambos hizo de la situación peor de lo que ya estaba.

—Alex... Yo en serio no quise engañarte. Te considero mi amiga ¿lo sabes verdad? No quiero que nuestra amistad se acabe sólo por esto.

La chica tomó un trozo de pizza y lo mordió. Se recostó en el sofá, dejando su cabeza en una de las piernas de Remington. Luego lo miro taciturna.