Uncover 天使 ᴊɪᴋᴏᴏᴋ

O12 | Chico Malo

Pov Jungkook

Comencé a restregar mis ojos con mis manos, sintiendo un poco de la calidez de los rayos del sol que se colaban por la ventana. Mi cabeza dolía levemente, probablemente de tanto llorar en la noche. Miré hacia todos lados, buscando a alguien que sabía que no iba a encontrar. No recordaba haberme despedido de él ayer en la noche, pero esperaba que se acordara de mí luego.

Tomé una rápida ducha y me cepillé los dientes sin tan siquiera verme en el espejo porque probablemente me llevaría el mismo susto que siempre al ver mi demacrado rostro que está así gracias a mi depresiva vida.

Estuve pensando en lo de anoche. Me preguntaba si Anne estaría abajo, aunque rogaba que no. Mi mejilla derecha estaba más rosada de lo normal gracias a la gran cachetada que recibí de parte de Anne. Ahora tenía menos ganas de bajar.

Un pequeño sonido hizo que me despertara de mis pensamientos y corrí a mi celular.

Era un mensaje de Jimin.

Jimin: ¿todo bien?

Yo: no. ¡no quiero bajar!

Jimin: pues no tienes otra opción. Además tienes que asistir al instituto.

Me mordí el labio gracias a una idea que recién se me había ocurrido y, que sin duda, mis dedos comenzaron a teclear.

Yo: ¿y qué tal si me vienes a buscar a través de la ventana?

Jimin: eso sólo lo hacen los chicos malos y tú eres un chico bueno.

Lancé una pequeña carcajada y negué con la cabeza.

Yo: ¡por favor!

-Así que el chico bueno quiere aprender a ser un chico malo -una voz por detrás me asustó.

-¡Jimin! -exclamé, tirándole una almohada, la cual él esquivó con agilidad.

-Buenos días -me guiñó el ojo y yo rodé los ojos-. ¿Listo para salir por la ventana?

Reí y tomé mi maleta para luego ir con él.

-Jamás he hecho esto -admití-. ¿Qué ocurre si me caigo?

-No te preocupes, todo chico malo alguna vez fue un chico bueno -dijo Jimin y me pareció muy interesante.

-¿Y tú fuiste un chico bueno antes de ser... lo que eres ahora? -pregunté apoyando mi pie en la ventana.

-No. Yo siempre he sido un chico malo. Muy malo -susurró y se tiró.

-¿Entonces por qué dijiste lo anterior? -dije ya sentado en la ventana, listo para tirarme, pero antes tiré mi maleta-. Dios, esto está algo alto. ¿Cómo rayos haces tú para subir?

De pronto me resbalé y caí.

-¡Jimin! -grité.

-Te tengo -pero caí en los brazos de Jimin.

Me mantuve viéndolo por unos segundos y luego me soltó algo brusco.

-Gracias -murmuré y agarré mi maleta.

Seguí a Jimin, quien entró a su auto y yo iba a hacer lo mismo, hasta que escuché a alguien.

-¡Jungkook, a dónde vas! -exclamó mi madre, saliendo de la casa.

-Al instituto, ¿a dónde más? -le respondí groseramente sin obedecerla.

-¡Entra a la casa ya! -gritó y el vecino que estaba saliendo de su casa nos miró extraño.