O13 | Olvidar

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Pov Jimin

Lo que había sucedido ayer no era normal. Definitivamente no lo era.

Jungkook me pidió que lo llevara a su casa y en el transcurso estaba callado. Es como si estuviese enojado, pero no sé por qué. Tampoco me importó.

Cuando llegó, era de noche y sólo me dijo que gracias por haberlo sacado de la cárcel, es decir, su instituto. Podía notar la amargura en su tono, pues ahora le tocaría enfrentar a su madre por haberse escapado del colegio así. No me sentía culpable de nada, pues el que quería salir era él. Yo sólo lo ayudé.

No me envió ningún mensaje de texto en toda la noche, y sí, yo estaba como idiota pegado al móvil esperando a que me dijera que estaba bien. Probablemente Taehyung se extrañaría de mi ausencia, pero eso era lo que menos me importaba en este instante. Ahora sólo estaba viendo el amanecer desde la azotea, con el celular en mi mano, por supuesto.

Jungkook ha tenido días difíciles, y a mí no me importa, pero por alguna razón sólo tengo curiosidad de saber que su madre no lo mató ayer en la noche.

Me levanté del suelo y abrí mis grandes y negras alas. Estaba dispuesto a ir a su casa y entrar por su ventana... si es que él no se enojaba más conmigo.

Justamente cuando me iba a ir, una llamada se mostró en la pantalla del móvil.

Y era Jungkook.

-¿Sí? -contesté un poco más aliviado.

-Ji-Jimin... -su voz se escuchaba nerviosa.

-¿Estás bien? -pequé el aparato más a mi oído.

-N-no sé... necesito que vengas -dijo rápidamente-. Por favor.

La llamada se terminó y emprendí el vuelo de inmediato.








• •






Tan pronto llegué a la casa de Jungkook, entré a través de su ventana, pero ahí no estaba.

-Jungkook... -llamé, pero no respondía.

Caminé por toda la habitación, hasta que decidí bajar las escaleras. Sólo esperaba que su madre no estuviera aquí. Lo último que quería hoy era que viera que su extraño y anormal hijo hablaba "solo".

Cuando ya me encontraba en la sala, vi a Jungkook ahí, en un rincón de la habitación, con sus piernas recogidas.

-¡Jungkook! -corrí hacia él.

Él ni siquiera se inmutó en voltear, simplemente escondía su rostro entre sus piernas y... ¿sollozaba? ¿Qué le había sucedido?

Me acerqué y le coloqué una mano en su hombro. Odiaba tocarlo, pero necesitaba que me hiciera caso.

Por fin volteó, pero no me quiso mirar. Su rostro estaba rojo e hinchado.

-Qué bien que llegaste... yo... yo no sé qué hacer -muchas lágrimas descendían de sus ojos.

-¿Qué ha sucedido? -me agaché para conversar mejor.

-No te lo imaginarás, Jimin... -una mano secó una de las mil lágrimas-. Es sobre mi mamá...

-¿Te golpeó? ¿Te ha hecho daño? -traté de escanear en su rostro algún rasguño, o en sus brazos, pero nada.

-No -hizo una pausa y no entendí-. Algo peor... o eso creo.

-¿Qué? -no me imaginaba algo peor.

Jungkook me deslizó algo por el suelo... era una página. Yo, dudoso, la tomé y la abrí.

Uncover 天使 ᴊɪᴋᴏᴏᴋDonde viven las historias. Descúbrelo ahora