❀Ink❀ [BillDip/Higuel]

6. Embajador. [BillDip]

No saben lo difícil que es tratar de hacer un one-shot con esta palabra.

Es agobiante y me dejó horas con la mente en blanco, en plan: "¿Y ahora?"

Si lo logré o no es cosa del destino.

Iniciemos.

•♥•

Mason Pines era el monarca más joven de la historia.

Uno de los más hermosos de su linaje.

Siempre obtuvo lo que quiso, respeto fervientemente a cada uno de sus sirvientes y habitantes, escuchó a quienes pedían por su misericordia, y reconoció a los mejores capacitados.

Y como cada rey, él necesitaba una reina.

Aunque lamentablemente él no requería de una.

Al castaño no le atraían las doncellas, él prefería estar con hombres.

Era un secreto, en su mayoría, las preferencias sexuales del joven al trono. Sus sirvientes y mercenarios más fieles sabían de esto, y constantemente, por amor al propio castaño más que cualquier cosa, intentaban encontrarle un buen prospecto. Todo lo que él rey deseara en un hombre ellos trataban de conseguírselo, muy a pesar de que la mayoría solo deseaba el dinero y no amaban realmente al castaño.

Esto último causo la ira y depresión que abarco al oji-castaño por mucho tiempo. Viéndose obligado a olvidar sus caprichos para poder casarse con una joven y darle a su pueblo un próximo heredo, terminando así por casarse con una aldeana de su pueblo, quien pedía asistencia ante los problemas que andaba sufriendo su familia por la pérdida de sus granjas.

Aunque la aldeana era noble y de corazón alegre, su familia estaba más que contenta con aprovecharse de la situación.

Algo que el propio monarca tuvo que soportar hasta lograr su cometido.

Y mientras eso estaba en proceso, las sirvientas habian logrado encontrar al pretendiente perfecto para su rey.

Un rubio de piel morena, quien había entrenado para ser parte de la guardia real.

Era simplemente perfecto, y su monarca lo dejo claro cuando lo conoció.

Le trataba como la más delicada de las princesas, le daba la mayor de las atenciones, al castaño no le faltaba nada, se sentía completo, querido y amado.

El rubio correspondía los sentimientos de su rey. Ambos eran felices.

Aún estaba el problema de la familia de su prometida, quien estaba a la espera de su primer hijo.

Nada que sus fieles mercenarios no pudieran solucionar.

Porque detrás de esas largas pestañas, su monarca era un embajador tirano.

Y nadie podía decirle que no.

Nadie.

•♥•

Siento que quedó algo flojo.

No me convence mucho, pero digamos que ya lo he reescrito como cuatro veces y no quiero seguir con esta tortura.

Este drabble esta mayormente inspirado en la canción "El Anillo" de "Jennifer López", enserio que amo esa canción.

Ya sin más me despido~

Bye~♥