Paradise ♡ | •BTS• | +18

Capítulo 24

-- No voy a permitir que alguien más te toque, así que deja de decir estupideces y ven aquí.

Me tomó de la cintura y me encaminó a uno de los cubículos de aquel baño, encerrándonos y reduciendo de sobremanera el espacio alrededor de nosotros. El ambiente no era tan malo después de todo, era un baño pero era uno decente, la iluminación era pésima pero podía mirar su rostro con claridad.

Cada vez que caminaba o me movía bruscamente mi cabeza daba vueltas debido a todo el alcohol que había bebido, sentir que las cosas a mi alrededor daban vueltas me hacía reír, haciendo que JungKook riera también.

-- ¿Estás segura que podrás hacerlo en ese estado?-- se alejó un poco de mí.
-- Cállate, Jeon JungKook.--
-- Es en serio, podrías lastimarte.-- Kookie estaba preocupado por mi estado alcohólico de ese momento pero yo estaba decidida a follar.
--¡Ya!-- el sonido de mi grito resonó dentro de aquel cubículo.

Rió al ver que mi respuesta fue demasiado infantil. Nos besamos. Yo lo hacía con desesperación y está vez era él el que intentaba seguirme el paso.

Toqué su miembro por encima de su pantalón y este aún no estaba erecto. Comencé a masajearlo, podía sentir como poco a poco su miembro empezaba a ponerse duro.

-- Kookie-oppa.-- llamé su atención.-- Por favor... Te necesito.

Obedeció al instante. Quería quitar mis bragas, pero el espacio en el que estábamos era tan pequeño que él solo no podría hacerlo, entonces lo ayudé. Tomó mis bragas y las guardó en uno de sus bolsillos.

Abrió el cierre de su pantalón y se bajó un poco el bóxer, debido a que el lugar era muy público no tendríamos la dicha de vernos desnudos, sacó su miembro completamente erecto.

-- Pequeña, no traigo condón.-- dijo preocupado.
-- Yo si.-- metí mi mano dentro de mi sostén y saqué el pequeño empaque.

No lo traía conmigo desde el principio, lo encontré en la mesa en la que estábamos y supuse que sería peligroso dejarlo ahí con mis sexis chicos alcoholizados andando por allí.

Se puso el condón y colocó la punta de su miembro en mi entrada, comenzó a entrar en mí.

Me sostuve de la pared buscando un poco de estabilidad, pero fue inútil, la pared era de azulejos y mis sudadas manos resbalaban de ella.

-- Ah.-- un jadeo salió de su boca.-- Eres tan cálida.

Comenzó a moverse lentamente, sus estocadas eran pausadas y profundas. Sonreía mostrando su hermosa dentadura de conejito.

-- K-Kookie.-- gemí su nombre (?).

Podía escuchar sus jadeos a lado de mi oído, con cada embestida su frecuencia respiratoria aumentaba haciendo que sus jadeos salieran con más fuerza.

Su miembro era largo y grueso pero no estaba haciéndome ningún daño. Era tierno, como si temiera que fuera a romperme.

-- O-oppa.-- gemí con fuerza.
-- Amó cuando me llamas de ese modo.-- dijo recargándose en mi espalda.

Aumento el ritmo de sus estocadas, eran más rápidas y un poco más profundas. Empezaba a golpear mi punto sensible.

-- Mmh, Kookie.--

Cada vez que lo nombraba sujetaba mis caderas con fuerza y movía sus caderas con más fuerza y rapidez.

Mis paredes comenzaron a tensarse y a apretar el miembro de JungKook. Al sentirse tan apretado bajó el ritmo de sus embestidas un momento para luego volver a moverse, esta vez con más rudeza.

-- L-lo siento.-- dijo mientras me penetraba.-- No quiero hacerte daño pero ya no lo soporto.

Sus movimientos eran rápidos y un poco rudos pero estaba disfrutándolo más que en otras ocasiones.

-- Jung...Kook.-- me quejé en voz alta, no estaba lastimándome estaba disfrutándolo.
-- Espera... Ya casi.-- gruñó.

Perdí estabilidad y me fui un poco hacia adelante, JungKook fue veloz y me tomó de la cintura sosteniéndome contra su pecho. Esta vez su boca se encontraba a un lado de mi oído derecho y podía escuchar con mayor claridad los gemidos que salían de su boca.

Mi intimidad se tensó de repente, mi orgasmo había llegado. Gemí en voz alta y segundos después él terminó también. Mi entrepierna se empapó con mis fluidos, dejándome húmeda y pegajosa.

Mi frente estaba sudada y mi cabello estaba extrañamente desordenado, su frente y su cuello estaban demasiado sudados y sus mejillas coloradas en demasía. Era hermoso.

-- ___.-- salió de su boca con un tono tierno.-- Me gustas.
-- Ah, Kookie.-- besé sus labios.-- También me gustas... Los amo a todos.

Su expresión cambio a una divertida, negó con la cabeza y besó mi frente.

-- No así, tontita.-- acarició con cuidado mi mejilla.-- Sólo ólvidalo, estás muy ebria.

Salió con cuidado de mi interior y acomodó delicadamente mi vestido, se acomodó el bóxer y cerró su cierre. Bajó la tapa del retrete y me sentó con cuidado sobre ésta.

-- Espera aquí.-- dijo y salió del cubículo.-- No te muevas.

Regresó en seguida con una pequeña toalla húmeda y otras de papel secas.

-- Déjame limpiarte.-- cerró nuevamente la puerta del cubículo.

Se inclinó a mi altura e intentó abrir mis piernas para poder limpiarme... Estaba ebria y era terca, entonces no lo dejé.

-- No, no quiero.-- dije e hice un puchero.
-- Te daré un dulce.-- río intentando convencerme. Asentí.

Abrí un poco mis piernas y pasó la toalla húmeda por donde estaba pegajosa. La toalla estaba bastante fría debido a que estaba húmeda.

-- Ah, detente.-- me quejé.
-- Sólo un poco más.-- habló amablemente y continuó limpiando.

Me secó cuidadosamente y sin previo aviso volvió a pasar la fría toalla por mi entrepierna. Me sobresalté.

-- No, ya no quiero.-- volví a quejarme.-- Déjame.

La puerta del cubículo fue pateada provocando que está fuera abierta de golpe.

--¡Hijo de puta!-- una voz conocida se hizo presente.-- Déjala.

JungKook fue tomado de los hombros y sacado de golpe de aquel cubículo.

-- Esper...-- un puñetazo en su rostro lo silenció.

Los chicos estaban afuera y al escuchar el alboroto entraron rápidamente al baño para ver que era lo que ocurría.

-- ¡Tae!-- Jin llamó la atención del nombrado.
-- ¡Detente, es JungKook!-- gritó NamJoon.

Las luces del baño alumbraban débilmente, los chicos apenas y pudieron reconocer a JungKook tirado en el suelo.

-- ¿JungKook?-- dijo Tae mirando al chico que había golpeado.-- ¿Qué carajo haces ahí adentro?
-- ¡Kookie!-- salí del baño y me lancé sobre él para abrazarlo haciendo a un lado a Tae.-- ¿Estás bien?

Me acomodé sobre él sin cuidado y mi vestido quedó ligeramente levantado dejando un poco a la vista mi trasero... sin ropa interior.

-- Ya veo que era lo que JungKook estaba haciendo ahí adentro.-- dijo Suga sonriendo pervertido.

Me tardé 3 mil años, lo siento.

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