Paradise ♡ | •BTS• | +18

Capítulo 58

Desperté al día siguente recostada al lado de NamJoon. Su presencia era cálida, y su brazo rodeaba mi cintura.

Me levanté de la cama sin despertarlo, me vestí y bajé a la cocina. Tenía mucha hambre estos últimos días y no tenía el ánimo para esperarlos a todos.

Preparé un plato de cereal y me senté en el suelo. Comía lentamente mientras miraba mi reflejo en el cristal de la estufa, cuando vi a alguien detrás de mí.

-- Creí que era el único loco despierto a esta hora.-- dijo JungKook.

Le sonreí y se sentó a mi lado.

-- He estado muy preocupado estos días, todo lo que te ha pasado y lo que le pasó a RapMon-hyung. Es estresante.-- suspiró.
-- Lo siento.-- respondí.-- Sé que todo lo que ha pasado es culpa mía...
-- Lo es.-- me interrumpió.-- Desde que llegaste lo único que has traído a nosotros son problemas. Causaste problemas entre nosotros, problemas que nunca habríamos tenido de no ser porque eres una chica... Amor ¿Si quiera sientes algo así por alguno? Nos hiciste caer en rumores estúpidos, también eres una zorra y por eso estamos en esta situación. Ja, parece que solo estás aquí para echar las cosas a perder.

Un nudo apareció en mi garganta. No podía ni siquiera mirarlo a la cara.

-- ¿Por qué no mejor te vas?-- terminó.

Me levanté del suelo y salí de la cocina. Tomé una sudadera que estaba en el sofá y salí de la casa. Para ese momento mi cara estaba cubierta de lagrimas.

No tenía a dónde ir. Todo lo que conocía estaba relacionado con los chicos y no quería darles más problemas. Entonces caminé sin rumbo.

• • •

Pasaron algunas horas y yo continuaba caminando. Los pies me dolían y tenía mucha sed; llorar me había deshidratado.

Mi celular sonaba como loco. Cada llamada provenía de ellos pero no quería contestar. Tal vez JungKook tenía razón, no quería molestarlos más.

Llegué a un parque y me senté en una banca mientras miraba la pantalla de mi celular. Mensajes y llamadas inundaban la barra de notificaciones. Los nombres de cada uno de ellos, excepto JungKook.

Nuevamente un nudo en mi garganta se hizo presente. Estaba muy herida; que todas aquellas palabras hirientes salieron de la boca de una persona a la que de verdad amaba, sentía mucho cariño por JungKook, pensé que todo aquello era mutuo... Pero me equivoqué.

Lloraba de forma silenciosa, usaba la capucha de la sudadera para tapar mi rostro. Odiaba que la gente me viera en ese estado.

-- ¿____? ¿Eres tú?-- una voz conocida llamó mi atención.

No levanté la cara. La voz de JiSung me puso nerviosa ¿Qué iba a decir si me preguntaba que había pasado? No podía decirle que JungKook me echó de la casa.

-- ¿Estás bien?-- habló nuevamente.

Negué con la cabeza. No trató de verme a los ojos, simplemente me abrazó.

-- Te llevaré conmigo, no puedo dejarte aquí. Llamaré un taxi.--

El taxi no tardó mucho en llegar. Durante el trayecto miraba hacia la ventana, pensaba en lo que pude haber hecho mal para que JungKook pensara así de mí, en qué me equivoqué. Tanto llorar me había desgastado, entonces me quedé dormida.

• Con los chicos •

-- ¡No atiende las llamadas!-- habló YoonGi alterado.