Cap. 26: Las minas Umbra

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-¿Qué te parece Sahira?- (Celine)

-*Asienta con la cabeza* Dulce. Me gusta.- (Sahira)

-¿Viste? Yo también adoro ese postre. Es mi favorito. De ahora en adelante vendremos juntas a comer algunos si es que te agrada la idea.-

-¡Sí!- Mientras responde agarra otra gran porción de torta y procede a comérselo.

Luego de comprarle ropa decidimos venir a comer algo para hacer tiempo hasta que Eredas y Trevor se despierten. 

Sahira parece que nunca antes había probado torta porque ahora mismo ella está comiendo de manera muy frenética, incluso parece que le gustó más que a mí. Ahora mismo está al costado mío con las mejillas y las comisuras de su boca llena de crema de las tortas que ha estado comiendo.

Una vez ella termina su rebanada, agarro una servilleta y la volteo para empezar a limpiarle su rostro.

-Sahira. No comas tan de prisa.- (Celine)

-Sí. Es muy rico.- La sonrisa que mostró luego de responder me dio un fuerte golpe de ternura. Es tan pequeñita y cachetona.

Luego de limpiarle, ella intenta alcanzar el resto de la torta que se encontraba en el centro del mesa, pero rápidamente lo agarro y lo alejo de ella. El rostro de duda y tristeza que me mostró me partió el alma, pero lo hago por su bien... y el de la torta.

-Sahira, sé que te gustó mucho pero si comes demasiados postres te vas a empachar y créeme cuando te digo que no es agradable. Ya es suficiente por hoy, mañana comeremos más.- (Celine)

Sin decir nada y haciendo únicamente un puchero, ella guardó silencio y se sentó en su asiento mientras observaba su leche. Parecía que no le gustaba.

-Sahira. Bebe tu leche, es muy importante. Si no bebes vas a ser pequeña toda tu vida ¿No quieres ser tan alta como yo de grande?- (Celine)

-Nyaa. No le mientas a la niña, nadie puede ser tan alta como tu.-

Volteo a la mesa que estaba detrás de nosotras para ver quién soltó esas palabras  y veo que estaba Cattia sentada mientras tomada un poco de leche. Sentada al costado de Cattia estaba la loba gris Tiana.

-¿Cómo me has encontrado? Ya no conservo mi Aura como para que puedas rastrearme.- (Celine)

-¿Olvidas que soy una mujer bestia? Puede que no pueda rastrearte por medio de tu Aura pero como tengo bien aprendido tu aroma puedo encontrarte si no estás demasiado lejos.- (Cattia)

-Aunque eres inútil si se aleja más fufufu.- Murmura Tiana lo suficientemente fuerte para que Cattia lo escuche.

-¡Tu cállate!- (Cattia)

-¿Lograste encontrarlo?- (Celine)

-No aún. Solo queda un lugar por ir a buscar pero no poseemos el permiso para entrar a esa área.- (Cattia)

-¿Esa área? ¿Dónde falta?- (Celine)

-Las minas. Debido a la alta concentración de energía Umbra gracias a la gran cantidad de piedras mágicas y sobre todo las piedras Umbra, en ese lugar es muy fácil esconder tu Aura tanto de los enemigos como de los aliados. Si queda un lugar dentro del reino para revisar sería ese lugar.- Responde la colosal loba gris.

-El noble que te ayudó en esa noche nos informó que la barrera fronteriza no ha sufrido ningún cambio, lo que indica que nadie ha entrado ni salido del reino últimamente. Al menos estamos seguros que él sigue dentro del reino. Nosotras dos revisamos todos los posibles lugares en donde él podría haberse escondido y solo queda las minas por ver, pero debido a que es un lugar muy importante para el reino no nos permiten el paso, o al menos durante los periodos de trabajo.- (Cattia)

Arenam: Umbra - Arena: SombraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora