Cap. 38: La aflicción del pasado.

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-¿Enserio no quieren descansar un poco más antes de partir?-

-De verdad Amelia, estamos bien. Descansaremos durante el viaje. Según el mapa, luego del pueblo que está a dos horas de tu mansión tendremos un viaje de aproximadamente 14 horas antes de encontrar otro punto de descanso. Tendremos bastante tiempo para descansar.-

Después de que todo el asunto anterior se arreglara, pasamos un día en la mansión de Amelia para deshacernos de la fatiga. Las heridas aún persisten, pero eso no será algo que se vaya en un solo día de descanso. Si nos quedamos a esperar a que sanen todas nuestras heridas, de seguro que pasaría como mínimo una semana.

-¿De verdad? Realmente lo lamento por todo lo que tuvieron que pasar.-

-Enserio Amelia, no hace falta que te disculpes más.-

Prácticamente desde ayer ella ha estado disculpándose siempre que podía. Se nota que está realmente afligida por lo que hizo, pero eso es una buena señal de que no volverá a tomar ese rumbo. Ya puedo estar tranquila de que con esa mentalidad no hay posibilidad de que se una a El Diamante.

Actualmente Melissa, Aurelio y Myles están haciendo los preparativos para partir. Myles está conectando las carretas mientras que los otros dos cargan la carreta adicional. Se decidió tomar la carreta más grande, más rústico y resistente de todas las que tenía Amelia para que de esa forma sea útil en el viaje y no llame mucho la atención de los bandidos.

Melissa quería llevar la carroza de lujo de Amelia, pero eso seguramente llamaría la atención y no sería bueno en un viaje con tantos heridos.

-Cattia ¿Necesitas ayuda con eso?- (Loren)

-Nyajajaja. Estoy bien pequeña, esto no es nada.-

De repente escuché a Loren ofreciéndole ayuda a Cattia por lo que me voltee curiosa de que ella no esté descansando.

Resultó ser que Cattia estaba cargando con un gran cofre.

-¿Cattia? ¡¿Qué estás haciendo?! ¡Deberías estar recuperándote!-

Le grito mientras me acerco. Ella estaba sudando mientras temblaba al cargar el cofre por lo que rápidamente alzo el cofre por ella. Al tomarlo escuché un sonido metálico venir de adentro.

-¿Eh? ¿Qué hay adentro?-

-Nyaaammm... ¿Comida?-

Apoyo el cofre en el suelo y al abrirlo veo montones de monedas de oro.

¡Son las pertenencias de Amelia!

-¡Cattia! ¡¿Estabas robándole a Amelia?!-

-Celine, no es lo que parece. Todos esos bienes no me pertenecen. Son las riquezas de las personas que esclavizaba y asesinaba, por lo que no soy quién para decirle algo a la señorita Cattia por si quiere llevárselos. No tengo el derecho de usar ese dinero.- (Amelia)

-¿No son esos las ganancias de tu marido?-

-Las riquezas de mi ex-esposo se acabaron hace mucho, mucho tiempo. Todo lo que ves acá fue robado.-

Cattia suelta una ligera sonrisa y me observa.

-Ladrón que roba a otro ladrón tiene 100 años de perdón.- (Cattia)

Ella me quita el cofre de mis manos y comienza a llevarlo hacia la carreta.

*Crack*

-¿Qué fue eso?- (Celine)

Observo a Cattia y ella estaba llorando, aunque se esforzaba por no demostrarlo.

-Cattia... Eso fue ¿Tu brazo?-

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⏰ Última actualización: Aug 07, 2019 ⏰

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