Sus ojos ardían. Dolía incluso pestañear pues ante cada aleteo de sus pestañas el impulso de caer dormida y no despertar jamás se apoderaba de su ser.
Sabía que grandes ojeras adornaban su rostro consternado y que el iris de sus ojos eran opacados por el tono rojizo que se presentaba en ellos.No le faltaban ganas de seguir llorando, pero parecía que sus lagrimales se habían secado completamente. Ya no tenía lágrimas para derramar. No le quedaban.
Sorbio su nariz. La misma que también había adquirido un tono rojizo que combinaba con sus mejillas, dándole un aspecto de indefensión y ternura.
No entendía por qué. No entendía hechos. No quería entenderlos.
¿Por qué? ¿Desde cuándo? ¿Acaso ella no fue suficiente?
Tenía tantas preguntas rondando en su mente que más triste aún era el hecho de que no tendrían respuesta. Estaba segura de eso.
Separó sus secos y agrietados labios para dejar escapar un suspiro que estaba ahogando hace horas atrás. Pero no pudo.
Sintió como su garganta se cerraba y cómo milagrosamente su vista volvía a nublarse. Su expresión cambió a una totalmente sufrida y dejó escapar un sollozo. Dos. Tres.
Era la primera vez que desde que todo aquello sucedió, lloraba en soledad.
Quiso gritar. Quiso despedazar con sus propias manos la almohada que se encontraba sobre sus desnudas piernas.¿Qué le quedaba, más que la miseria?
Estiró la manga de su abrigo y con rabia secó sus lágrimas, las cuales eran reemplazadas rápidamente por otras nuevas que recorrían un camino desde sus pestañas inferiores hasta su mentón para luego caer en alguna parte de sus piernas o de la cama.
La cama que compartía con él.
Intentó alejar esos pensamientos concentrándose en el monótono ruido que hacía el reloj de mesita a su lado.
Con desesperación tomó sus sienes con sus manos, como si quisiera callar a su mente por sólo unos segundos.
Tic.
Pudiste hacer algo.
Tac.
Por favor, no.
Tic.
Lo dejaste ir.
Tac.
¡No!
Tic.
No fuiste suficiente para él.
Tac.
¡Basta!Sin percatarse de que el grito no sólo se oyó en su cabeza sino también en la habitación, tomó el despertador y lo lanzó contra la pared, volviendolo añicos.
Ya no quería temerle al tiempo. El tiempo ya no le importaba.
No era de su interés que los segundos, los minutos, las horas, los días o las semanas pasaran por su lado.Ya no le importaba que la vida le pase por el costado.
Ya no sabía si quería vivir. O más bien si le daba igual.
—Yo moriría por ti, y lo sabes —dijo ella intensificando su abrazo luego de haber tenido una profunda charla con su novio.
Tyler medio sonrió, mientras hacía leves caricias en el brazo de la chica.
—Eso es fácil. Lo difícil es vivir por alguien.
Quedó pensativa, observando un punto fijo en la pared.
Ahora sabía con exactitud a qué se refería él.
Se le hizo demasiado difícil e incontrolable el poder vivir por ella.Tyler ya no estaba.
Se había ido.
Tyler había tomado su último aliento.
Se había quitado la vida.Había explotado y arrasado con todo y todos a su paso.
¿Por qué?
El corazón se le estrujó al pensar por décima vez que ella no había sido de suficiente ayuda.
"Podría irme con un «Bang».."
Y lo hiciste.
"¿No recibimos suficiente amor?
Al parecer no. Jamás.
"Dicen, ¿cómo se pudo ir si lo tenía todo?"
Y yo digo: ¿a qué demonios se refieren con "todo"?
Se abrazó a sí misma antes de tomar las sábanas blancas que cubrían sólo una parte de la cama para luego cubrirse con ellas. Protegerse con ellas.
Como cuando eres pequeño y crees que los monstruos que rondan de noche en tu habitación no podrán contigo si te proteges con las sábanas.Cuando creces, caes en la cuenta de que los monstruos son reales y que no basta con una simple sábana para liberarte de ellos.
A veces incluso tienes que tomar tu propia vida para deshacerte de esos monstruos.
En parte comprendía a Tyler.
—Prométeme algo —dijo él tomando su mano con delicadeza para medirla con la suya.
—Claro —respondió sin dudar.
—Si algún día me... pierdo a mí mismo... no te lamentaras un día —dijo seriamente a la vez que sus ojos se fijaban en los de ella —y te moveras hacia alguien más.
Ella sujetó su mano. No respondió.
Se debatió mentalmente en si debería cumplir uno de sus últimos pedidos. No cumpliría esa promesa inconclusa. No podía. No aguantaría estar sin él.
Lo necesitaba. Lo necesitaba con todas sus fuerzas, con las mismas que se le estaban acabando.
Él merecía ser felíz. Pero al parecer, no hubo una sábana lo suficientemente resistente para soportar a sus monstruos.
—Te necesito, Ty —dijo en un suspiro como si él fuese capaz de oírla, esté donde esté. Se abrazó a la almohada que él solía usar y cerró sus ojos.
Quizás y al menos, en sus sueños el podría ser felíz.---
One Shot sad. Lo siento.
Trench es una pieza de arte.Y se darán cuenta de que aunque hay un guiño a Ride, el Shot está basado en Neon Gravestones. Esa canción me produjo un sentimiento extraño. Saber que Tyler podía estar pasando por momentos oscuros y el escucharlo cantar el "Promise me this" me partió el corazón. Pero no quiero entrar en detalles porque voy a ponerme mal. xd
Espero que disfruten el OS y que hayan reproducido Trench tantas veces como puedan.
Un abrazo.
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One Shots // Twenty Øne Piløts.
FanfictionHistorias cortas sobre TØP. Créditos a quien hizo el fanart.