Abrió y cerró los dedos así logrando que el guante se ajustara a la perfección a su mano, al conseguirlo, levanto la mirada, sus ojos celestes se encontraron con el reflejo que le regresaba el espejo, ya lucía todo su traje, lo único que le faltaba era la máscara.
Jason miró atentamente su reflejo, por un breve segundo no llegó a reconocerse, no sabía quién era aquel sujeto que le regresaba la mirada. Mientras más se miraba, le fue más sencillo el ir comprendiéndolo. Entendía que si lo decía en voz alta, posiblemente sonara un tanto extraño e infantil, pero en su mente tenía una lógica que tan solo él comprendía. El traje lo había cambiado. Y no se refería solo al hecho de que se sentía más alto o que resaltaba su musculatura, sino a la sensación de portar aquel símbolo, al momento que se deslizo por su piel, sentía como estaba cambiando, ya no era Jason Maxwell, era algo más, algo diferente, distinto...
—Un héroe —susurró para sí mismo, al comprenderlo, le fue posible liberar toda la tensión que cargaba en el cuerpo en forma de un suspiro.
Volvió a cerrar y abrir los dedos, no era su primera vez saliendo a cuidar de la ciudad, aunque en aquella ocasión tenía permiso de hacerlo, por lo que la responsabilidad de hacerlo bien era mucho más pesada. Giró sobre sus pasos, abrió la puerta de su habitación y salió.
—Owen —llamó al ver a su amigo unos cuantos pasos por delante de él, el rubio se guardó algo en la espalda baja, haciendo que Jason frunciera el ceño, cerró la puerta y se apresuró para darle alcance a su amigo, cuando lo hizo, le fue imposible contenerse—. Eso que llevas en la espalda, son navajas, ¿Cierto?
Owen se mostró un poco sorprendido por la observación de su amigo, pero tal gesto solo duro unos segundos, y dio paso a las tremendas ganas que tenía de mostrar aquellas cosas a todo el que estuviera dispuesto a escucharlo.
—Así es —con un rápido movimiento azulado, Owen saco una de las dagas y se la mostro a Jason. No debía medir menos de diez centímetros de largo por cinco de ancho, además que la hoja no era de frío metal, sino de obsidiana.
—¿Es obsidiana? —preguntó Jason, mientras tomaba la daga entre sus manos y analizaba la hoja, al hacerlo, le hizo recordar como una de aquellas hojas le había hecho un preocupante corte.
—No daña tanto como el metal —explicó Owen con tranquilidad—. Además que no pienso ir por allí cortando a la gente, tan solo las tengo con un recurso más, puedo cortar unos cuantos tendones, así dejando fuera de combate a personas peligrosas.
—Es muy interesante —acepto Jason devolviéndole la daga, Owen volvió a guardarla en la vaina que tenía en su espalda baja, fue hasta ese momento que Jason le prestó atención a su traje.
Si había aprendido algo al ver los trajes de sus padres, era que la Nación no variaba mucho la forma en que fabricaba sus trajes, lo que casi siempre cambiaba, era su diseño. Owen lucía una camiseta de mangas largas muy similar a la suya, se le ajustaba de gran manera a sus músculos, en su gran mayoría era oscura, pero por la espalda se podían ver dos rayos azules que ascendían por toda la espalda y continuaban hasta la máscara donde la dividían en dos rayos, dejando la franja de en medio de un color oscuro. Su pantalón era oscuro, al igual que sus botas y guantes. En las mangas lucía rayos azules que giraban alrededor de su brazo, y justo en medio del pecho, se podía ver una estrella azul con una cola venida desde el hombro izquierdo, simulando la caída de una estrella.
—Así que decidiste hacerlo tu símbolo —exclamó Jason, su amigo comprendió al instante a lo que se refería, no le había contado a muchos la manera en que había obtenido sus habilidades.
—Sí, creo que me ayudara a recordar de dónde vengo y hacía donde voy —dijo con orgullo. Jason intento decir algo oportuno, pero por más que lo busco, nada acudió a su mente.
ESTÁS LEYENDO
El Nombre del Héroe (Crónicas de un Inesperado Héroe IV)
Ficção CientíficaCrónicas de un Inesperado Héroe, se conforma de seis volúmenes: "Tormenta de Héroes", "Choque de Maestros", "Sueño de Héroes", "El Nombre del Héroe", "El Temor de un Dios" y, "Las Puertas del Destino" Crónicas del Héroe Caído, narra el nacimiento, a...