Capitulo 3 - (Parte 2)

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Afuera, la niebla y las nubes lo cubrian todo, el bosque se habia oscurecido y empezaba a hacer frio, mas frio que el dia anterior, de hecho.

Mientras el fuego empezaba a calentar la habitacion me levante y camine a la cocina. La nota seguia intacta y el sandwich aun estaba donde lo habia dejado. Verti algo de agua en una taza metalica y la puse a hervir mientras buscaba un par de cosas en las estanterias. Heche algunas hierbas y hojas en la taza y deje que siguiera hirviendo por un rato. Camine hasta el cuarto de Addie y revise que estuviera bien, seguia dormida, no tenia fiebre ni algo fuera de lo normal, supongo que fue el cansancio y el dolor el que la hicieron dormir tanto. Me acoste a su lado, abrazandola con cuidado de no despertarla.

-Mmm- Dio un quejido suave mientras se acurrucaba en mi, sacando sus brazos, apoyandolos en mi pecho, escondiendo su cabeza en mi hombro.

Acaricie su cabello, abrazandola, pegandola un poco mas a mi, estaba tibia. Ella volvio a suspirar y bostezo, tallandose los ojos, abrazandome, aun con sus ojos cerrados.

-Buenos dias- Dijo, con su voz debil y tierna. Me abrazo un poco un poco mas fuerte , haciendo que las cobijas que estaban sobre ella se pegaran y se movieran junto con ella mientras se acurrucaba en mi pecho, algo sonrojada.

-Buenos dias- Le dije, besando su cabeza. Ella se estiro, pasando sus brazos por encima de mis hombros y me rodeo el cuello, abrazandome tiernamente.

-Hay algo de comer?- Me pregunto, separandose, sentandose, aun con sus piernas bajo las cobijas, me miraba con una sonrisa y un leve rubor en sus mejillas.

-Si, vamos- Le dije, y sostuve su mabo y le ayude a bajar de la cama. Ella en serio estaba debil, habia perdido buena parte de su sangre el dia anterior, y aun asi ella sonreia y se sonrojaba, como si todo estuviera bien. Al lecantarla tuve que tomar uno de sus costados para que al jalar su brazo no se lastimara, pero a pesar de eso dio un quejido al pararse.

-Tenemos una silla de ruedas?- Me pregunto. Se le veia mareada y le costaba mantenerse en pie, empezaba a preocuparme, pues para estar asi despues de haber descansado tuvo que haber perdido mucha sangre.

-Tranquila- Le dije suavemente, sentandola en la cama mientras iba al armario y recogia una silla de ruedas algo vieja que teniamos ahi. La abri y la conduje hasta el lado de la cama. -Bien, uno, dos...- Conte, soteniendo sus costados con delicadeza. -Tres!- Dije y rapidamente, mientras ella me tomaba de los hombros, la pase a la silla de ruedas.

-Gracias- Ella dijo, besandome la frente mientras la terminaba de acomodar en la silla y la soltaba. Mientras yo me enderezaba ella puso sus manos en su regazo y sonrio, ladeando la cabeza mientras miraba hacia el piso.

-Anda, vayamos a comer- Le dije, poniendome detras de la silla, empujandola fuera de la habitación, con cuidado de no chocar con los marcos de la puerta.

-No pense estar en silla de ruedas tan joven- Dijo Addie mientras soltaba una risita, dejando su cabeza caer hacia atras, mirandome.

-Menos mal que estoy aqui- Dije mientras la llevaba por el pasillo hasta llegar a la cocina. Estacione la silla de ruedas frente a la mesa, y como Addie aun me miraba, y probablemente lo seguiria haciendo hasta que yo hiciera algo, me encurve y tome sus sienes, sonriendo. Ella sonrio de igual manera y cerro los ojos, sonrojada. Me acerque y le di un largo beso en la frente. Al separarme sacudi su cabello y ella se enderezo, mirandome.

Tome el sandwich que habia dejado en el microondas y lo recalente en el horno, habia quedado un poco mas crujiente que antes, pero el queso se habia derretido bastante bien y un delicioso aroma llenaba la cocina. Con cuidado lo saque de el horno y lo puse en un plato, poniendo este en la mesa. Saque una servilleta de tela roja que tenia en el bolsillo interior de mi chaqueta y la puse en su regazo. Puse el plato de comida frente de ella y me sente en una silla. La mesa era cuadrada, y algo pequeña, pero era bastante comoda. Me sente en la silla siguiente a Addie y le sonrei, apoyando uno de mis brazos en la mesa, sosteniendo mi cabeza mientras miraba a Addie.

Desde que habia servido el sandwich Addie tenia un lindo brillo en los ojos, y despues de haberme sentado ella me miro, sonriendo, ya sin rubor en las mejillas.

-Amo que cocines para mi- Dijo ella, tomando el sandwich, mordiendolo, llenando sus labios con pequeñas migajas, cerro los ojos y empezo a masticar. Mientras lo hacia sonrio con satisfaccion y suspiro, al parecer le habia gustado. Mientras ella terminaba de comer yo me levante y puse un par de leños mas en la chimenea, esta, que ya casi se extinguia, despues de unos minutos volvio a encenderse, recobrando la luminocidad y el calor que tenia hace rato.

Volvi a la cocina, agitando el cabello de Addie al pasar a su lado, y me sente en la misma silla de antes.

-Cocinas muy rico- Dijo ella, sonriendome. Vi que tenia aun algunas migajas en su boca asi que tome la servilleta que habia dejado en su regazo, la cual seguia, y limpie sus labios con cuidado. Ella primero se sorprendio y luego se acerco mas, dejandome limpiarla bien. Al quitar la servilleta de su labios ella me beso la mano rapidamente y volvio a recostarse en su silla.

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